Ankara condenó la reciente oleada de ataques aéreos israelíes contra Hezbolá, la cual supuestamente dejó cientos de muertos en el sur de Líbano.
“Los ataques de Israel contra Líbano marcan una nueva fase en sus esfuerzos por arrastrar a toda la región al caos”, declaró el Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía en un comunicado fechado el 23 de septiembre.
“Los países que apoyan incondicionalmente a Israel están ayudando a [el primer ministro israelí Benjamin] Netanyahu a derramar sangre por sus intereses políticos”.
A continuación, instó a “todas las instituciones responsables de mantener la paz y la seguridad internacionales” (incluido el Consejo de Seguridad de la ONU) a tomar medidas para detener los ataques de Israel contra Líbano “sin demora”.
En la mañana del 23 de septiembre, Israel inició uno de sus ataques de mayor alcance hasta la fecha contra objetivos de Hezbolá en todo el sur de Líbano.
Según el Ministerio de Sanidad libanés, múltiples ataques aéreos israelíes (incluido uno en la periferia sur de Beirut) han causado la muerte de al menos 558 personas y han obligado a decenas de miles de residentes a huir de la región.
The Epoch Times no pudo verificar de forma independiente las afirmaciones del ministerio.
El ejército israelí confirmó más tarde que había llevado a cabo un ataque cerca de Beirut, pero no ofreció más detalles.
Fue supuestamente el día más mortífero para Líbano desde 2006, cuando Israel y Hezbolá, un grupo terrorista designado por Estados Unidos, libraron una sangrienta guerra de un mes de duración.
Israel afirma que los ataques son una represalia por anteriores ataques con drones y cohetes de Hezbolá contra objetivos civiles y militares dentro de su territorio.
En un breve mensaje de vídeo dirigido al pueblo libanés, Netanyahu dijo: “La guerra de Israel no es contra ustedes, es contra Hezbolá”.
Israel y Hezbolá se han enzarzado en ataques transfronterizos de ojo por ojo desde el pasado mes de octubre, cuando Israel lanzó una ofensiva en la Franja de Gaza tras un ataque mortal contra Israel perpetrado por el grupo terrorista Hamás, con base en Gaza, el 7 de octubre de 2023.
Desde entonces, los repetidos ataques de Hezbolá contra el norte de Israel han obligado a miles de israelíes a desalojar la zona fronteriza y buscar seguridad en otros lugares.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, declaró que la actual campaña aérea de Israel en Líbano continuará hasta que logre su “objetivo de devolver a los residentes del norte sanos y salvos a sus hogares”, según un reciente vídeo publicado por su oficina.
Desde el principio, Turquía (miembro de la OTAN de larga data) condenó la actual ofensiva israelí en Gaza.
Desde entonces, Ankara cortó todos los lazos comerciales con el Estado judío y solicitó unirse a un caso de genocidio contra Israel en curso en la Corte Internacional de Justicia.
Israel rechaza las acusaciones de genocidio por considerarlas infundadas.
El 21 de septiembre, el presidente turco Recep Tayyip Erdogan instó a las capitales occidentales a tomar “medidas disuasorias” contra las acciones de Israel tanto en Gaza como en Líbano.
“Para que nuestra región no se vea arrastrada a un gran desastre, hay que aumentar aún más la presión sobre Israel”, declaró Erdogan a la prensa en Estambul.
También reiteró los llamados a un “alto el fuego permanente” entre Israel y sus adversarios regionales respaldados por Irán.
“Guerra total”
El 23 de septiembre, Erdogan mantuvo una reunión a puerta cerrada con el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, al margen de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
Según un comunicado difundido por la oficina de Erdogan, ambos dirigentes coincidieron en la necesidad de poner fin a “la violencia que Israel está cometiendo en los territorios palestino y libanés”.
En la reunión, Erdogan también elogió los antiguos lazos de Turquía con Irán, afirmando que las relaciones entre ambos vecinos estaban de camino de un mayor desarrollo.
Fue el primer encuentro cara a cara de Erdogan con Pezeshkian desde que éste asumió el cargo el mes pasado tras ganar las elecciones presidenciales de julio.
En declaraciones a los medios de comunicación estadounidenses el 24 de septiembre, Pezeshkian pidió a la comunidad internacional que no permitiera que Líbano “se convirtiera en otra Gaza”.
En Nueva York, Erdogan también se reunió con los líderes de Alemania, Grecia y Kuwait.
También mantuvo conversaciones con Karim Khan, fiscal jefe de la Corte Penal Internacional con sede en La Haya.
En sus conversaciones con Khan, el dirigente turco dijo que el gobierno de Netanyahu violaba abiertamente “el derecho internacional y los derechos humanos”, según la oficina de Erdogan.
Erdogan tiene previsto intervenir ante la Asamblea General de la ONU el 24 de septiembre.
Se espera que las últimas acciones de Israel en el sur del Líbano ocupen un lugar destacado en el discurso de Erdogan ante la Asamblea.
Los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá continuaron el 24 de septiembre, lo que llevó a Josep Borrell, responsable de política exterior de la UE, a dar la voz de alarma sobre una nueva escalada.
“Esta situación es extremadamente peligrosa”, declaró a la prensa en Nueva York. “Estamos casi en una guerra en toda regla”.
Con información de Reuters
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