Prisión de Oregón se destinará a proveer hogares para los desamparados desde octubre

Por The Epoch Times
24 de Septiembre de 2020 6:31 PM Actualizado: 24 de Septiembre de 2020 6:31 PM

La cárcel de Wapato, al norte de Portland, abrirá sus puertas para albergar a cientos de personas sin hogar.

Después de una reciente ceremonia de rehabilitación, que incluyó el corte simbólico del alambre de púas que rodea las instalaciones, ya no será conocida como Cárcel de Wapato.

El Centro de Esperanza Bybee Lakes pasará a ser una instalación de alojamiento transitorio y se abrirá a principios de octubre.

Vista frontal de la prisión Wapato en Portland, Oregon. (Graywalls/CC BY-SA 4.0)

Durante ocho largos meses, los Centros de Ayuda para la Reinserción Helping Hands han estado preparando el edificio de 155,000 pies cuadrados.

Desde su construcción en 2004, quedó vacío y sin usar. El costo original de su construcción fue de 58 millones de dólares, reportó KGW8.

Después de los recortes presupuestarios, el condado ya no pudo costear la apertura de la prisión ni los 50,000 dólares mensuales de mantenimiento. La cárcel permaneció vacía durante 17 años desde su construcción.

Luego el promotor inmobiliario Jordan Schnitzer compró la cárcel al condado de Multnomah por 5 millones de dólares con el sueño de convertirla en un centro de ayuda comunitaria.

Con un número cada vez mayor de personas sin hogar en el área de Portland, este centro para personas sin hogar será de mucha utilidad y dará esperanza a la comunidad.

Dentro de la prisión Wapato tomada durante la visita pública en Portland, Oregon. (Graywalls/CC BY-SA 4.0)

Schnitzer tuvo grandes esperanzas que lo apoyarían en su esfuerzo, pero dice que espera que más donantes se acerquen en cuanto vean el bien que se está haciendo.

Después Alan Evans, director ejecutivo de la organización sin fines de lucro Helping Hands, unió fuerzas con el promotor inmobiliario para hacer realidad lo que alguna vez fue un sueño.

Evans atribuye a los donantes de Helping Hands y a Schnitzer, quienes ayudaron a la organización a recaudar 4 millones de dólares para comenzar las operaciones y les dio un contrato de arrendamiento de cinco años por 1 dólar al año.

“Cuando esto se abra y mucha gente que no estaba segura si iba a funcionar vea que está funcionando, creo que muchas personas se acercarán y ayudarán a hacer contribuciones, y entonces también algunos políticos podrán decir que hay algunos fondos públicos disponibles para mantener el programa en marcha”, dijo Schnitzer.

Inicialmente, habrá 240 camas disponibles en diciembre y una serie de programas para ayudar a la gente a recuperarse.

Corredor dentro de la prisión Wapato. (Graywalls/CC BY-SA 4.0)

El Centro de Esperanza Bybee Lakes es un “lugar para aprender a cambiar su vida, un lugar para educarse, recibir formación profesional, formación en artes culinarias”, dijo Evans.

Se esperaba que el centro abriera en septiembre, pero ahora está previsto que abra el 2 de octubre, comenzando con un refugio de emergencia de 84 camas.

Luego, en diciembre, está previsto que inicie la fase dos con 228 camas para programas de alojamiento y reentrada a largo plazo.

El Centro de Esperanza Bybee Lakes en conjunto con “Helping Hands” servirá como un refugio y programa de reingreso, y proporcionará asesoramiento de salud mental, entre otras cosas. Los servicios incluirán comida, camas, baños, capacitación laboral y rehabilitación.

El próximo año, esperan aumentar la capacidad a 525 personas cuando todas las alas estén llenas.

“Lo que esto significa es una esperanza y un sueño cumplido”, dijo Schnitzer. “Y me fortalece para no dejar nunca de lado sus sueños. No importan los obstáculos”.

Vista desde el segundo piso del área de la prisión Wapato. (Graywalls/CC BY-SA 4.0)

Y hubo obstáculos. Muchos.

Tanto Schnitzer como Evans se conocieron en un evento caritativo en Seaside; ambos hombres, que venían de orígenes muy diferentes, se dieron la mano y comenzaron una nueva y asombrosa sociedad.

Evan compartió su historia de haber estado sin hogar durante 27 años —desde los 14 años— siendo un drogadicto, y de cómo fue abusado cuando era niño.

Un refugio para personas sin hogar de Seaside lo ayudó y ahí fue donde su vida cambió.

Después de un encuentro casual con el millonario promotor Jordan Schnitzer, un apretón de manos y una increíble propuesta, Evan se dirigió a la cárcel de Wapato.

Schnitzer le alquiló el edificio por $1 al año a través de la recién establecida Helping Hands Charity.

En una entrevista reciente, Evans dijo a KGW8 que la comunidad tiene muchas necesidades, pero que el Centro de Esperanza Bybee Lakes no es una instalación que lo arregle todo. Dijo que la población de más rápido crecimiento de personas sin hogar son los ancianos y las mujeres con niños.

“Esas son las personas a las que estamos dispuestos a ayudar. Y le daremos a cualquiera una oportunidad”, dijo Evans. “Pueden disponer hasta el día antes de venir a nosotros, pero cuando vienen con nosotros, tienen que estar dispuestos a pasar por un programa de tratamiento. Pero no pueden vivir el estilo de vida que estaban viviendo y estar en nuestras instalaciones”.

Dijo que su modelo consiste en ayudar a la gente que es capaz y está lista a cambiar, y que le darán a todos una oportunidad. Evans dijo que la organización y su modelo están construidos sobre su experiencia de vida.

Se espera que la ya alta población de personas sin hogar del condado de Multnomah aumente en un estimado de 40-45 por ciento debido a la pandemia, llegando a un total de 5821 individuos, reportó KGW8.

¡Nos encantaría escuchar sus historias! Puedes compartirlas con nosotros en [email protected]


Apoye nuestro periodismo independiente donando un “café” para el equipo.


A continuación

A los 20 años no era saludable, pero descubrió que vivir de acuerdo con Verdad, Benevolencia y Tolerancia su vida podía cambiar

Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.