El gobernador de Virginia, Glenn Youngkin, prometió detener el requisito de su estado que los obliga a seguir a California en la adopción de reglas estrictas para las emisiones de los vehículos. Calificó dicho requisito como un «edicto ridículo» que eventualmente prohibiría la venta de vehículos a gasolina y diésel.
Los funcionarios estatales dijeron la semana pasada que Virginia está en camino de adoptar las nuevas reglas de California para la transición a vehículos de cero emisiones debido a un proyecto de ley aprobado en 2021, por lo que entonces era una legislatura controlada por los demócratas, que vincula los estándares de emisión de Virginia con los de California.
La Junta de Recursos del Aire de California (CARB) adoptó recientemente nuevas reglas para reducir las emisiones, con el objetivo de que el 100 por ciento de los autos y camiones ligeros nuevos vendidos en California sean de cero emisiones para 2035.
Edicto ridículo
La ley de Virginia, que vincula las normas de emisión de vehículos del estado con las de California, es una situación que los líderes republicanos de Virginia han prometido acabar ya que ahora el GOP controla la gobernación y la Cámara estatal.
“En un esfuerzo por convertir a Virginia en California, los políticos liberales que anteriormente dirigían nuestro gobierno vendieron a Virginia al someter a los conductores de Virginia a las leyes de vehículos de California”, dijo Youngkin en un comunicado en Twitter. “Ahora, bajo ese pacto, los habitantes de Virginia se verán obligados a adoptar la ley de California que prohíbe la venta de vehículos a gasolina y diésel”.
“Ya estoy trabajando para evitar que este edicto ridículo se imponga a los habitantes de Virginia. Las leyes fuera de lugar de California no tienen cabida en nuestro Estado Libre Asociado”, agregó.
En la misma línea, el presidente de la Cámara de Representantes de Virginia, Todd Gilbert, un republicano, dijo en un comunicado la semana pasada que los republicanos en la legislatura estatal planean presentar una medida que desvincule los estándares de emisión de automóviles de Virginia de los de California.
“Los republicanos de la Cámara de Representantes promoverán la legislación en 2023 para que los habitantes de Virginia vuelvan a estar a cargo de los estándares de emisión de automóviles de Virginia y su mercado de vehículos. Virginia no es, y no debería ser, California”, dijo Gilbert.
“El impulso se está construyendo”
El mecanismo de Virginia para alcanzar el umbral de ventas de vehículos de cero emisiones comenzaría en alrededor del 8 por ciento en 2024 y se desarrollaría a partir de ahí. Según el programa, que se aplica a los fabricantes en lugar de a los concesionarios de automóviles, los fabricantes que no cumplan la normativa pueden comprar créditos a los que superen el objetivo.
Después de que el entonces gobernador Ralph Northam convirtió la medida en ley el año pasado, la medida fue aclamada por grupos ambientalistas y por la agencia ambiental de Virginia.
«El gobernador Northam ha convertido en ley el Programa de Autos Limpios Avanzados en un gran logro climático», declaró entonces Elly Boehmer, directora estatal de Environment Virginia.
Rebekah Whilden, representante de la campaña Transporte Limpio para Todos del Sierra Club, dijo en un comunicado después de que el proyecto de ley fuera aprobado por la legislatura que, con la medida, “Virginia ha respondido al llamado de vehículos más limpios”.
“El impulso se está construyendo en todo el país a medida que más y más estados y territorios avanzan con políticas audaces que salvan vidas para acelerar la adopción de vehículos eléctricos y reducir la peligrosa contaminación del transporte”, agregó Whilden.
“Extremadamente desafiante”
Virginia no es el único estado que cuenta con leyes de activación para frenar la venta de autos nuevos de gasolina y diésel si California aprueba tales reglas. Washington y Massachusetts también están en camino de adoptar estándares más estrictos.
Algunos críticos de los agresivos estándares de venta de vehículos de cero emisiones de California advierten que la falta de infraestructura EV clave hace que la adopción de las nuevas reglas de CARB sea «extremadamente desafiante».
“Que estos requisitos sean o no realistas o alcanzables está directamente relacionado con factores externos como la inflación, la infraestructura de carga y combustible, las cadenas de suministro, la mano de obra, la disponibilidad y el precio de minerales críticos y la escasez continua de semiconductores”, dijo John Bozzella, presidente y director ejecutivo de la Alianza para la Innovación Automotriz, en un comunicado.
Bozzella agregó que él y la organización que dirige respaldan por completo el objetivo de poner más vehículos eléctricos en las carreteras. Aun así, hay una serie de cuestiones de política que deben abordarse antes de que esto pueda tener éxito.
“Las preguntas que los formuladores de políticas deberían hacerse: ¿Están implementadas las cadenas de suministro críticas de minerales y baterías? ¿Ocurrirá la minería y el procesamiento de minerales críticos en EE.UU.? ¿Pueden los clientes pagar los vehículos? ¿Todas las comunidades tienen el mismo acceso a la carga residencial de nivel 2 que los propietarios de viviendas unifamiliares?, dijo Bozzella.
“Resolver estas preguntas determinará el éxito final de las regulaciones de California y la transformación de los vehículos eléctricos”, agregó.
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