El Reino Unido suspendió su tratado de extradición con Hong Kong luego de la imposición por parte de Beijing de una ley draconiana de seguridad nacional sobre la excolonia británica, dijo el canciller Dominic Raab.
«El gobierno decidió suspender el tratado de extradición de forma inmediata e indefinida», dijo Raab a la Cámara de los Comunes el 20 de julio, porque «la imposición de esta nueva legislación de seguridad nacional ha cambiado significativamente las premisas clave que sustentan nuestros acuerdos de extradición con Hong Kong».
La ley de seguridad nacional, que entró en vigencia el 30 de junio, penaliza a las personas por cualquier acto de subversión, secesión y colusión con fuerzas extranjeras contra el régimen del Partido Comunista Chino (PCCh), con una pena máxima de cadena perpetua.
El primer ministro Boris Johnson ha dicho que la ley «constituye una violación clara y grave de la Declaración Conjunta sino-británica», ya que «viola el alto grado de autonomía de Hong Kong y está en conflicto directo con la ley básica de Hong Kong».
Canadá, Australia y Estados Unidos ya han suspendido sus tratados de extradición con Hong Kong en respuesta a la legislación.
Raab también anunció que el Reino Unido está imponiendo un embargo de armas a Hong Kong.
«Dado el papel que China ha asumido para la seguridad interna de Hong Kong y la autoridad que está ejerciendo sobre la aplicación de la ley, el Reino Unido extenderá a Hong Kong el embargo de armas que hemos aplicado a China continental desde 1989», dijo al Parlamento.
Según las nuevas reglas, el Reino Unido prohibirá a Hong Kong las exportaciones de armas, componentes o municiones potencialmente letales y cualquier equipo que pueda usarse para la represión interna, como grilletes, equipo de detective, armas de fuego y granadas de humo.
«El Reino Unido está observando y todo el mundo está observando», dijo Raab mientras prometía liderar la respuesta internacional a la situación en Hong Kong.
«Continuaremos desempeñando un papel de liderazgo en la participación y coordinación de nuestras acciones con nuestros socios internacionales como corresponde a nuestro compromiso histórico con la gente de Hong Kong», dijo.
Lisa Nandy, la responsable de Asuntos Exteriores del Partido Laborista de oposición, dijo que el Partido Laborista apoya «firmemente» las nuevas medidas del gobierno y agradeció a Raab «calurosamente» por dar los pasos hacia adelante.
Pero instó al gobierno a ir más allá imponiendo sanciones Magnitsky a los funcionarios chinos y a los funcionarios de Hong Kong responsables de abusos contra los derechos humanos, y revisando la participación de China en proyectos de energía nuclear británica.
Después de que el régimen chino impulsara la ley de seguridad nacional a Hong Kong el 30 de junio, el gobierno británico anunció que extenderá los derechos de inmigración para aproximadamente 3 millones de residentes de Hong Kong que tienen el estatus de nacional británico (en el extranjero),
Bajo la presión de los parlamentarios estadounidenses y británicos de los partidos gobernantes y de oposición, el primer ministro Boris Johnson también ha prohibido a la firma china de telecomunicaciones Huawei realizar más aportes a la infraestructura de telecomunicaciones del Reino Unido para fines de 2020, y ha prometido purgar todo el equipo 5G de Huawei del país para 2027.
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