El presidente Donald Trump publicó en Twitter que Estados Unidos tiene «en la mira 52 sitios iraníes», después de las amenazas de parte del régimen iraní.
Trump advirtió a Irán el sábado por la noche que no atacara «a ningún estadounidense o patrimonio estadounidense».
Más temprano ese día, el comandante de la Guardia Revolucionaria, el general Gholamali Abuhamzeh, amenazó con tener 35 objetivos estadounidenses al alcance de la república islámica, tras la muerte del general iraní Qassem Soleimani por ataques aéreos estadounidenses.
«Irán está hablando muy audazmente de atacar ciertos bienes de Estados Unidos como venganza por haber librado al mundo de su líder terrorista que acababa de matar a un estadounidense y de herir gravemente a muchos otros, sin mencionar a toda la gente que ha matado durante su vida, incluyendo recientemente a cientos de manifestantes iraníes», escribió Trump.
«Que esto sirva como una ADVERTENCIA de que si Irán ataca a algún estadounidense, o a activos estadounidenses, tenemos en la mira 52 sitios iraníes (que representan a los 52 rehenes estadounidenses tomados por Irán hace muchos años), algunos a un nivel muy alto e importante para Irán y la cultura iraní, y esos objetivos, y el propio Irán, serán atacados MUY RÁPIDAMENTE y MUY DURAMENTE».
«Los Estados Unidos no quieren más amenazas», declaró el Presidente.
….targeted 52 Iranian sites (representing the 52 American hostages taken by Iran many years ago), some at a very high level & important to Iran & the Iranian culture, and those targets, and Iran itself, WILL BE HIT VERY FAST AND VERY HARD. The USA wants no more threats!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 4, 2020
Trump también criticó a Soleimani por su participación en la muerte de cientos de manifestantes iraníes en su país y por organizar ataques a la embajada de Estados Unidos y otros ataques en otros lugares.
Las amenazas de Teherán
En sus amenazas en nombre del régimen de Teherán, Abuhamzeh había dicho que «objetivos vitales americanos» fueron «identificados por Irán desde hace mucho tiempo».
«Unos 35 objetivos estadounidenses en la región, así como Tel Aviv, están a nuestro alcance», dijo Abuhamzeh según la agencia de noticias Tasnim, de acuerdo al informe de Reuters.
El general iraní también planteó la posibilidad de posibles ataques a destructores y buques de guerra estadounidenses en el Estrecho de Ormuz.
En otras amenazas veladas, la milicia Kata’ib Hezbollah -también Kataib Hezbollah- apoyada por Irán, que Estados Unidos ha designado como grupo terrorista, advirtió el sábado a las fuerzas de seguridad iraquíes que se mantuvieran alejadas de las bases de Estados Unidos en Irak, según la televisión de al-Mayadeen.
Sin embargo, expertos y personas familiarizadas con la situación dijeron a The Epoch Times que es poco probable que el líder supremo de Irán, Ali Khamenei, ordene ataques a los activos de Estados Unidos mientras están de luto por Soleimani.
«Es improbable que Khamenei vaya a la guerra durante los próximos días, ya que tiene programado rezar por Soleimani el lunes en la Universidad de Teherán», dijo Sam Bazzi, experto en Medio Oriente y fundador de Hezbollah Watch.
Círculo de violencia
Soleimani fue asesinado cerca del Aeropuerto Internacional de Bagdad durante la noche del 3 de enero durante un ataque aéreo ordenado por Trump.
El golpe se produjo después de meses de ataques de las milicias apoyadas por Irán a las fuerzas estadounidenses en Irak a partir de octubre de 2019, incluyendo el asalto a la embajada de EE.UU. en Bagdad por los milicianos apoyados por Irán y sus partidarios el 31 de diciembre, y la muerte de un contratista militar de EE.UU. el 27 de diciembre.
Varios soldados estadounidenses e iraquíes también resultaron heridos en el ataque con cohetes que Estados Unidos atribuye a Kataib Hezbollah. Trump también ordenó el bombardeo de cinco instalaciones vinculadas a Kataib Hezbollah el 29 de diciembre en respuesta a la pérdida de vidas estadounidenses.
Según los funcionarios del Departamento de Estado de EE.UU., el ataque a Soleimani fue una respuesta a los años de ataques mortales que él personalmente había organizado en la región. Ellos hicieron hincapié en que otro ataque importante en Irak era inminente pero ahora no es probable que ocurra.
«No podemos prometer que hayamos roto el círculo de la violencia», dijo a los periodistas un alto funcionario del Departamento de Estado el 3 de enero, «lo que puedo decir de mi experiencia con Qassem Soleimani es que es menos probable que veamos esto ahora que antes, y si vemos un aumento de la violencia, probablemente no será tan diabólicamente ingenioso».
El ataque aéreo del 3 de enero que mató a Soleimani también mató a Abu Mahdi al-Muhandis (o al-Mohandis o Jamal Jaafar Ibrahimi), el comandante adjunto de las Fuerzas de Movilización Popular (PMF) de Irak, un grupo de fuerzas paramilitares compuesto en su mayoría por milicias chiítas apoyadas por Irán que se integró formalmente en las fuerzas armadas iraquíes en medio de los esfuerzos por derrotar a ISIS.
Trump dijo a los reporteros en Florida esa tarde que el ataque se llevó a cabo «para detener una guerra», informó The Epoch Times.
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