LA CROSSE, Wisconsin, y POTTERVILLE, Michigan—Como parte de lo que llamó un énfasis “pro-familia”, el expresidente Donald Trump reveló una nueva promesa para ayudar a las parejas que están tratando de concebir hijos utilizando la fertilización in vitro.
“Estoy anunciando hoy que, bajo la administración Trump, su gobierno pagará (o su compañía de seguros estará obligada a pagar) todos los costos asociados con el tratamiento de fertilización in vitro”, dijo Trump durante un discurso en Potterville, Michigan, el 29 de agosto.
“Queremos más bebés”, dijo, y agregó que, si gana la reelección, su administración permitiría a los nuevos padres deducir “los principales gastos de los recién nacidos” de sus impuestos.
Durante el discurso de Potterville, y horas después en una segunda parada de campaña en La Crosse (Wisconsin), el candidato presidencial republicano reiteró también sus planes para mejorar la economía estadounidense y reducir la inflación.
La fecundación in vitro (FIV) se convirtió en un tema de la campaña presidencial en febrero, cuando Biden aún era candidato a la presidencia. La Corte Suprema de Alabama dictaminó que, según la ley estatal, los embriones congelados podían considerarse niños.
Esa sentencia tiene implicaciones para el debate sobre el aborto y sobre si la vida comienza en el momento de la concepción. Como consecuencia, algunos proveedores de FIV de Alabama redujeron o suspendieron los tratamientos.
Tras el fallo, Trump expresó su apoyo a la FIV a pesar de la oposición de algunos republicanos, en particular los católicos cuya fe religiosa se opone a la FIV.
Gabbard revela su lucha
La excongresista Tulsi Gabbard se unió a Trump en el escenario del foro ciudadano de Wisconsin el 29 de agosto, ante un aforo de 8000 personas. Gabbard reveló su lucha personal contra la infertilidad.
Gabbard, que se unió al excandidato presidencial Robert F. Kennedy Jr. para apoyar la candidatura de Trump, dijo que hablar de la fecundación in vitro es delicado. “Es la segunda vez que hablo de ello públicamente”, dijo.
Gabbard dijo que ella y su marido querían formar una familia; intentaron la FIV como “la única opción y el último recurso”.
“Es un proceso bastante difícil y muy, muy caro”, dijo Gabbard, quien entonces todavía era congresista en representación de Hawai, dijo que a veces tenía que autoinyectarse los tratamientos en los baños de los aeropuertos cuando viajaba.
Aunque esos esfuerzos resultaron infructuosos, Gabbard dijo que esta opción que “cambia la vida” debería estar disponible para quienes quieran ser padres.
“No conocía su situación”, dijo Trump, y añadió: “Es algo difícil”.
Aunque los intentos de Gabbard fracasaron, “realmente ha funcionado bien para mucha gente”, dijo Trump. “Les dio un hijo cuando no lo habrían tenido”.
“Estoy muy a favor [de la FIV]”, dijo.
El público de La Crosse aplaudió con fuerza la propuesta de Trump sobre la FIV.
Un joven interroga a Trump
Gabbard ejerció de moderadora en un formato de foro ciudadano; cuatro asistentes pudieron hacer una pregunta a Trump antes de que se acabara el tiempo. Una de las preguntas provino de un joven que se identificó como Luke y que votará por primera vez este noviembre. Está estudiando las posturas de los candidatos para decidir su voto.
Mientras económicamente se mantiene a sí mismo y compra su propia gasolina y alimentos, Luke dijo que está sintiendo un pellizco económico, y que muchas cosas parecen inasequibles para él, incluyendo la compra de una casa.
“¿Cuál es su plan para hacer la vida más asequible… para alguien como yo?”, preguntó.
Trump respondió que las políticas energéticas desacertadas son parte del problema. La administración Biden-Harris ha favorecido la energía eólica y solar en lugar de la gasolina, el petróleo y el carbón. Estas políticas han provocado una presión al alza de los precios de la energía, afirmó Trump.
También culpó al gasto público descontrolado de causar inflación. Prometió a Luke que Estados Unidos “se convertiría en la capital energética del mundo” y que la nación pagaría su deuda.
“Vamos a reducir aún más sus impuestos”, dijo. Entonces los precios de los comestibles y los tipos de interés “bajarían como la espuma”, dijo Trump a Luke, y añadió: “Vas a comprarte una casa preciosa… eso se llama el sueño americano”.
Reacción de los ciudadanos de Minnesota
El acto de La Crosse fue retransmitido en directo por varias agencias de televisión el mismo día en que Harris realizaba una entrevista pregrabada con la CNN.
Harris se ha enfrentado a críticas por negarse a conceder entrevistas periodísticas durante más de un mes desde que Biden abandonó la carrera el 21 de julio y lanzó su apoyo a Harris.
