Las autoridades de un suburbio de Houston dijeron el jueves que se encontraron restos humanos dentro de una camioneta SUV que chocó contra una válvula sobre el suelo de un oleoducto, lo que desató un incendio que lleva ardiendo cuatro días.
Las autoridades pudieron acceder al lugar alrededor de las 7 a.m. del 19 de septiembre cuando el incendio se calmó, anunció la ciudad de Deer Park, Texas, en un comunicado, lo que les permitió retirar la camioneta SUV blanca asociada con el incidente.
«Una vez retirado, los médicos forenses del condado de Harris pudieron procesar el vehículo», dice el comunicado. «Durante el procesamiento, pudieron recuperar y retirar los restos humanos. Ahora comenzarán a trabajar en el proceso de identificación, que llevará algún tiempo».
El descubrimiento dio lugar a una investigación criminal que sigue en curso, según el comunicado, y se liberó información antes limitada, sin embargo hasta su conclusión será publicada.
Energy Transfer, empresa propietaria del oleoducto con sede en Dallas, accedió al terreno para empezar a trabajar después del retiro de la camioneta, según el comunicado, y agregó que se instó a los ciudadanos y a los medios de comunicación a mantenerse a una distancia prudencial de la zona, para que quienes trabajan con el equipo pesado pudieran proceder de manera segura y sin distracciones.
El incidente comenzó el 16 de septiembre, cuando una camioneta blanca salió de un estacionamiento cerca de un Walmart, cruzó un área de césped y chocó contra la válvula aérea del oleoducto de gas natural.
El impacto de la colisión desencadenó un incendio de grandes proporciones, que produjo enormes llamas y un espeso humo negro visible a kilómetros de distancia, lo que obligó a las autoridades locales a evacuar casi 1000 viviendas e imponer órdenes de refugio en las escuelas cercanas.
Algunos residentes expresaron su frustración por verse obligados a marcharse inmediatamente sin que se les indicara cuándo podrán regresar.
Energy Transfer inicialmente calificó la colisión como un accidente. Las investigaciones preliminares realizadas por la policía local y agentes del FBI no encontraron signos de actividad ilícita o terrorismo, pero la causa exacta de las acciones del conductor aún son materia de investigación.
Mientras el fuego continúa ardiendo, los equipos de Energy Transfer instalan aparatos de aislamiento especializados para cortar la sección dañada del oleoducto y apagar las llamas. Los funcionarios indicaron que una vez que el oleoducto esté sellado y purgado con nitrógeno, el fuego debería extinguirse en pocas horas. Dijeron que no esperan que se apague hasta el jueves por la tarde.
Los residentes de Deer Park y la vecina LaPorte fueron los más afectados por el fuego. Los cortes de energía afectaron cientos de hogares, y la electricidad fue restaurada en su mayoría el miércoles por la tarde. Los residentes evacuados comenzaron a ser autorizados a regresar a casa desde el miércoles por la noche.
Los funcionarios aseguran al público que el monitoreo de la calidad del aire no señala peligro inmediato, a pesar de las oscuras nubes de humo producidas por el fuego. Sin embargo, el incidente generó preocupaciones sobre los protocolos de seguridad en el corredor petroquímico de Houston, donde los incendios en refinerías y oleoductos no son poco comunes.
Con información de The Associated Press.
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