El expresidente Donald Trump sirvió comida el 20 de octubre en un McDonald’s de Pensilvania, un estado clave en las elecciones de 2024.
En Georgia, otro estado indeciso, la vicepresidenta Kamala Harris visitó dos iglesias mientras ambos candidatos compiten por influir en los indecisos estados disputados en la recta final antes de las elecciones del 5 de noviembre.
El candidato presidencial republicano atendió el puesto de patatas fritas en el establecimiento de comida rápida de Feasterville-Trevose antes de organizar una rueda de prensa improvisada, en la que respondió a las preguntas de los periodistas a través de la ventanilla de autoservicio.
Después de que un empleado le mostrara a Trump cómo sumergir cestas de patatas fritas en el aceite, el expresidente tomó su turno e incluso ayudó a llenar algunas bolsas de comida para llevar.
“Requiere gran pericia, en realidad, hacerlo bien y hacerlo rápido”, dijo Trump con una sonrisa. “Lo aprecio un poco más. Me dices: ‘Dame patatas fritas’. Nunca olvidaré esta experiencia”.
La parada de campaña formaba parte de una gira por el Estado de Keystone. Más tarde, el domingo, celebrará un foro ciudadano en Lancaster, Pensilvania, antes de asistir al partido de la NFL entre los Pittsburgh Steelers y los New York Jets.
Harris habló de haber trabajado en McDonald’s en su juventud.
“Parte de la razón por la que hablo de haber trabajado en McDonald’s es porque hay personas que trabajan en McDonald’s en nuestro país que están tratando de criar una familia (yo trabajé allí cuando era estudiante, era una niña), que trabajan allí tratando de criar familias y pagar el alquiler”, dijo a MSNBC el mes pasado.
“Creo que parte de la diferencia entre mi oponente y yo incluye nuestra perspectiva sobre las necesidades del pueblo estadounidense y cuál es nuestra responsabilidad, entonces, para satisfacer esas necesidades”, añadió.
Trump no es ajeno a McDonald’s.
Durante el cierre del gobierno 2018-2019, durante el cual los cocineros de la Casa Blanca fueron despedidos, el 45º presidente ordenó cientos de hamburguesas, papas fritas y artículos de McDonald’s, así como de Burger King, Wendy’s y Dominoes, para honrar a los Tigres de Clemson, que ganaron el campeonato nacional de fútbol universitario ese año. Ese mismo año ofreció un festín similar a las campeonas de baloncesto universitario femenino de 2019, las Baylor Lady Bears.
También apareció en un anuncio de televisión de 2002 con Grimace, una de las mascotas de la franquicia de comida rápida.
El propietario de McDonald’s, Derek Giacomantonio, dijo: “Es un valor fundamental de mi organización que abramos con orgullo nuestras puertas a todos los que visitan la comunidad de Feasterville”.
Dijo en un comunicado que por eso aceptó la petición de Trump “para observar la experiencia laboral transformadora que 1 de cada 8 estadounidenses ha tenido: un trabajo en McDonald’s”.
Trump les dijo a los periodistas al bajar del avión: “Realmente quería hacer esto toda mi vida”.
Harris en Georgia
Mientras tanto, Harris se dirigió a una iglesia en Georgia, otro estado indeciso. El domingo también es el 60 cumpleaños de Harris.
En un discurso pronunciado el 20 de octubre en la New Birth Missionary Baptist Church de Stonecrest, en lo que pareció ser un llamamiento a los votantes negros, Harris habló de estar en medio de un momento clave en la historia de Estados Unidos.
“Miremos dónde estamos y entendamos la lección del Evangelio de Lucas, porque ahora mismo, cada uno de nosotros tiene la oportunidad de marcar la diferencia”, dijo.
“En este momento, nuestro país se encuentra en una encrucijada, y lo que hagamos a partir de aquí depende de nosotros, como estadounidenses y como personas de fe”, prosiguió. “Y ahora nos planteamos una pregunta: Nos enfrentamos a esta pregunta: ¿en qué tipo de país queremos vivir? ¿Un país de caos, miedo y odio, o un país de libertad, compasión y justicia?”.
Harris también habló de ayudar a los demás.
“Mis primeros recuerdos de esas enseñanzas son sobre un Dios amoroso, un Dios que ama. Un Dios que nos pide que hablemos en nombre de los que no pueden hablar por sí mismos y que defendamos los derechos de los pobres y los necesitados”, dijo.
“Hay quienes sugieren que la medida de la fuerza de un líder se basa en a quién golpeas, en lugar de lo que sabemos, que la verdadera medida de la fuerza de un líder se basa en a quién ayudas”, añadió.
Además, Harris habló sobre el concepto del Buen Samaritano.
“Centrémonos en lo que Dios nos muestra sobre los buenos samaritanos que caminan entre nosotros para recordarnos el poder, el albedrío, la capacidad y, me atrevería a decir, el deber que tenemos de acudir en ayuda de otro en momentos de necesidad. Amar al prójimo”, dijo. “Y lo que Dios nos está mostrando es que cualquiera de nosotros puede hacer eso sin importar quiénes seamos”.
Harris recordó un caso en la oficina del fiscal del distrito de Oakland (California), cuando era pasante, de una mujer inocente que era espectadora durante una redada antidroga, pero que fue detenida por la policía y puesta en libertad después de que Harris abogara ante el secretario judicial para que no permaneciera entre rejas durante el fin de semana a la espera de ver a un juez el lunes siguiente.
“Comparto esa historia para decir que todos, en nuestra vida, desde las primeras etapas de nuestra vida, hemos tenido esos momentos en los que se nos ha revelado nuestro poder. Y nunca debemos dejar que nadie nos arrebate nuestro poder, ni que de ningún modo intente convencernos de que somos impotentes”, dijo Harris, quien no conoció a la mujer.
Con información de Associated Press
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