El Departamento de Defensa de Estados Unidos dijo el jueves que una zona de exclusión aérea impuesta por la OTAN haría poco para evitar algunos de los ataques de Rusia dentro de Ucrania, después de que algunos miembros del Congreso sugirieran la medida.
«Los sistemas que están utilizando los rusos para atacar a las fuerzas ucranianas actualmente, están utilizando muchos cohetes y misiles y artillería», dijo el jefe del Pentágono Lloyd Austin a los periodistas. «Hay una serie de cosas que se pueden utilizar para contrarrestar eso».
Pero Austin dijo que las fuerzas rusas han estado utilizando misiles de crucero que se lanzan desde dentro de las fronteras de Rusia.
«Así que una zona de exclusión aérea no habría impedido esa actividad», dijo Austin a los periodistas mientras hablaba en una conferencia de prensa con el ministro de Defensa eslovaco Jaroslav Nad en Bratislava, Eslovaquia.
El presidente Joe Biden «fue claro, no tendríamos fuerzas estadounidenses luchando en Ucrania», añadió. «Una zona de exclusión aérea significa que estás en combate con Rusia, nuestro presidente dijo que no nos vamos a poner a luchar con Rusia».
«Así que lo que esto realmente significa es que para controlar los cielos, tienes que acabar con las defensas aéreas allí en tierra», detalló Austin. «Y algunos de esos sistemas de defensa aérea están en Rusia y por eso, de nuevo, no hay una forma fácil o sencilla de hacerlo. No hay tal cosa como una zona de exclusión aérea reducida. Una zona de exclusión aérea significa que estás en un conflicto con Rusia. Así que, desde la perspectiva de Estados Unidos, nuestra posición sigue siendo que no vamos a hacer eso», añadió.
Desde el comienzo de la invasión, el 24 de febrero, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski ha pedido con frecuencia a Estados Unidos y a la OTAN que establezcan una zona de exclusión aérea sobre Ucrania. Durante un discurso ante el Congreso, Zelensky pidió a los legisladores que «cerraran los cielos», es decir, que establecieran una zona de exclusión aérea sobre su país.
Anteriormente, los funcionarios de la OTAN dijeron que una zona de exclusión aérea extendería el conflicto fuera de Ucrania y podría iniciar una guerra mundial con Rusia.
En lugar de utilizar una zona de exclusión aérea, los funcionarios estadounidenses han optado por enviar armas y municiones a Ucrania. Biden dijo a principios de esta semana que su administración proporcionaría a Kiev 3000 misiles tierra-aire portátiles que incluyen unos 800 misiles antiaéreos Stinger y 2000 misiles Javelin que, según se informa, han sido muy eficaces contra los vehículos blindados rusos.
Ucrania también ha pedido aviones de combate MiG-29, misiles antiaéreos S-300 y otros sistemas en lugar de una zona de exclusión aérea. Al parecer, Eslovaquia posee misiles S-300 de la época soviética, y Nad declaró a los periodistas que su gobierno está estudiando la posibilidad de enviar armas a Ucrania.
En caso de que Eslovaquia envíe los sistemas de misiles a Ucrania, Nad sugirió que el sistema defensivo probablemente tendría que ser reemplazado por Estados Unidos. Eslovaquia, que era la mitad oriental de la antigua Checoslovaquia, es una nación del antiguo Pacto de Varsovia que comparte una pequeña frontera con Ucrania.
«Estamos dispuestos a hacerlo inmediatamente cuando tengamos un reemplazo adecuado», dijo Nad, añadiendo que los sistemas S-300 son su «único sistema estratégico de defensa aérea».
«Así que lo que ocurriría inmediatamente cuando decidiéramos dárselo a los ucranianos es que en realidad creamos una brecha, una brecha de seguridad, en la OTAN», añadió.
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