Los gobernadores de Estados Unidos han finalizado el mandato de uso de mascarillas por COVID-19 de sus estados o están considerando terminarlo pronto—así como también reducir las limitaciones de capacidad y las restricciones para las empresas.
En un ejemplo, la orden de uso de mascarillas en todo el estado de Utah está programada para que finalice el 10 de abril según una ley que se aprobó el 5 de marzo, y el gobernador republicano Spencer Cox, dijo a Fox News el sábado que no la vetará.
«Anticipamos que para el 1 de abril todos los adultos en el estado de Utah serán elegibles para la vacuna», dijo Cox. Utah, dijo, tendrá «alrededor de 1.5 millones de vacunas en el estado para el 10 de abril, cuando ese mandato desaparezca».
Mientras tanto, Texas, Mississippi, Iowa, Montana y Dakota del Norte han finalizado—o pronto finalizarán— con las protecciones faciales en todo el estado en torno a la pandemia del virus del PCCh (Partido Comunista Chino). Alaska, Arizona, Florida, Georgia, Idaho, Missouri, Nebraska, Oklahoma, Carolina del Sur, Dakota del Sur y Tennessee nunca exigieron cubrirse la cara en público.
La gobernadora republicana de Alabama, Kay Ivey, dijo el 4 de marzo que el estado finalizará su mandato en aproximadamente un mes, y dijo que a partir del 9 de abril, el uso de protecciones faciales será «una cuestión de responsabilidad personal y no un mandato del gobierno».
El 2 de marzo, Mississippi y Texas finalizaron sus requisitos de uso de mascarillas y permitieron que las empresas operaran a plena capacidad. La medida provocó la desaprobación del presidente Joe Biden y otros funcionarios de la Casa Blanca.
“A partir de mañana, levantaremos todos los mandatos de uso de mascarillas de nuestro condado y las empresas podrán operar a plena capacidad sin reglas impuestas por el estado”, dijo el gobernador republicano de Mississippi, Tate Reeves, en un posteo de Facebook la semana pasada, y agregó: “Nuestras hospitalizaciones y el número de casos se han desplomado, y la vacuna se está distribuyendo rápidamente. ¡Es el momento!»
Y el gobernador de Texas, Greg Abbott, republicano también, dijo que el estado está «100 por ciento abierto».
“Demasiados tejanos han sido marginados de las oportunidades de empleo”, comentó Abbott. “Demasiados propietarios de pequeñas empresas han tenido dificultades para pagar sus facturas. Esto debe terminar».
El gobernador de Connecticut, Ned Lamont, un demócrata, anunció también que se reducirán algunas normas en relación al virus del PCCh, incluyendo los límites de capacidad que se colocaron en empresas y eventos deportivos. Los parques de atracciones, dijo, pueden abrir también. Sin embargo, Lamont dijo que el mandato de uso de mascarillas implementado en Connecticut seguirá vigente.
En febrero, la gobernadora republicana de Iowa, Kim Reynolds, eliminó el requisito de uso de mascarilla y dijo: «Sabemos lo que tenemos que hacer y esto no requiere un mandato del gobierno para hacerlo», mientras que el gobernador de Montana, Greg Gianforte, también Republicano, permitió que la regla estatal del uso de mascarilla expirara el mes pasado.
El gobernador republicano de Arizona, Doug Ducey, anunció recientemente que implementará la “próxima fase de protocolos comerciales y de seguridad”, el cual incluye eliminar los límites de capacidad en las empresas y el regreso de los principales eventos deportivos. Ducey dijo que, sin embargo, será necesario usar protecciones faciales y distanciarse socialmente.
El gobernador de Virginia Occidental, Jim Justice, republicano, dijo que levantaría las restricciones de capacidad para restaurantes, bares y otros negocios. Y aún se deberá usar mascarillas.
«Voy a seguir escuchando a los expertos médicos», dijo Justice sobre las mascarillas, y agregó: “Esperamos absolutamente que continúe usando su mascarilla. Sabe, tampoco soy fanático del uso de mascarillas. Sin embargo, al mismo tiempo, sabemos que han salvado muchas vidas y sabemos que es demasiado pronto en el juego para bajar la guardia».
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