Las costas de Jacksonville, Florida fueron el escenario donde Chad Ponce de 38 años pescó y desmembró a un pez sierra en peligro de extinción. La acción de Ponce lo puede llevar a una condena de un año de prisión junto al pago de 50.000 dólares de multa.
La comisión de conservación y vida silvestre de Florida empezó a investigar el caso después que varios testigos informaron que Ponce fue visto el año pasado cortando la sierra plana de un pez cuya especie está a punto de extinguirse.
La parte que fue cortada se denomina tribuna, y se trata de una extensión larga y estrecha con dientes alineados en sus bordes que sirven para que el animal se defienda de sus depredadores y atrape sus presas.
Una sierra eléctrica fue el instrumento que usó el sospechoso para cortar al pez, según las declaraciones de los fiscales del caso. Ante las afirmaciones del ente acusador, Ponce se declaró culpable de los cargos que le fueron imputados, según informó la Oficina del Fiscal del distrito medio de Florida en un comunicado.
El pez sierra se encuentra preferiblemente en aguas costeras poco profundas y, a veces, ingresan a sistemas fluviales de agua dulce, por esto se los ve más en áreas semicerradas donde los ríos se encuentran con el mar. En Estados Unidos se encuentran preferiblemente en las costas de la Florida.
Su disminución drástica se debe principalmente a la pérdida de hábitat asociada con el desarrollo de las costas, la presencia de barcos, muelles y la captura accidental de las pesquerías. Frente a la pesca accidental la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA) ha creado una serie de protocolos para resguardarlos, procurando que sean devueltos en las mejores condiciones a los mares.
Frente a la grave disminución del pequeño pez sierra las autoridades decidieron brindarle protección federal como especie en peligro de extinción de acuerdo con la ley de especies en peligro de extinción en 2003.
Aunque la apariencia del pez sierra se asemeja más a la forma de los tiburones, su parentesco más cercano lo tiene con las rayas de mar ya que sus branquias y boca se encuentran en la parte inferior de sus cuerpos.
Según un grupo de defensa ambiental llamado Consejo de Defensa de los Recursos Naturales, la población de esta especie puede oscilar entre 5000 a solo 500 individuos. Su carne no es atractiva y no representan peligro para los humanos ya que evitan confrontar, a no ser que se sientan severamente amenazados.
Su dieta se basa en peces o especies invertebradas como los cangrejos y camarones, sus dientes los usan como lanza para atravesar a sus presas balanceándolas de un lado a otro para aturdirlas y se destaca que tienen en su rostra (sierra) órganos electrosensibles que les permiten encontrar a sus presas en el fondo marino.
El delito de que Chad Ponce llevó a cabo en contra de la ley de conservación animal está siendo procesado por el fiscal federal adjunto Jay Taylor y se espera la resolución de la condena en los próximos días según el portal de información oficial.
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