“¿Por qué nosotros lo hacemos en directo y ella lo hace grabada?”, dijo Trump entre risas, a lo que el público respondió con carcajadas.
Aunque los 40 minutos del foro ciudadano representan la mitad del tiempo de los discursos habituales de Trump en los mítines, Tracy Hartmann dijo que el evento de La Crosse bien valió las tres horas de viaje desde su casa en Shafer, Minnesota.
“Fue una gran experiencia, con tanta energía; basta con mirar a tu alrededor”, le dijo a The Epoch Times. “Sé que la gente dice que [Trump] tiene mucho dinero, pero él es como nosotros; está con nosotros”.
Su “media naranja”, John Goodroad, dijo que Trump le impresiona porque “tiene un plan” para mejorar la economía. Como Goodroad trabaja para una empresa de construcción independiente, se dio cuenta de que las políticas de Trump que exigen el uso de acero fabricado en Estados Unidos ayudaron rápidamente a reducir los costes durante su presidencia, 2017-21.
Tanto Hartmann como Goodroad dijeron que no les gusta el trabajo que el compañero de fórmula de Harris, el gobernador de Minnesota Tim Walz, ha hecho en su estado. “Está tan a la izquierda”, dijo Goodroad, señalando que el gobernador impuso estrictos cierres a las empresas durante la pandemia de COVID-19.
“Y otra cosa: Trump no tiene que hacer nada de esto”, dijo Hartmann. “Le han disparado, le han acusado, le han impugnado, y está luchando… y tenemos que luchar”.
Recordando que el ex presidente sobrevivió a un intento de asesinato el 13 de julio en Butler, Pensilvania, del que sólo salió con una oreja herida, Hartmann dijo: «Está aquí por una razón».
Remedio económico propuesto
Antes del foro ciudadano de La Crosse, unas 1000 personas se reunieron para un mitin de Trump en la empresa Alro Steel, en Potterville, Michigan.
La empresa familiar de fabricación de metales y plásticos, que se fundó en 1948, tiene plantas también en Cincinnati (Ohio) y en Milwaukee y Oshkosh (Wisconsin).
Flanqueado por pancartas que promovían el crecimiento del empleo, Trump lanzó un mensaje económico dirigido a los trabajadores del sector manufacturero, en particular a los de la industria automovilística. “Estoy aquí hoy con un mensaje sencillo para el trabajador estadounidense del automóvil y para el trabajador estadounidense: su larga pesadilla económica terminará muy pronto”, dijo Trump.
El expresidente prometió reactivar la industria automovilística estadounidense, que, según dijo, estaba al borde del colapso. Propuso bloquear la importación de vehículos eléctricos chinos desde una planta que, según dijo, se está construyendo en México.
“[Los fabricantes de automóviles chinos] no van a tener ningún coche entrando en este país. Si quieren construir una planta, pueden hacerlo. Van a construirla en Michigan, o al menos en algún lugar de nuestro país”, dijo Trump.
Trump repitió su promesa de impulsar la economía aumentando la producción energética estadounidense.
Brandon Reitz, de 22 años, de Eaton Rapids, Michigan, asistió al mitin para escuchar el mensaje económico de Trump. “La fabricación y la inflación… esas son mis principales preocupaciones”, dijo el empleado de Alro Steel a The Epoch Times, añadiendo que lo que más le molesta son los altos precios de la gasolina.
Kevin Kusnick, de 69 años, de Decatur, Michigan, coincidió en que la economía, especialmente la inflación, es el principal problema de estas elecciones.
Kusnick, que está semiretirado del negocio de las excavaciones, dijo a The Epoch Times que el precio del gasóleo es su mayor preocupación. “Probablemente están usando 500 galones a la semana como mínimo”, dijo Kusnick. “El combustible nos cuesta ahora otros 50.000 al año”, añadió. Ese dinero podría haberse utilizado para reducir la deuda o invertir en capital”.
El mitin del expresidente en Michigan y el ayuntamiento de Wisconsin irán seguidos de otro previsto para el 30 de agosto en Johnstown (Pensilvania).
En esos tres estados, Harris aventaja a Trump en la media de sondeos de opinión de RealClearPolitics.
Su mejor resultado es en Pensilvania, con una ventaja de 2.3 puntos porcentuales, seguida de un 1.9 por ciento en Wisconsin y un 0.8 por ciento en Pensilvania. Trump aventaja a Harris en menos del 1 por ciento en otros cuatro codiciados estados indecisos: Arizona, Nevada, Carolina del Norte y Georgia.
La carrera sigue siendo un empate estadístico porque todas esas ventajas están dentro del margen de error de la mayoría de las encuestas.
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