El 21 de noviembre, el presidente Donald Trump se unió a los líderes de las mayores economías del mundo para participar en reuniones virtuales en la cumbre del Grupo de los 20 (G-20), donde destacó los esfuerzos de su administración para combatir la pandemia del virus del PCCh, así como el progreso del desarrollo de la vacuna COVID-19 de la nación.
El sábado por la mañana, el primer día de la Cumbre virtual de Líderes del G-20, auspiciada por Arabia Saudita, el presidente se unió a través de videoconferencia desde la Sala de Crisis de la Casa Blanca.
Trump enfatizó en su intervención la necesidad de cooperar para restaurar los empleos y un fuerte crecimiento económico durante la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), dijo la secretaria de Prensa de la Casa Blanca Kayleigh McEnany en un comunicado.
El presidente también habló sobre la respuesta del país a la pandemia y la recuperación económica del país «sobre una base de recortes fiscales y regulatorios, independencia energética y acuerdos de comercio justo», según el comunicado de la Casa Blanca.
«Habló sobre las acciones agresivas y las medidas de seguridad que Estados Unidos tomó para proteger a los vulnerables, para ser pioneros en tratamientos innovadores y para desarrollar vacunas y terapias a una velocidad récord, lo cual salvará millones de vidas», dice también el comunicado.
Según The Guardian, Trump dijo que la estrategia de Estados Unidos para abordar la COVID-19 era asegurarse de que «se satisfagan las necesidades internas» por medio de la Operación Warp Speed antes de extender la ayuda a otros países. Hubo un debate entre los países miembros de la Organización Mundial de la Salud para asegurar la distribución mundial equitativa de las vacunas, con peticiones de más financiación para asegurar el acceso a las vacunas para aquellos que viven en países en desarrollo.
La semana pasada, el secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, dijo que existe optimismo sobre la posibilidad de que dos vacunas seguras y eficaces de las compañías farmacéuticas Pfizer y Moderna sean aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) dentro de unas semanas.
El general Gustave Perna, jefe de operaciones de la Administración Trump para la Operación Warp Speed, también dijo la semana pasada que todos los estados del país tendrán acceso a algunas dosis de la vacuna contra el virus del PCCh durante las 24 horas siguientes a la autorización de la misma.
El vicepresidente Mike Pence dijo en una reunión del Grupo de Trabajo sobre el Coronavirus de la Casa Blanca el jueves que los vulnerables, los profesionales sanitarios y el personal de primeros auxilios tendrán prioridad.
Los líderes del G-20 señalaron que el virus del PCCh solo será derrotado a escala mundial.
«Debe haber una respuesta efectiva a la pandemia, una respuesta integral, coordinada y unida», dijo el presidente francés Emmanuel Macron en unas declaraciones.
«Para derrotar la pandemia, todas las naciones deben tener acceso y poder pagar la vacuna», dijo la canciller alemana Angela Merkel, pidiendo una mejor financiación.
La última vez que los jefes de estado del G-20 se reunieron fue en marzo, mientras el virus del PCCh se extendía rápidamente por todo el mundo. En ese momento se comprometieron a «hacer lo que sea necesario para superar la pandemia».
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