Una mujer china fue identificada como la persona arrestada por allanar el club privado Mar-a-Lago del presidente Donald Trump en el sur de Florida, donde además se encuentra su residencia legal.
La mujer, Jing Lu, de 56 años, fue vista en los terrenos del club y el personal le pidió que se fuera, sin embargo la mujer «regresó y comenzó a tomar fotos”, dijo Michael Ogrodnick, portavoz del Departamento de Policía de Palm Beach, según Miami Herald, el 18 de noviembre.
“En ese momento el Departamento de Policía de Palm Beach respondió y la detuvo», señaló Ogrodnick. La mujer fue ingresada en la cárcel del condado de Palm Beach con cargos de «merodear».
Los registros de la sospechosa muestran que tiene una acusación de resistir a un oficial sin violencia y una orden del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos por una visa vencida, informó Miami Herald.
Según el reporte, el miércoles el club organizó una gala para el grupo conservador Turning Point USA por la noche. Para hablar en el evento estaban Jerry Falwell Jr. y Donald Trump Jr., entre otros.
Trump dijo a principios de este mes en Twitter que pasaría las vacaciones de invierno en el club, al que llama «la Casa Blanca del Sur», y donde regularmente pasa parte del tiempo.
No es la primera vez que intentan violar la seguridad en Mar-a-Lago.
El pasado 11 de septiembre, la oficina del Fiscal del Distrito Sureste de Florida anunció Yujing Zhang, de 33 años, ciudadana china, estaba acusada de entrar fraudulentamente a los terrenos restringidos en el Club Mar-a-Lago.
En ese momento “el presidente de EE. UU. y otras personas protegidas por el Servicio Secreto de EE. UU. estaban de visita temporalmente”, señala el informe del fiscal.
“Agentes del Servicio Secreto de los Estados Unidos detuvieron a Zhang en el área de recepción principal debido a sus acciones sospechosas. Zhang fue escoltada fuera de la propiedad para más preguntas. Durante el interrogatorio, Zhang tergiversó repetidamente ante los agentes del Servicio Secreto de EE. UU. Que estaba en el Club Mar-a-Lago para asistir a un «Evento de Amistad de las Naciones Unidas”, añade.
El 25 de noviembre, Zhang fue sentenciada por el juez federal de distrito Roy K. Altman, en Fort Lauderdale, Florida, a un total de ocho meses en prisión, seguido de dos años de libertad supervisada (Caso No. 19CR80056, informó la Oficina del Fiscal.
Según Miami Herald, cuando la mujer fue detenida, el Servicio Secreto de Estados Unidos dijo que Zhang llevaba una memoria USB cargada con «malware malicioso», pero no se enfrentó a ningún cargo relacionado con el espionaje.
El club Mar-a-Lago es exclusivo solo para sus miembros, sin embargo el público puede comprar boletos para galas de caridad y otros eventos que se llevan a cabo durante la temporada alta de invierno de la sociedad de Palm Beach.
Ese acceso ha llevado a Mar-a-Lago “a convertirse en el punto focal de una industria denominada «Turismo Trump», que se comercializa a las personas que intentan acercarse al presidente”, destaca Miami Herald, señalando especialmente a los turistas chinos en particular “se convirtieron en clientes habituales”.
El FBI y la Oficina del Fiscal de los Estados Unidos en Miami están investigando posibles espías chinos en el sur de Florida e incluso en Mar-a-Lago.
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