La empresa de camiones de EE.UU. Yellow Corp.. solicitó la protección por bancarrota del Capítulo 11 el domingo después de que la compañía cedió ante la presión de una creciente carga de deuda y ante un enfrentamiento con el sindicato de empleados.
“Con profunda decepción, Yellow anuncia que cerrará después de casi 100 años en el negocio”, dijo el director ejecutivo de Yellow, Darren Hawkins, en un comunicado de prensa del 6 de agosto. “Hoy en día, no es común que alguien trabaje en una empresa durante 20, 30 o incluso 40 años, pero muchos en Yellow lo hicieron. Durante generaciones, Yellow proporcionó a cientos de miles de estadounidenses trabajos sólidos y bien remunerados y carreras satisfactorias”.
La declaración de quiebra de la empresa con sede en Nashville, Tennessee, que tiene casi 100 años de antigüedad, pone en riesgo a unos 30,000 trabajadores en un momento en que la industria del transporte de mercancías ya está lidiando con la caída de los volúmenes transportados.
La compañía es un jugador dominante en el segmento de «carga fraccionada» que transporta carga para múltiples clientes en un solo camión.
Sus clientes incluyen grandes minoristas como Walmart y Home Depot, fabricantes y Uber Freight. Algunas empresas habían detenido los envíos a Yellow por temor a perderse o quedar varados si la empresa de camiones quebraba.
Antes de su desaparición, Yellow, una de las compañías de camiones más grandes de EE.UU., poseía aproximadamente del 8 al 10 por ciento de la participación de mercado, según la correduría TD Cowen.
Empresa vs sindicato
El director ejecutivo Hawkins culpó de la caída de la empresa a su fallida relación con el sindicato Teamsters, que representaba a unos 22,000 trabajadores amarillos.
“Todos los trabajadores y empleadores deberían tomar nota de nuestra experiencia con la International Brotherhood of Teamsters (‘IBT’) y preocuparse”, dijo Hawkins. “Enfrentamos nueve meses de intransigencia sindical, intimidación y tácticas deliberadamente destructivas. Una empresa tiene derecho a administrar sus propias operaciones, pero, como hemos experimentado, el liderazgo de IBT pudo detener nuestro plan comercial, lo que literalmente llevó a nuestra empresa a la quiebra, a pesar de todos los esfuerzos para trabajar con ellos”.
El Sr. Hawkins afirmó que la empresa estaba en camino de convertirse en «dominante en la industria» cuando el sindicato IBT frustró los esfuerzos de la empresa.
Detalló una iniciativa llamada “One Yellow” que la empresa estaba llevando a cabo. El sindicato aprobó la Fase 1 del plan, que afirmó fue un éxito ya que “se redujeron los despidos, la carga partió antes de las terminales y mejoró el servicio al cliente”.
“Desafortunadamente, a pesar de la aprobación y el éxito de la Fase Uno, el liderazgo de IBT implementó un bloqueo de nueve meses, lo que detuvo el resto del plan de negocios de Yellow. Esto causó un daño irreparable a Yellow”.
Se produjo una “campaña despiadada” con el sindicato pidiendo la “muerte de Yellow”, dijo el CEO. El retraso resultante fue seguido por pérdidas de «más de USD 137 millones en el EBITDA ajustado».
A fines de junio, Yellow presentó una demanda contra Teamsters, alegando incumplimiento de contrato y pérdida de valor empresarial.
Según otro comunicado de prensa de la compañía, Yellow afirma que los demandados (Teamsters) “violaron su contrato sindical vinculante con Yellow causando más de USD 137 millones en daños al bloquear injustificadamente, durante más de ocho meses, el plan de reestructuración de Yellow para modernizar su negocio”.
La compañía enfatizó: “Sin estas reformas cruciales, que son una práctica estándar en la industria hoy en día, es probable que Yellow no sobreviva, se perderán 30,000 empleos, incluidos 22,000 empleos sindicales, y sus accionistas, incluido el gobierno federal, que posee el 30.1 por ciento de las acciones de Yellow, se verán considerablemente perjudicados”.
“Yellow sigue siendo una parte fundamental de la cadena de suministro nacional con cientos de miles de clientes, grandes y pequeños, que confían en la Compañía para entregar cargas de costa a costa”.
“Durante muchos meses, hemos hecho esfuerzos de buena fe para reunirnos con el IBT para proponer un camino a seguir que funcione para todas las partes, pero se niegan incluso a reunirse, y mucho menos entablar conversaciones honestas”.
“Nos hemos comunicado con todas las partes interesadas en Washington, D.C., incluida la Administración Biden, para informarles sobre la pérdida inminente de decenas de miles de puestos de trabajo, los efectos anticompetitivos significativos en la economía estadounidense y el impacto devastador en la cadena de suministro, y buscar su ayuda para persuadir al IBT de que negocie un acuerdo mutuamente aceptable”.
“Estamos luchando por el sustento de nuestros 30,000 empleados que son buenas personas trabajadoras. Haremos todo lo posible para salvar estos empleos estadounidenses y proteger a nuestros accionistas, incluido el contribuyente estadounidense”.
Yellow culpó a Sean O’Brien, presidente general de IBT, por empeorar los intentos de negociación.
La bancarrota de Yellow pone en riesgo un préstamo del Tesoro de EE.UU. por USD 729.4 millones que vence el 30 de septiembre de 2024. El préstamo se emitió durante la administración anterior de Trump.
Teamster responde
El sindicato Teamsters recibió una notificación legal luego de la declaración de bancarrota de Yellow.
“La noticia de hoy es desafortunada pero no sorprendente. Yellow ha demostrado históricamente que no podía manejarse a sí mismo a pesar de los miles de millones de dólares en concesiones a los trabajadores y los cientos de millones en fondos de rescate del gobierno federal. Este es un día triste para los trabajadores y la industria de carga estadounidense”, dijo el Sr. O’Brien el 31 de julio.
Yellow es propietaria de alrededor de 12,000 camiones y docenas de terminales de carga, y ha incluido a 30 acreedores no garantizados en su declaración de bancarrota, como BNSF Railway, Amazon.com y Home Depot.
Los préstamos realizados en años anteriores han sido objeto de críticas.
“Yellow tenía problemas financieros de larga data antes de la pandemia, no era esencial para la seguridad nacional y nunca debería haber recibido un rescate de los contribuyentes de USD 700 millones del Departamento del Tesoro”, dijo el representante French Hill (R-Ark.) y miembro de la Comisión de Supervisión del Congreso, en un comunicado la semana pasada, citado por el Wall Street Journal.
“Años de mala gestión financiera en Yellow han provocado que personas trabajadoras pierdan sus empleos”.
Yellow se ha enfrentado varias veces a la amenaza de quiebra en las dos últimas décadas. Según el diario, la empresa evitó la quiebra en 2010 después de que los Teamsters aceptaran recortes salariales y de prestaciones.
The Epoch Times se ha comunicado con Yellow y el sindicato Teamsters en busca de comentarios.
Con información de Reuters.
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