Régimen chino realizará una reunión política a pesar de que Beijing está en alerta máxima por el virus

Por Nicole Hao
30 de Abril de 2020 8:36 PM Actualizado: 30 de Abril de 2020 8:36 PM

El régimen central de China anunció que el Lianghui nacional—cuando la legislatura del Partido Comunista se reúne, por simple formalidad, para promulgar políticas y agendas— se llevará a cabo en Beijing los días 21 y 22 de mayo, luego de posponerlo inicialmente debido a la pandemia.

Por lo general, participan más de 5000 delegados de todo el país.

El Lianghui, que se traduce en “dos sesiones” en referencia al congreso–el cual existe por simple formalidad–y su órgano asesor que se reúne anualmente en Beijing, normalmente se celebra en marzo. Pero a medida que el brote de virus envolvió al país, el Partido anunció en febrero que la reunión se pospondría.

En respuesta a las fechas de Lianghui anunciadas el 29 de abril, Beijing y las ciudades cercanas anunciaron que rebajarían sus niveles de respuesta de emergencia al virus a partir del 30 de abril. Pero el 30 de abril, la comisión municipal de salud de Beijing lanzó nuevas medidas de prevención para todas las instalaciones médicas en la ciudad, lo cual indica que el brote en la capital del país sigue siendo severo.

Las autoridades de Beijing han reportado cero nuevas infecciones en los últimos días y guardaron silencio sobre el brote de la ciudad, pero los residentes locales y los documentos internos mostraron que los funcionarios estaban en alerta máxima sobre el seguimiento de contactos cercanos de los pacientes confirmados.

“El régimen quiere mostrarle a la gente que el brote está bajo control en todo el país mediante la celebración del Lianghui en mayo”, dijo el comentarista de asuntos chinos con sede en Estados Unidos, Tang Jingyuan. “El régimen también quiere demostrar que logró el éxito en la guerra contra el virus”.

En entrevistas anteriores, los ciudadanos chinos expresaron que no creían que el brote estuviera contenido, a menos que el Lianghui no fuese suspendido —porque esto significaría que los funcionarios del Partido tendrían miedo de que el virus aún tenga el potencial de propagarse y no quieren arriesgarse a ser infectados durante una gran reunión.

Nuevo horario

Poco después del anuncio del gobierno central, varios gobiernos provinciales, como Yunnan y Sichuan, anunciaron los horarios de su Lianghui local.

Cada nivel administrativo del gobierno tiene su rama local de la Asamblea Popular Nacional de China y la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, que celebraría reuniones antes del Lianghui nacional.

En enero, algunas provincias, como Shandong, Guangdong y Hubei —la provincia donde se encuentra el virus de la zona cero en Wuhan— tuvieron su Lianghui local antes de que el brote del virus se saliera de control.

Cuando las autoridades de Wuhan cerraron la ciudad el 23 de enero, las provincias de Hunan, Guangdong y Zhejiang también lanzaron una respuesta de emergencia de nivel uno (la más alta) a la epidemia.

China promulgó un sistema nacional de respuesta a emergencias de salud pública en 2006, con cuatro niveles de respuesta. El nivel uno significa que el gobierno central tomará la iniciativa para abordar una crisis.

Uno tras otro, los gobiernos regionales aumentaron su nivel de respuesta a nivel uno a fines de enero.

Pero desde el 21 de febrero, los gobiernos regionales redujeron sus niveles de respuesta de emergencia luego de que las autoridades locales informaran menos infecciones nuevas.

The Epoch Times obtuvo previamente documentos internos que mostraban que los gobiernos regionales informaban de manera rutinaria los datos de virus.

Reacciones de Beijing

Poco después de que el nivel de respuesta de emergencia en Beijing se redujera al nivel dos, la comisión de salud de la ciudad emitió una solicitud a todas las instituciones médicas y de salud de la ciudad para “evitar tres cosas: evitar cualquier aflojamiento de los controles, cualquier brecha y que resurja un brote”.

El aviso requería que todos los hospitales vigilaran de cerca las posibles infecciones; controlar la distancia entre visitantes y pacientes; prohibir al personal realizar viajes de negocios a regiones de riesgo medio y alto; y usar solo el 70 por ciento de su capacidad, para mantener las reglas de distanciamiento social. Además, el personal médico no debe reunirse para conversar.

La comisión también detalló los requisitos al encontrarse con pacientes sospechosos del virus, como aislar a la persona en una habitación separada de inmediato, no permitir visitas y usar un vehículo de ambulancia de presión negativa si el paciente necesita ser transferido a otra instalación.

Otra metrópoli cerca de Beijing, la ciudad de Tianjin y la cercana provincia de Hebei también redujeron su respuesta de emergencia a nivel dos el 30 de abril.

El 29 de abril, la comisión de salud de la ciudad también exigió a los residentes usar mascarillas en espacios públicos, lavarse las manos con frecuencia y no participar en reuniones sociales.

Chen Bei, jefa adjunta del Partido del gobierno de la ciudad de Beijing, también dijo a las autoridades que vigilen de cerca el movimiento de personas en los complejos residenciales.

Ella explicó que los residentes locales deben usar un pase de entrada para ingresar a sus complejos residenciales. Los familiares o amigos solo pueden visitar si poseen un código de salud verde—una aplicación móvil que determina si una persona está libre de virus, en función de que los usuarios ingresen sus datos de salud.

Los puntos de control en los principales centros de transporte de la ciudad también deben ser estrictamente monitoreados, dijo, incluso en los aeropuertos, estaciones de tren, estaciones de autobuses interurbanos, autopistas, etc. Se requiere que la policía revise cada vehículo, la identidad de cada pasajero, el código de salud y controle la temperatura de su cuerpo.

Chen también aconsejó a los residentes de Beijing que no realicen viajes de negocios o vayan de vacaciones al extranjero. “[El gobierno] supervisará estrechamente a las personas que regresen del extranjero”, advirtió.

Cualquier persona que llegue a Beijing desde el extranjero debe ser sometida a observación en centros de cuarentena durante 14 días y luego aislarse en su hogar durante otros siete días. Cualquier viajero que provenga de la provincia de Hubei y otras regiones de riesgo alto o mediano, como el noreste de China, donde ocurrieron brotes recientes, debe aislarse en su hogar durante 14 días. Estas personas también necesitan tomar pruebas de ácido nucleico para determinar si tienen el virus.

Los viajeros de regiones de bajo riesgo no necesitarán ser puestos en cuarentena, sino que deben completar un formulario de salud, tomarse la temperatura corporal y escanear el código de salud al llegar.

Beijing facilitó sus reglas de cuarentena al exigir previamente a todos los viajeros que llegan a Beijing que se pongan en cuarentena, probablemente para acomodar a los viajeros que pronto viajarán a Beijing para el Lianghui.


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