El presidente Donald Trump señaló que el exasesor de seguridad nacional John Bolton debería ser encarcelado por la publicación de su libro, que según la Casa Blanca contiene información clasificada de su tiempo en la administración.
El libro de Bolton, «The Room Where It Happened» («La habitación donde sucedió»), que relata su período de 17 meses en la Casa Blanca, llegó a las tiendas el martes luego que la administración Trump no pudiera bloquear su publicación inmediata. La batalla legal aún continúa en medio de los esfuerzos de la administración para presentar una denuncia por las presuntas violaciones de Bolton a sus obligaciones contractuales al no completar el proceso de revisión previa a la publicación de su libro.
Para marcar el lanzamiento del libro, Trump emitió el martes una declaración en las redes sociales para expresar su descontento por las acciones de Bolton, sugiriendo que su exasistente principal debería ser castigado por supuestamente publicar información clasificada. «El fracasado y arrastrado John Bolton es un canalla que debería estar en la cárcel, con el dinero incautado, por difundir con fines de lucro, información altamente clasificada», escribió el presidente en una publicación de Twitter el martes por la mañana.
Su declaración hace eco de los comentarios que hizo durante una entrevista con Brian Kilmeade de Fox News, que también se transmitió el martes.
“Lo despedí. Y no pensé que fuera un gran problema. Y yo no estaba mucho cerca de él”, dijo el presidente. «Pero lo que hizo fue tomar información clasificada y la publicó durante una presidencia».
«Creo que es un criminal, y creo, francamente, que debería ir a la cárcel por eso», agregó Trump.
El 20 de junio, el Juez de Distrito de los Estados Unidos, Royce Lamberth, negó el intento de la administración Trump por impedir que el libro se publicara inmediatamente, diciendo que el gobierno no había logrado demostrar que bloquear el libro en una etapa tan tardía evitaría que el gobierno sufriera un daño irreparable, dado que el libro ya había sido difundido ampliamente.
El editor del libro, Simon & Schuster, le dijo al tribunal que más de 200,000 copias del libro han sido enviadas a nivel nacional y que miles de copias del libro han sido entregadas a librerías en todo el mundo. Mientras tanto, también se han distribuido copias del libro a los medios de comunicación.
“Con cientos de miles de copias en todo el mundo, muchas en las salas de redacción, el daño ya está hecho. No hay restauración del status quo”, escribió Lamberth en su orden (pdf).
Sin embargo, el juez expresó su preocupación por las acciones de Bolton y dijo que él «jugó con la seguridad nacional de Estados Unidos» al abandonar un proceso de revisión previa a la publicación de su libro.
«Él ha expuesto a su país a daños y a sí mismo a responsabilidad civil (y potencialmente criminal)», escribió.
Lamberth dijo que luego de haber revisado la información clasificada presentada por el gobierno, estaba convencido de que Bolton probablemente pondría en peligro «la seguridad nacional al revelar información clasificada en violación de sus obligaciones en el acuerdo de confidencialidad», cuando se apresuró a publicar su libro.
El juez dijo que Bolton ahora «puede perder sus ganancias del trato por el libro, exponerse a la responsabilidad penal, y pone en peligro la seguridad nacional».
El abogado de Bolton, Charles Cooper, cuestionó la calificación preliminar del juez, y le dijo a The Epoch Times en una declaración el 20 de junio que la historia completa de los eventos se revelaría en función al desarrollo del caso.
«Sin embargo, respetuosamente discrepamos de la conclusión preliminar de la Corte en esta primera etapa del caso de que el Embajador Bolton no cumplió plenamente con su obligación contractual de prepublicación con el Gobierno, y el caso procederá ahora a la elaboración del expediente completo sobre esa cuestión. Todavía no se ha contado la historia completa de estos acontecimientos, pero se hará», dijo Cooper.
Bolton ha negado las afirmaciones de que su libro contiene información clasificada en una presentación judicial el 18 de junio. Sus abogados afirman que Ellen Knight, directora principal del Acceso a Registros y Seguridad de la Información en el Consejo de Seguridad, quien revisó el manuscrito de casi 500 páginas, le dijo a Bolton el 27 de abril que no tenía más ediciones para proporcionarle, lo cual sugiere que no había más información clasificada en el libro. Ellos agregaron que Knight indicó que Bolton recibiría «la carta tradicional pro forma que confirma que estaba autorizado a publicarla».
«De hecho, el Gobierno reconoce en su denuncia que, al concluir su exhaustiva revisión previa a la publicación, la Sra. Knight ‘consideró que el borrador del manuscrito no contenía información clasificada'», escribieron los abogados (pdf). «En ese momento, el Embajador Bolton cumplió cualquier obligación que tenía bajo los términos expresos de su acuerdo de confidencialidad con el Gobierno».
En la denuncia de la administración Trump (pdf) presentada el 16 de junio, los abogados del gobierno escribieron que Knight había indicado a Bolton el 7 de mayo que el proceso de revisión «sigue en curso».
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, dijo el lunes que la administración está preocupada en caso Bolton no sea enjuiciado, ya que podría tener graves consecuencias para la seguridad nacional.
«Miren, la información en el libro de John Bolton era información clasificada, según lo confirmado por los más altos funcionarios de seguridad nacional e inteligencia», dijo McEnany. “Y, miren, el director de la NSA, Nakasone, dice que esto podría causar la pérdida permanente de una fuente valiosa, fuente de inteligencia, y daños al sistema de inteligencia de los Estados Unidos; el DNI Ratcliffe dijo prácticamente lo mismo. Hay otro funcionario del gobierno que dijo que ‘se podría esperar razonablemente que la divulgación no autorizada de esta información permita amenazas de actores extranjeros'».
“Esta es la seriedad con la que consideramos a este libro y el NSC mira este libro mientras lo analizan en busca de información clasificada. Hay un daño real que se puede hacer. ¿Y para qué? Para la auto-promoción y publicidad de un director fracasado de la NSA”, agregó.
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