La escuela de enfermería de la Universidad de Arizona (UA) promueve la idea de que los niños pequeños pueden ser transgénero, según unas diapositivas que, según se ha confirmado, forman parte de un programa de formación para estudiantes de enfermería.
Libs de TikTok publicó una foto de las diapositivas de formación de la escuela de enfermería de la UA en las que se enseña a los futuros enfermeros cómo interrogar a niños de tan solo 3 años sobre su género.
Una de las diapositivas se titula: «Qué preguntar – De 3 a 13 años».
«Algunos niños se sienten como una niña por dentro, algunos niños se sienten como un niño por dentro, y algunos niños se sienten como ninguno de los dos, como ambos, o como otra persona», la diapositiva de formación ofrece como sugerencia de redacción para utilizar con los niños en ese grupo de edad durante los controles de niño sano.
«¿Y tú? ¿Cómo te sientes por dentro? No hay respuestas correctas o incorrectas».
En una respuesta dos días después, la universidad confirmó que las diapositivas pertenecían a un seminario de estudiantes de doctorado de la Facultad de Enfermería. El debate sobre la transexualidad formaba parte de una sesión de 40 minutos sobre «cuestiones complejas a las que se enfrentan los profesionales de enfermería», según la UA.
«La Facultad de Enfermería no recomienda ni defiende que se hagan preguntas relacionadas con el género a los niños pequeños en los controles de bienestar. La facultad no tiene una política o posición al respecto y no integra este tipo de formación o educación en su plan de estudios», declaró la universidad.
La UA enseña a los profesionales a trabajar con «padres y tutores y con su permiso» cuando tratan a pacientes pediátricos, declaró la UA.
El post del 6 de septiembre de Libs of TikTok sobre las diapositivas ha acumulado más de 2,2 millones de visitas.
El 30 de agosto, Libs of TikTok publicó una diapositiva y un vídeo de formación similares, esta vez filtrados por un empleado de Kaiser Permanente, uno de los mayores proveedores de atención sanitaria de la costa oeste.
Kaiser Permanente envió un comunicado a Fox News Digital en el que afirmaba que la formación no respaldaba el uso de intervenciones médicas entre los niños de ese grupo de edad. El sistema hospitalario no respondió a la solicitud de comentarios de The Epoch Times.
Los materiales de formación de Kaiser Permanente animaban a los profesionales médicos a «explicar la importancia de la atención de afirmación de género a los empleados, personal y pacientes de KP (Kaiser Permanente).»
La formación, dirigida por tres médicos y un asistente médico, pretende enseñar «términos apropiados que permitan comprender y prestar una atención que afirme el género» y ayudarles a «reconocer las experiencias a las que se enfrentan los pacientes transgénero, de género diverso e intersexuales, y determinar cómo puede afectar eso a sus interacciones y a la atención que prestan».
La formación pretendía ayudar a los proveedores a «ofrecer una experiencia asistencial excepcional a la comunidad transexual, de género diverso e intersexual».
Un video que muestra a niños pequeños que se identifican como el sexo opuesto incluye a un niño pequeño que se ha identificado como una niña desde que tenía 4 años. Otro segmento del video incluyó a una mujer que se identifica como un hombre, diciendo que sabía que era transgénero a la edad de 3 años.
En mayo, The Epoch Times informó sobre clínicas de género afiliadas a tres facultades de medicina de Carolina del Norte que atendían a pacientes de tan solo 2 años por disforia de género.
Las facultades de medicina de la Universidad de Duke, la Universidad de Carolina del Norte (UNC) y la Universidad de Carolina del Este (ECU) mencionaban en sus páginas web, en documentos y en artículos de prensa que ofrecían «tratamiento» a niños pequeños y en edad escolar con disforia de género.
Advertencias sobre la detransición
Las personas que intentaron la transición al sexo opuesto pero luego dieron marcha atrás -a menudo autodenominadas «detransicionistas»- se manifiestan ahora en contra de la aprobación por parte de la clase médica de los procedimientos de cambio de sexo en menores.
Una ex paciente de Kaiser Permanente, Chloe Cole, se sometió a la extirpación de ambos pechos cuando era adolescente. Más tarde intentó revertir los cambios en su cuerpo provocados por las hormonas que le administraron para que se pareciera más a un chico. Algunos de los efectos son irreversibles y le han causado problemas médicos continuos.
Ha demandado a los médicos que, según ella, la obligaron a hacer la «transición» al sexo masculino.
Según la demanda, Cole sufría «disforia de género» desde los 9 años y fue sometida a procedimientos perjudiciales entre los 13 y los 17 años, cuando los médicos le administraron bloqueadores de la pubertad, hormonas transgénero y una doble mastectomía.
La demanda alega que Kaiser Permanente «mutiló» a Cole en respuesta a su lucha contra los problemas de salud mental cuando era menor de edad.
Aunque los defensores de la transexualidad dicen que es raro que los niños pasen por el quirófano, un estudio reciente publicado en línea por el Revista de la Asociación Médica Americana (JAMA) documenta que más de 3.678 jóvenes de 12 a 18 años se sometieron a cirugía entre 2016 y 2020.
El estudio revisó una base de datos con información sobre cirugías en «2.800 centros de propiedad hospitalaria de hasta 35 estados.»
Dentro de esa red, los investigadores identificaron a 48.019 pacientes que se sometieron a «cirugías de afirmación de género» en el período de cuatro años.
De los menores identificados en el estudio, 3.200 se sometieron a cirugía mamaria o torácica, y más de 400 a cirugía genital, escribieron los investigadores.
El estudio no proporcionó la edad del paciente más joven que recibió cirugía genital. Las cirugías genitales más comunes fueron la histerectomía, la extirpación quirúrgica de los testículos y la vaginoplastia, que intenta construir una vagina en un paciente varón que quiere vivir como mujer.
Las cirugías de cambio de sexo a veces implican la extirpación de órganos reproductores masculinos o femeninos y su sustitución por una versión modificada del órgano del sexo opuesto. Los cirujanos extraen piel y tejidos de otras partes del cuerpo para construir el facsímil.
La controversia sobre los procedimientos para cambiar el género de un niño llevó a las legislaturas lideradas por los republicanos a aprobar leyes que prohíben las cirugías transgénero y las hormonas de sexo cruzado para niños en estados rojos como Texas y Florida.
La ley de Florida, firmada por el gobernador Ron DeSantis en primavera, prohíbe los bloqueadores de la pubertad o la terapia hormonal para jóvenes transgénero y pone condiciones para que los adultos accedan al tratamiento.
La ley de Texas firmada esta primavera por el gobernador Greg Abbott prohíbe el «tratamiento» de la disforia de género infantil, incluidas las mastectomías, las cirugías que esterilizan a los niños -incluidos los procedimientos para extirpar partes de sus sistemas reproductivos- y la prescripción de fármacos que inducen la infertilidad temporal o permanente, como las hormonas cruzadas.
Los defensores de la «atención de afirmación de género» afirman que salva vidas y mejora la salud mental.
Los que se oponen dicen que el «tratamiento» perjudica irrevocablemente a los niños y que la disforia de género suele desaparecer con el tiempo sin intervención médica.
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