Otros 1.1 millones de estadounidenses presentaron solicitudes de beneficios de desempleo la semana pasada, lo que confundió las predicciones de los economistas y avivó los temores de que la recuperación del mercado laboral se está estancando.
El Departamento de Trabajo dijo el jueves que el número de solicitudes iniciales de beneficios de desempleo estatales aumentó a 1.1 millones ajustados por temporada la semana pasada, después de caer por debajo del millón una semana antes, en una señal esperanzadora de que el mercado laboral estadounidense podría estar en una recuperación constante. Los economistas encuestados por Reuters pronosticaron 925,000 solicitudes iniciales de desempleo en la semana que terminó el 15 de agosto, por lo que las cifras del jueves frustraron esos esperanzadores pronósticos.
Las cifras de la semana anterior, en la que se presentaron 971,000 solicitudes iniciales, fueron la primera vez en más de 20 semanas que las solicitudes se encontraron por debajo de un millón después de alcanzar un máximo de 6.97 millones a mediados de marzo.
«El incremento de hoy en el desempleo inicial decepcionará al mercado, especialmente después de los prometedores datos de la semana pasada», dijo Richard Flynn, director general de la empresa corredora de bolsa Charles Schwab en el Reino Unido, en declaraciones para la BBC.
“Si bien las industrias más afectadas trajeron trabajadores de regreso en julio, el nivel de debilidad sigue sin precedentes, y el impacto de los cierres continuos relacionados con el virus podría continuar revirtiendo parte de esa mejora”, agregó.
Los mercados de valores estadounidenses abrieron a la baja el jueves después del aumento de las solicitudes semanales de desempleo. En la campana de apertura, el Promedio Industrial Dow Jones cayó 70.20 puntos, o 0.25 %, a 27,622.68, el S&P 500 abrió a la baja en 14.37 puntos, o 0.43 %, a 3360.48, mientras que el Nasdaq Composite cayó 50.06 puntos, o 0.45 %, a 11,096.40.
Las solicitudes de desempleo continuas, es decir, que reflejan a las personas que han presentado solicitudes regulares durante al menos dos semanas consecutivas, cayeron a 636,000 desde la semana anterior, pero siguen siendo altas, con 14.8 millones.
«El virus COVID-19 continúa impactando el número de solicitudes iniciales y de seguro de desempleo», dijo el Departamento de Trabajo en su comunicado, el cual también mostró que el número total de personas que solicitaron beneficios de desempleo en todos los programas de la semana que terminó el 1 de agosto fue de 28,059 millones. Si bien esta es una disminución de 197,601 con respecto a la semana anterior, este es un número históricamente elevado, ya que la misma semana de 2019, hubo 1.7 millones de personas que solicitaron beneficios en todos los programas.
Las cifras de desempleo del Departamento de Trabajo dan sustento a la opinión de la Reserva Federal de un camino difícil hacia la recuperación económica. Las minutas de una reunión de política de la Fed en julio, publicadas el miércoles, demuestran que los funcionarios advertían sobre niveles «extremadamente elevados» de incertidumbre en torno a las perspectivas económicas y diciendo sus expectativas respecto a que la pandemia continúe cobrando un precio alto en la economía estadounidense.
Los funcionarios de la Fed en la reunión “señalaron que la trayectoria de la economía dependería significativamente del curso del virus y que la actual crisis de salud pública pesaría mucho sobre la actividad económica, el empleo y la inflación en el corto plazo y plantearía riesgos considerables para las perspectivas económicas a mediano plazo”, se muestra en el documento.
Además del virus, entre los riesgos para la incipiente recuperación económica de Estados Unidos se incluye la incertidumbre de las empresas sobre la sostenibilidad del reciente aumento del gasto de los consumidores, agravada por una posible retirada del estímulo. Desde marzo, el Congreso ha aprobado alrededor de 3.6 billones de dólares en nuevos gastos para contrarrestar el golpe pandémico a la economía, pero las conversaciones se han estancado en cuanto a nuevas medidas, lo que ha llevado al presidente Donald Trump a tomar medidas ejecutivas para extender los beneficios de desempleo pandémico y el aplazamiento del impuesto sobre la nómina para proporcionar alivio a las familias estadounidenses.
De acuerdo con el Departamento de Trabajo, los mayores aumentos en las solicitudes iniciales de desempleo para la semana que terminó el 8 de agosto fueron en Nevada (+4028), Puerto Rico (+3601), Kansas (+2248), Hawaii (+247), y Dakota del Sur (+198), según mostraron las cifras del Departamento de Trabajo. Las mayores disminuciones fueron en Nueva York (-21,366), California (-19,534), Florida (-16,702), Georgia (-11,596), y Virginia (-10,653).
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