La Universidad de Delaware llegó el 16 de diciembre a un acuerdo con la NASA tras supuestamente no haber revelado los vínculos de un profesor con el régimen chino y su apoyo al mismo.
En 2020, la NASA concedió a la universidad una subvención para establecer un centro de investigación centrado en el uso de satélites para recopilar datos meteorológicos, climáticos y oceánicos, con el fin de comprender mejor cómo afecta el aumento del nivel del mar a las costas estadounidenses.
Según la Fiscalía del Distrito de Delaware, la universidad certificó que no se utilizarían fondos de la subvención de la NASA «para participar, colaborar o coordinarse con la República Popular China». Sin embargo, la universidad supuestamente no reveló que el investigador principal del centro, Xiao-Hai Yan, tenía importantes vínculos con instituciones y financiaciones chinas mientras la subvención estaba activa.
El acuerdo reveló que entre junio de 2020 y agosto de 2023, Yan fue simultáneamente miembro del profesorado de la Universidad de Xiamen, una de las 75 instituciones controladas directamente por el Ministerio de Educación de China. Durante este período, Yan también solicitó y recibió financiación de la Fundación Nacional de Ciencia de China y de la Administración Oceánica Estatal de China.
Además, Yan participó en el Programa de los Mil Talentos de China, una iniciativa que ofrece lucrativos beneficios económicos y ventajas en investigación para reclutar científicos del extranjero con el fin de impulsar el desarrollo económico y militar de China. El programa ha suscitado preocupación en Estados Unidos por la seguridad nacional y la integridad académica, y ha dado lugar a decenas de investigaciones y procesamientos federales en los últimos años.
La universidad acordó pagar 715,580 dólares al gobierno estadounidense para resolver las acusaciones, pero no admitió haber cometido ningún delito.
También dijo que está «orgullosa de su sólido historial de cumplimiento» en la supervisión de la investigación patrocinada y mantiene su compromiso de «promover y salvaguardar la búsqueda responsable de la investigación científica».
«La universidad confía, en parte, en la franqueza y las revelaciones completas de las personas involucradas en el proceso de subvención», dijo un portavoz en una declaración a The Epoch Times. «Como se señala en el comunicado, este acuerdo no es una admisión de irregularidades por parte de la universidad, sino más bien una decisión estratégica para evitar litigios costosos y que distraen la atención».
El acuerdo fue un esfuerzo coordinado entre la Oficina del Fiscal del Distrito de Delaware y la Oficina del Inspector General de la NASA, el organismo de control interno de la agencia espacial.
«La ley federal obliga a las universidades, instituciones e investigadores a revelar información, incluidas determinadas afiliaciones extranjeras, cuando solicitan subvenciones, de modo que los organismos que las conceden puedan evaluar si financian su investigación y desarrollo», declaró en un comunicado David Weiss, fiscal federal del distrito de Delaware.
El FBI ha detallado previamente cómo el gobierno chino utiliza programas de reclutamiento de expertos, como el Programa de los Mil Talentos, para atraer a personas que trabajan o estudian en el extranjero y que tienen acceso a investigaciones de alta prioridad o a tecnologías patentadas. El FBI estima que China opera más de 200 iniciativas similares, con algunas financiadas involuntariamente por contribuyentes estadounidenses.
Un informe del subcomité del Senado de 2019 también destacó numerosos casos de mala conducta por parte de los participantes de Mil Talentos. Estos incluyen la descarga de archivos de investigación confidenciales antes de partir hacia China, la falsificación de información en las solicitudes de subvención de Estados Unidos y no revelar la financiación recibida de Beijing.
Uno de los casos más resonantes de los últimos años fue el de Xiang Haitao, exinvestigador de Monsanto. El participante en los Mil Talentos fue detenido en noviembre de 2019 tras regresar a Estados Unidos desde China, donde había trabajado en el uso de una tecnología estadounidense patentada para aumentar la producción agrícola. En 2022, Xiang fue condenado a 29 meses de prisión, tres años de libertad supervisada y una multa de 150,000 dólares por conspirar para cometer espionaje económico.
Otro caso ampliamente difundido fue el de Charles Lieber, exdirector del departamento de química de la Universidad de Harvard.
Lieber fue detenido en el campus en 2020 y acusado de mentir a los investigadores federales sobre su participación en el Programa de los Mil Talentos y sus vínculos no revelados con la Universidad Tecnológica de Wuhan. En abril de 2023, fue condenado a dos días de cárcel con dos años de libertad supervisada y recibió una multa de 50,000 dólares.
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