Una mujer de 44 años fue detenida este lunes frente al consulado estadounidense de Urasoe (en el archipiélago de Okinawa, en el sur de Japón) al declarar que llevaba una sustancia parecida a la pólvora y resistirse a las autoridades, según dijeron fuentes oficiales.
La mujer, que al parecer se dedicaba investigar las mariposas en la zona, se aproximó al consulado y declaró llevar esta sustancia consigo, lo que obligó a la policía local a cortar el tráfico en la zona, aunque no se produjo ningún herido.
Las autoridades investigan las motivaciones de esta persona, en un incidente que se produce en el 51 aniversario de la devolución de Okinawa a Japón tras la ocupación estadounidense y mientras se mantiene el enfado de algunos residentes por la presencia de bases militares de este país.
Okinawa, que representa en torno al 0.6 % del territorio japonés, alberga el 70.3 % del grueso de las instalaciones militares que Estados Unidos tiene en todo el país.
El conjunto de islas, un enclave altamente estratégico que se encuentra más cerca geográficamente de Taiwán que de Tokio, fue devuelto a Japón en 1972, dos décadas después de que Estados Unidos desocupara el país y retornara la soberanía política y económica al Gobierno de Tokio tras el final de la Segunda Guerra Mundial.
Entonces, la población local, testigo de una de las batallas más sangrientas del conflicto bélico mundial, aspiraba a que el territorio estuviera algún día libre de bases.
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