El expresidente Donald Trump afirmó el jueves que los republicanos perdieron dos escaños en el Senado de EE. UU. que representaron a Georgia en las elecciones de 2020 a causa del liderazgo republicano estatal y del líder republicano del Senado, Mitch McConnell (R-Ky.).
Trump dijo en un comunicado escrito que «los republicanos no acudieron a votar debido a que estaban muy enojados y decepcionados con el liderazgo republicano de Georgia y con el gobernador [Brian] Kemp por no enfrentarse a Stacey Abrams y al desastroso Decreto de Consentimiento que prácticamente elimina los requisitos de verificación de firmas en todo el estado (y mucho peor), y no fue aprobado por la Legislatura del estado como lo requiere la Constitución».
La negativa de McConnell a apoyar una propuesta para enviar pagos de estímulo por 2000 dólares fue la otra razón, afirmó Trump.
Esa negativa «fue utilizada en contra de nuestros senadores y los 2000 dólares serán aprobados de todos modos por los demócratas que compraron las elecciones de Georgia—¡Y McConnell les permitió hacerlo!»
Las solicitudes de comentarios para las oficinas de McConnell y Kemp no fueron respondidas de inmediato.
El control del Senado se redujo a las dos elecciones en Georgia, las cuales fueron a segunda vuelta luego de que ningún candidato alcanzara la mayoría en los resultados del 4 de noviembre de 2020.
Los republicanos ocuparon ambos escaños. David Perdue, un empresario, ganó las elecciones de 2014. Kelly Loeffler, una mujer de negocios, fue nombrada para ocupar un puesto luego de que el senador Johnny Isakson (R-Ga.) se retirara debido a problemas de salud.
Perdue venció al cineasta Jon Ossoff en las elecciones generales por más de 88,000 votos, pero estuvo a punto de evitar una segunda vuelta. Loeffler y el pastor Raphael Warnock surgieron de unas elecciones libres para todos de unas primarias de la jungla durante los dos años restantes del mandato de Isakson, junto con el representante Doug Collins (R-Ga.) que obtuvo el tercer lugar.
Ossoff triunfó sobre Perdue en la segunda vuelta por aproximadamente 55,000 votos, mientras que Warnock venció a Loeffler por más del 1 por ciento.
Ellos prestaron juramento el 20 de enero, el mismo día en que asumió el cargo el presidente Joe Biden.
Las victorias dieron a los demócratas el control del Senado, a pesar de estar dividido equitativamente entre los partidos, incluyendo a dos independientes nominales que forman parte de los demócratas. Eso es porque la vicepresidenta Kamala Harris puede emitir votos de desempate en su papel de presidenta de la cámara alta.
Trump, muchos demócratas y algunos republicanos apoyaron un plan a fines del año pasado para enviar una nueva ronda de pagos de estímulo a la mayoría de los estadounidenses por un total de 2000 dólares.
McConnell en el Senado se refirió a los pagos directos como «socialismo para los ricos«.
Kemp defendió sus acciones postelectorales, diciendo que no podía intervenir legalmente en el proceso electoral a pesar de la presión de Trump.
Desde entonces, Trump ha pedido que Collins desafíe a Kemp en 2022 y las primeras encuestas muestran que el primero ganaría.
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