El presidente Donald Trump, el jueves por la mañana, sugirió un retraso de las elecciones presidenciales de este año por la posibilidad de que fueran manipuladas a través de la votación por correo.
«Con el Voto Universal por Correo (no el Voto Ausente, que es bueno), las elecciones de 2020 serán las más INEXACTAS y FRAUDULENTAS de la historia. Será una gran vergüenza para los Estados Unidos. Retrasar las elecciones hasta que la gente pueda votar de forma adecuada, segura y sin peligro», escribió en una declaración en Twitter.
El poder ejecutivo no tiene el poder de retrasar unilateralmente las elecciones, que están fijadas para el primer martes de noviembre. Dicha disposición fue aprobada en el siglo XIX por el Congreso.
Si Trump buscara retrasar las elecciones, tendría que cambiar la ley federal haciendo que la medida fuera aprobada por ambas cámaras del Congreso antes de promulgarla como ley.
Cinco estados ya usan exclusivamente los votos por correo, y dicen que tienen las garantías necesarias para asegurar que un actor extranjero hostil no interfiera en la votación. Los expertos en seguridad electoral han dicho a los medios de comunicación que todas las formas de fraude electoral son raras, incluyendo el voto ausente.
Trump ha tratado de poner cada vez más en duda las elecciones de noviembre y el previsible aumento de la votación por correo y en ausencia como resultado de la pandemia del virus del PCCh. El presidente ha calificado las opciones de voto remoto como el «mayor riesgo» para su reelección. Su campaña y el Partido Republicano han presentado una demanda para combatir esta práctica.
El mes pasado, en una Convención de EE.UU., el presidente dijo que la votación de noviembre «será, en mi opinión, la (…) más corrupta en la historia de nuestro país y no podemos permitir que esto suceda (…) ellos quieren que suceda de verdad».
«Con los votos por correo, se introduce algo en medio de un año electoral y se tiene algo que es muy complejo. No hay tiempo para arreglar este proceso tan complejo. Es muy complejo», remarcó, añadiendo: «Un amigo mío, que es un gran tipo, tuvo un hijo que falleció hace siete años. Hace siete años. Vino a verme el otro día. Dijo que acababan de enviarle a su hijo Robert una boleta de votación por correo. Murió hace siete años. No hay forma de que puedan controlar eso».
En una audiencia del Comité de Justicia de la Cámara de Representantes el martes, el fiscal general William Barr dijo que no tiene «ninguna razón para pensar» que las próximas elecciones serán «amañadas».
Sin embargo, subrayó que cuando «se tiene una votación por correo al por mayor, aumenta sustancialmente el riesgo de fraude». Tampoco descartó la posibilidad de que las potencias extranjeras intenten influir en las elecciones.
Un estudio encontró que desde el año 2000, ha habido 2068 casos de presunto fraude electoral.
«Por categoría, Desconocido tenía el mayor porcentaje de acusados con un 31 por ciento (645 casos), seguido de Votantes con un 31 por ciento (633 casos). El fraude más frecuente fue el de las papeletas de voto en ausencia, con un 24 por ciento (491 casos). El estado de la mayoría de los casos fue alegado en el 27 por ciento (558 casos)», dijo el estudio. «Las respuestas a las solicitudes de registros públicos variaron de un estado a otro. Algunos funcionarios estatales y locales respondieron rápidamente enviando los registros disponibles; otros no proporcionaron ni un solo documento».
The Associated Press contribuyó a la elaboración de este artículo.
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