El presidente Donald Trump y los republicanos instaron a los demócratas a manejar con respeto la nominación de Amy Coney Barrett.
Trump hizo las declaraciones el sábado durante un discurso en el que nominó a Barrett como jueza de la Corte Suprema de Estados Unidos (SCOTUS) en el Jardín de las Rosas.
“Insto además a todos los miembros de la otra bancada a que brinden a la jueza Barrett la audiencia respetuosa y digna que se merece”, dijo.
“Insto a los legisladores y miembros de los medios de comunicación a abstenerse de ataques personales o partidistas”, agregó.
Barrett, de 48 años, devota católica, se desempeña como jueza de circuito en la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Séptimo Circuito, un puesto que el Senado confirmó en 2017. Anteriormente trabajó como asistente legal del fallecido juez de la Corte Suprema, Antonin Scalia.
También es madre de siete hijos y sería la jueza más joven de la corte actual si se confirma su nombramiento.
Ella llenará la vacante dejada por la difunta jueza Ruth Bader Ginsburg, quien falleció el pasado 18 de septiembre debido a complicaciones por cáncer.
Sin embargo, el presidente confía en que el proceso de nominación será fluido.
“Sé que van a tener un par de semanas ocupadas”, les dijo a todos los senadores que asistieron a la ceremonia de nominación en la Casa Blanca. «Pero creo que va a ser más fácil de lo que piensan».
Barrett fue confirmada por el Senado en 2017 con apoyo bipartidista. Tres senadores demócratas se unieron a todo el caucus republicano y votaron a favor de su confirmación.
Sin embargo, Barrett evitó la mayoría de las preguntas sobre su actitud hacia los fallos precedentes de la Corte Suprema durante la nominación de 2017 y dijo que, como nominada a juez de la corte de circuito, simplemente seguiría los fallos precedentes de la Corte Suprema.
Los republicanos aplaudieron la nominación de Trump justo después del anuncio.
El senador Lindsey Graham (R-C.S.), presidente del Comité Judicial del Senado, se comprometió a garantizar que la audiencia de nominación sea «desafiante, justa y respetuosa».
“Avanzamos en esta nominación sabiendo que el presidente ha elegido a una persona altamente calificada que servirá bien a nuestra nación en la corte más alta del país”, dijo en una declaración.
El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell (R-Ky.) elogió a Barrett como «una candidata sumamente calificada» para la Corte Suprema.
El senador Chuck Grassley (R-Iowa), uno de los principales republicanos, también instó a sus colegas demócratas a hacer avanzar la nominación con respeto y civilidad.
“Los estadounidenses, la nominada y este comité no merecen una repetición de las jugarretas de la izquierda que vimos en 2018”, dijo.
Grassley se refería al tenso proceso de nominación del juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh.
La confirmación de Barrett haría que el tribunal más alto de Estados Unidos se inclinara aún más hacia el conservadurismo con una mayoría de 6-3.
La Casa Blanca y los republicanos quieren tener un proceso de nominación rápido para confirmar a Barrett antes del día de las elecciones. Mientras tanto, los demócratas insistieron en que la votación debería ocurrir después de las elecciones, preocupados de que varios temas críticos como el aborto, los derechos de la Segunda Enmienda y el Obamacare —algunos de los cuales ya están en la Corte Suprema o podrían terminar allí pronto— se resolverán en consonancia con los conservadores. Algunos demócratas plantearon la idea de agregar más jueces de la Corte Suprema para diluir la mayoría conservadora.
Algunos demócratas declararon que votarán en contra de la nominación inmediatamente después del anuncio de Trump.
El senador Joe Manchin (D-V.O.), quien votó por Barrett en 2017, dijo que no votará para confirmarla en el tribunal más alto de Estados Unidos.
“No votaré para confirmar a la juez Coney Barrett ni a ningún candidato de la Corte Suprema antes del día de las elecciones el 3 de noviembre”, escribió en una declaración.
El senador Gary Peters (D-Mich.) expresó su opinión en contra de la nominada de Trump diciendo que debería hacerse después de las elecciones de noviembre.
«Como he dicho antes, no apoyo que el Senado avance en una nominación a la Corte Suprema hasta después del Día de la Toma de Posesión», dijo en un comunicado . «Votaré en contra de la confirmación de la jueza Amy Coney Barrett para un nombramiento vitalicio en el tribunal más alto de nuestra nación».
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