Tyson Foods está discriminando ilegalmente a ciudadanos estadounidenses al contratar de manera desproporcionada “trabajadores extranjeros”, afirmó un grupo conservador.
En cartas de queja enviadas el miércoles al Departamento de Justicia (DOJ), la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC) y la Comisión de Derechos Civiles de Iowa, America First Legal (AFL) solicitó una investigación sobre la empresa cárnica de Springdale, Arkansas y sus presuntas prácticas laborales.
AFL también envió una carta de cese y desistimiento al director general de Tyson, Donnie King, y al consejo de administración, exigiendo que cumplan las leyes federales de empleo, inmigración y valores.
En las cartas, la AFL afirmaba que la administración Biden «abrió las fronteras de Estados Unidos a millones de extranjeros ilegales y ‘refugiados'», lo que a su vez provocó un aumento del tráfico de seres humanos, la prostitución, el trabajo infantil y otros problemas.
«El programa de Biden de fronteras abiertas y admisión abusiva de refugiados amenaza nuestra seguridad nacional, lleva el crimen y el caos a nuestros barrios y socava el Estado de Derecho. Castiga a nuestros obreros al ampliar masivamente la mano de obra y hacer bajar los salarios estadounidenses», declaró AFL en la demanda.
«Sin embargo, algunas empresas ostensiblemente estadounidenses optaron por apoyar el programa de Biden para cosechar los beneficios de la mano de obra artificialmente abaratada, con temerario desprecio por la ley y las consecuencias humanas de su conducta», continuó el grupo, añadiendo que Tyson es «una de esas empresas».
Tyson «favorece a los extranjeros» en toda la cadena de suministro de mano de obra
En otras partes de sus cartas, la AFL seguía afirmando que Tyson declaró a sus accionistas, inversores y a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) que «la ciudadanía es un factor de motivación en sus prácticas de empleo y contratación».
Sin embargo, hay «pruebas significativas» de que la empresa «durante años ha privilegiado a los extranjeros (incluidos presuntamente menores extranjeros) frente a los ciudadanos estadounidenses en toda su cadena de suministro de mano de obra», escribió la organización.
Durante 2023 y 2024, la empresa se habría comprometido a destinar 1.5 millones de dólares al año a servicios de asistencia jurídica para los trabajadores extranjeros y proporcionó tiempo libre remunerado cuando asistieron a audiencias judiciales, dijo la AFL.
Según un comunicado de prensa de la empresa de noviembre de 2022 sobre el compromiso de 1.5 millones de dólares, la financiación apoya a los socios de la organización sin ánimo de lucro de Tyson para ayudar a proporcionar a los inmigrantes servicios legales, como renovaciones de autorización de empleo y peticiones de ciudadanía.
«Tyson no proporciona beneficios similares a los ciudadanos estadounidenses», escribió AFL en su carta.
Las cartas también citaban informes según los cuales Tyson emplea a 42,000 trabajadores extranjeros, lo que supone más de un tercio de su nómina laboral en Estados Unidos, y participa en varios programas y proyectos destinados aumentar su número de contrataciones.
También señalaban que una importante empresa de saneamiento de alimentos, Packers Sanitation Services, Inc, recibió una multa de 1.5 millones de dólares en 2023 del Departamento de Trabajo de Estados Unidos por emplear al menos a 102 niños de entre 13 y 17 años para trabajar en turnos nocturnos en 13 plantas de procesamiento de carne en ocho estados.
Las plantas son operadas por productores como JBS Foods y Tyson, entre otros, dijo el departamento. Tyson Foods no fue multada en virtud de esas sanciones ni acusada de ningún delito.
Las empresas deben «anteponer Estados Unidos y a su gente»
En las conclusiones de sus cartas, la AFL acusó a Tyson de violar las leyes federales y de Iowa que prohíben a los empresarios discriminar por motivos de ciudadanía, raza, origen nacional y otros rasgos. También acusaron a la empresa de violar las leyes sobre trabajo infantil.
Según su sitio web oficial, AFL está dirigida por Stephen Miller, presidente de la organización que anteriormente se desempeñó como asesor de inmigración bajo el expresidente Donald Trump.
Otros miembros de la organización incluyen a Reed D. Rubinstein, quien se desempeñó como vicefiscal general asociado en la administración Trump.
En una declaración el miércoles, el vicepresidente senior y director de supervisión e investigaciones de AFL, el Sr. Rubinstein, dijo: «Tal vez los líderes de Tyson se consideran ciudadanos globales que viven y trabajan en los Estados Unidos por casualidad».
«Están en su derecho. Pero las pretensiones transnacionales no son una licencia para discriminar a los blancos, los hombres o los ciudadanos estadounidenses; tampoco el poder económico justifica políticas y prácticas que socavan o eluden nuestras leyes de inmigración y trabajo infantil».
«Nuestros ciudadanos y consumidores merecen empresas que pongan a Estados Unidos y a su gente en primer lugar; la AFL no dejará de luchar por esta causa», añadió.
El Departamento de Justicia, la EEOC y la Comisión de Derechos Civiles de Iowa no están obligados a responder a las quejas ni a investigar las acusaciones formuladas contra Tyson Foods por la AFL.
Un portavoz de Tyson Foods dijo a The Epoch Times en una declaración enviada por correo electrónico: «Tyson Foods se opone firmemente a la inmigración ilegal, y no permitimos el empleo de menores de 18 años en ninguna de nuestras instalaciones».
«Cualquier insinuación de que discriminaríamos a los estadounidenses para contratar a trabajadores inmigrantes es completamente falsa», continúa. «Hoy Tyson Foods emplea a 120,000 miembros del equipo en Estados Unidos, a todos los cuales se les exige estar legalmente autorizados para trabajar en este país».
Con informaciòn de Reuters.
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