El presidente electo Donald Trump dijo el 27 de noviembre que tiene la intención de lanzar una campaña publicitaria «a gran escala» destinada a informar a los estadounidenses de los peligros del fentanilo cuando asuma el cargo en enero.
«Trabajaré en una campaña publicitaria a gran escala en Estados Unidos, explicando lo malo que es el fentanilo para la gente: millones de vidas destruidas innecesariamente», escribió Trump en un posteo en Truth Social.
Trump no proporcionó más detalles sobre la campaña publicitaria, incluido cuánto costaría o cuánto tiempo pretende llevarla a cabo su administración.
Prometió que para cuando termine la campaña, «todo el mundo sabrá lo realmente malo que es el horror de esta droga».
El fentanilo es un opioide sintético entre 50 y 100 veces más potente que la morfina. Fue aprobado por primera vez por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) para la cirugía o para tratar el dolor agudo, normalmente el del cáncer.
Según la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), una dosis de tan solo dos miligramos puede ser letal.
La DEA dijo que incautó más de 80 millones de píldoras falsas con fentanilo y casi 12,000 libras de polvo de fentanilo en 2023. La agencia federal señaló que las pruebas de laboratorio de la DEA indicaron que 5 de cada 10 pastillas analizadas en 2024 contienen una dosis potencialmente mortal de fentanilo.
Cada vez más, el fentanilo ilícito —que a menudo se mezcla con otras píldoras falsificadas hechas para parecerse a Xanax, Adderall u oxicodona— ha estado alimentando la crisis de opioides en los Estados Unidos, con el número de muertes por sobredosis en Estados Unidos aumentando casi cada año durante las últimas dos décadas.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, el fentanilo causó la muerte de 74,702 estadounidenses el año pasado y de 76,226 en 2022.
Los comentarios de Trump se producen pocos días después de que dijera que su administración impondría nuevos y radicales aranceles a México y Canadá a menos que las dos naciones adopten una postura más dura en materia de seguridad fronteriza y tráfico de drogas.
En un posteo del 24 de noviembre en Truth Social, Trump dijo que una de sus primeras acciones tras jurar el cargo el 20 de enero de 2025 será firmar una orden ejecutiva imponiendo un arancel del 25 por ciento a todos los bienes importados de Canadá y México.
Agregó que los aranceles se mantendrán hasta que se detenga el flujo de inmigrantes ilegales y drogas hacia Estados Unidos.
«Tanto México como Canadá tienen el derecho y el poder absolutos para resolver fácilmente este problema largamente latente», escribió Trump. «Por la presente exigimos que usen este poder, y hasta el momento en que lo hagan, ¡es hora de que paguen un precio muy grande!».
Trump advierte a China de aranceles adicionales
Trump emitió un mensaje similar esta semana a China, que las autoridades estadounidenses han identificado como la principal fuente de fentanilo ilícito que llega a través de la frontera desde al menos 2017.
En Truth Social, Trump prometió imponer un arancel adicional del 10 por ciento además de los aranceles que ya tiene previstos para los productos chinos, a menos que el Partido Comunista Chino (PCCh) tome medidas más enérgicas para detener el flujo de drogas hacia Estados Unidos.
Trump dijo que ha mantenido muchas conversaciones con China sobre las «cantidades masivas de drogas, en particular fentanilo, que se envían a Estados Unidos, pero sin resultado».
«Representantes de China me dijeron que instituirían su pena máxima, la de muerte, para cualquier narcotraficante atrapado haciendo esto pero, desafortunadamente, nunca cumplieron, y las drogas están entrando a nuestro país, principalmente a través de México, a niveles nunca antes vistos», escribió.
Los líderes de las tres naciones han respondido desde entonces a la advertencia de Trump. La viceprimera ministra canadiense, Chrystia Freeland, y el ministro de Seguridad Pública, Dominic LeBlanc, dijeron en una declaración conjunta que Canadá otorga «la más alta prioridad a la seguridad fronteriza».
Liu Pengyu, portavoz de la embajada china en Washington, dijo que Beijing ha tomado medidas para combatir el narcotráfico y ha mantenido informado a Washington de sus acciones contra los estupefacientes.
«Todo ello demuestra que la idea de que China permita a sabiendas el flujo de precursores de fentanilo hacia Estados Unidos es totalmente contraria a los hechos y a la realidad», dijo Liu.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, escribió en un posteo en X el 27 de noviembre que tuvo «una excelente conversación con el presidente Donald Trump» y le contó cómo los esfuerzos en curso de México para ayudar a los migrantes han aliviado la situación fronteriza.
«Abordamos la estrategia mexicana sobre el fenómeno de la migración y compartí que no están llegando caravanas a la frontera norte porque son atendidas en México».
«También hablamos de reforzar la colaboración en temas de seguridad en el marco de nuestra soberanía y de la campaña que estamos realizando en el país para prevenir el consumo de fentanilo».
Con información de Reuters.
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