El gobierno vietnamita denunció el 2 de octubre que fuerzas de seguridad chinas golpearon y arrebataron material de pesca a los pescadores vietnamitas de un barco que faenaba cerca de las islas Paracel tres días antes, el 29 de septiembre.
Vietnam presentó una protesta ante el régimen comunista chino, y el 4 de octubre el gobierno filipino emitió una declaración que condenaba la «agresión injustificada» de las fuerzas chinas a los pescadores vietnamitas.
Las islas Paracel son un pequeño archipiélago, casi equidistante de las costas de Vietnam y Hainan (China). Ambos países reclaman el territorio como propio, ya que el Partido Comunista Chino (PCCh) reclama todo el Mar de China Meridional como territorio suyo, una reclamación que el Tribunal Permanente de Arbitraje internacional de La Haya ha rechazado por carecer de fundamento jurídico.
«Vietnam está extremadamente preocupado, indignado y protesta resueltamente por el brutal trato que las fuerzas chinas dan a los pescadores y barcos pesqueros vietnamitas que faenan en el archipiélago vietnamita de Hoang Sa», declaró en un comunicado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Pham Thu Hang.
El gobierno dijo que el ataque dejó varios pescadores heridos. Los medios estatales vietnamitas informaron que 40 personas de dos barcos golpearon e hirieron a 10 pescadores con tubos de hierro.
El gobierno vietnamita solicitó a Beijing que investigue el incidente y respete la soberanía de Vietnam. El régimen chino respondió que los barcos vietnamitas habían estado pescando ilegalmente sin permiso de Beijing, por lo que las autoridades los detuvieron. Un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino afirmó que el incidente fue «profesional y comedido, y no hubo heridos».
El viernes, el asesor de Seguridad Nacional filipino, Eduardo Ano, calificó el incidente de «acto atroz».
La Guardia Costera filipina ha tenido varios encuentros tensos con buques chinos en las últimas semanas en torno a los bajíos de Escoda y Sabina, incluyendo dos colisiones de buques, un buque chino que disparó un cañón de agua contra un buque filipino y una flota de 40 buques chinos que bloqueó una misión filipina de reabastecimiento. Las autoridades filipinas han presentado múltiples protestas y funcionarios internacionales han condenado las acciones del PCCh. Estados Unidos ha sugerido la posibilidad de escoltar futuras misiones de reabastecimiento filipinas.
Vietnam, bajo su nuevo líder To Lam, trata de mantener alianzas con todas las partes. El primer viaje al extranjero de To como líder de Vietnam fue a China para reunirse con el líder del PCCh, Xi Jinping, y ocurrió poco después de que Vietnam mejorara sus lazos diplomáticos con Estados Unidos, a medida que los países occidentales trasladan sus cadenas de suministro fuera de China y giran para fortalecer el orden liberal basado en normas en el Indo-Pacífico.
El mes pasado, Vietnam participó en un simulacro conjunto de guardacostas con Filipinas, declarando que la entrada vietnamita en territorio filipino para realizar ejercicios tenía «un gran significado político».
El Ministerio de Defensa vietnamita declaró que el simulacro conjunto mejoraría la cooperación y su «capacidad para hacer cumplir la ley en el mar», señalando su preocupación por la estabilidad en la región.
Lily Zhou contribuyó con este informe.
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