WASHINGTON— El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, expresó su preocupación por los lazos entre Beijing y Moscú cada vez más estrechos y su implicación en el conflicto entre Rusia y Ucrania, dudando de que el plan de paz chino funcione.
«Nosotros queremos que tomen la decisión correcta para no facilitar a Putin la matanza de ucranianos», declaró Kirby a The Epoch Times. «Ellos van a tener que tomar estas decisiones y no creemos que sea de su interés ponerse del lado de Rusia sin reservas y dentro de esta guerra».
Sobre el plan de paz chino, Kirby dijo que «es difícil ver cómo esto podría representar una opción sostenible aquí cuando no ha habido discusiones entre los chinos y los ucranianos».
Beijing publicó el 24 de febrero un documento titulado «China’s Position on the Political Settlement of the Ukraine Crisis» en un esfuerzo por presentarse como mediador en la guerra que dura ya un año. Beijing se refirió al documento como un «plan de paz», aunque se quedó corto en detalles.
El documento aboga por «respetar la soberanía de todos los países» y afirmaba que «la soberanía, la independencia y la integridad territorial de todos los países deben mantenerse de forma efectiva».
En una rueda de prensa celebrada el 24 de febrero, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, afirmó que la integridad territorial, que defendía el documento, exigiría que Rusia abandonara Ucrania.
«La integridad territorial implica la retirada de las tropas rusas. Si eso no está ahí, significa que no nos parece bien», declaró el presidente a la prensa.
Además, Zelenski dijo que le gustaría reunirse con el líder comunista chino Xi Jinping para discutir la propuesta de Beijing. «Creo que beneficiará a nuestros países y a la seguridad del mundo».
En el documento también se instó a «abandonar la mentalidad de la Guerra Fría», una frase utilizada con frecuencia por los funcionarios chinos para criticar a Estados Unidos y sus aliados, así como a «poner fin a las sanciones unilaterales» contra Rusia.
En el primer aniversario de la invasión rusa, el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, realizó una visita sorpresa a Kiev y mantuvo reuniones en Polonia el 20 de febrero, reafirmando su compromiso con Ucrania. Esa misma semana, Rusia y China celebraron reuniones de alto nivel en Moscú, en las que ambas partes acordaron estrechar lazos.
La Casa Blanca declaró recientemente que Beijing estaba considerando la posibilidad de enviar ayuda militar letal a Rusia.
«Nosotros no hemos visto que los chinos hayan tomado la decisión de avanzar en esa dirección», dijo Kirby durante una rueda de prensa el lunes, añadiendo que si China opta por proporcionar ayuda militar a Rusia, habrá ramificaciones.
El director de la CIA, Bill Burns, también confirmó la posibilidad de que China envíe ayuda letal a Rusia en una entrevista el 25 de febrero con CBS News.
El 24 de febrero, la administración Biden anunció nuevas sanciones contra Rusia y sus aliados. Las medidas incluyen el aumento de los aranceles y el control de las exportaciones de sectores rusos clave, así como el control de las exportaciones de entidades chinas de las que se sabe que han ayudado a la maquinaria bélica rusa.
Con la contribución de Andrew Thornebrooke
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