Fuera de Mar-a-Lago, el expresidente Donald Trump arremetió contra la fiscal general de Nueva York, Letitia James, y el juez de la Corte Suprema de Nueva York, Arthur Engoron, tras ser declarado responsable de fraude civil.
«Pagué más de USD 100 millones en impuestos y me quieren fuera», dijo el presidente Trump, asegurando que las empresas están siendo expulsadas de Nueva York por culpa de funcionarios corruptos. «Son gente corrupta, no se les debería permitir hacer lo que hacen».
«¡Una multa de USD 355 millones por hacer un trabajo perfecto!», dijo. Aseguró que los bancos y aseguradoras con los que trabajaba, a los que James le acusó de defraudar, obtenían grandes beneficios y estaban muy contentos con su negocio.
El viernes por la tarde, el juez Engoron emitió un veredicto en el caso de fraude multimillonario que también prohibió al presidente Trump hacer negocios en Nueva York durante tres años, e instaló un monitor independiente y un oficial de cumplimiento en la Organización Trump para seguir supervisando las operaciones financieras.
Alina Habba, abogada del Presidente Trump, emitió inmediatamente un comunicado sobre su intención de apelar.
Dijo que el veredicto era «una injusticia manifiesta, simple y llanamente».
«Dado lo mucho que está en juego, confiamos en que la División de Apelaciones anule este veredicto atroz y ponga fin a esta persecución implacable contra mis clientes», declaró la Sra. Habba.
Trump: «Construimos una gran empresa»
El expresidente Trump defendió la Organización Trump, que no es una sociedad anónima, sino un nombre paraguas para un conjunto de empresas y holdings. Se incorporó a la empresa inmobiliaria familiar en 1968 y empezó a dirigirla en 1971, para más tarde rebautizarla como Trump Organization. Tras la toma de posesión del presidente Trump, cedió el liderazgo de la empresa a sus dos hijos adultos Eric Trump y Donald Trump Jr, que también fueron nombrados como acusados en el caso de fraude.
«Construimos una gran empresa, no hubo fraude, todos los bancos recibieron su dinero, el 100 por cien, adoran a Trump, testificaron que Trump es un gran, gran cliente», dijo. «Y el juez hace eso. El juez es una persona corrupta».
«Este juez pensó que Mar-a-Lago valía USD 18 millones cuando vale entre 50 y 100 veces esa cantidad», dijo el expresidente Trump.El juez Engoron declaró al presidente Trump responsable de fraude en septiembre de 2023, aproximadamente una semana antes de que comenzara el juicio. En su juicio sumario, determinó que el presidente Trump había inflado su patrimonio neto hasta en USD 2200 millones.
El juicio sumario situó el valor de Mar-a-Lago entre USD 18 y USD 26 millones, basándose en las cifras de los tasadores del condado, lo que provocó una confusión generalizada y el ridículo del sector inmobiliario y del público en general.
Hacia el final del juicio, los abogados defensores se enzarzaron en varias discusiones con el juez, acusándole de parcialidad y de que trataba de forma diferente al estado y a los acusados. Los abogados defensores indicaron su intención de apelar.
El expresidente Trump también ha arremetido contra la señora James, argumentando que hizo campaña con una plataforma de «acabar con Trump» y que el caso tiene motivaciones políticas.
Él ha mantenido que los casos en su contra han sido presentados por oponentes políticos.
«Es una interferencia electoral», ha dicho. «Si yo no me estuviera presentando, ninguna de estas demandas habría ocurrido».
«Están utilizando esto como arma contra un oponente político que sube mucho en las encuestas», dijo.
«Recurriremos, tendremos éxito. Francamente, si no tenemos éxito… la gente se está marchando del estado de Nueva York y, debido a esto, se marcharán a un ritmo mucho más rápido», dijo.
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