La entidad que determina el calendario de vacunación de los niños en Texas se apresuró a ajustar su página web el 20 de octubre, horas después de que los asesores de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) emitieran una recomendación para añadir la vacuna contra el COVID-19 al calendario de vacunación infantil.
Después de que un representante estatal expresara su preocupación, el Departamento Estatal de Servicios de Salud de Texas (DSHS, por sus siglas en inglés) eliminó una línea en su sitio web que decía: «Los niños necesitan todas las vacunas recomendadas por los CDC» para asistir a la escuela.
El representante Brian Harrison, republicano, dijo que se alegraba de que el DSHS eliminara rápidamente el «texto problemático» de su sitio web.
Harrison se desempeñó como jefe de personal de la agencia federal de Salud y Servicios Sociales durante la Administración Trump.
«Creo que los gobernadores que remiten ciegamente de los CDC no cumplen con su deber, creo que las legislaturas estatales que permiten que las agencias estatales remitan ciegamente a los CDC, al menos para las vacunas COVID, no cumplen con su deber», dijo Harrison a The Epoch Times el 24 de octubre.
Muchos estados adoptan unilateralmente las recomendaciones de vacunación de los CDC sin contar con la opinión de los funcionarios elegidos o de los padres.
«Esta gente [los CDC] está aprobando vacunas basándose nada más que en consideraciones políticas, y lo están haciendo de forma regular», dijo Harrison.
«Si nosotros [la Administración Trump] hubiéramos aprobado un refuerzo, por ejemplo … con datos de solo ocho ratones, habría habido llamadas inmediatas para la destitución».
Uno de los asesores de los CDC que aprobó la vacuna contra el COVID-19 para niños la semana pasada dijo que era una indicación de que el virus es endémico.
«Cuando pienso en el calendario de vacunación rutinaria como pediatra, pienso en él como una oportunidad para prevenir enfermedades graves y muertes», dijo el Dr. Matthew Daley, asesor.
«Y si se añade algo al calendario, es porque considero que los beneficios siguen siendo muy superiores a los riesgos».
Las vacunas contra el COVID-19 han demostrado ser cada vez menos eficaces contra la infección y la enfermedad grave de las nuevas variantes del virus. Además, no hay pruebas de que las vacunas protejan contra la enfermedad grave en niños menores de 5 años.
En Florida, el departamento de salud del estado ha desaconsejado recientemente las vacunas contra COVID-19 de ARNm para los niños sanos, así como para los varones de entre 18 y 39 años.
«Basándose en los datos actualmente disponibles, los pacientes deben ser informados de las posibles complicaciones cardíacas que pueden surgir tras recibir la vacuna COVID-19 de ARNm», dijo el 7 de octubre el director de Salud Pública del Estado del Sol, Joseph Ladapo, en un comunicado.
«Con un alto nivel de inmunidad global al COVID-19, el beneficio de la vacunación es probablemente superado por este riesgo anormalmente alto de muerte relacionada con el corazón entre los hombres en este grupo de edad».
Aunque el gobernador de Texas, Greg Abbott, no ha emitido ninguna declaración sobre la nueva recomendación de los CDC para los niños, su portavoz, Renae Eze, dijo a The Epoch Times que «Texas tiene una ley de larga data que protege el derecho de los padres a decidir qué vacunas recibirán sus hijos».
«Para proteger el derecho de los texanos a elegir para sí mismos y para sus hijos, el gobernador Abbott emitió una orden ejecutiva el año pasado que garantiza las excepciones».
La orden ejecutiva de Abbott, emitida el 11 de octubre de 2021, sigue vigente, sujeta a la acción legislativa.
«Ninguna entidad en Texas puede obligar a recibir la vacuna COVID-19 a ningún individuo, incluyendo un empleado o un consumidor, que se oponga a dicha vacunación por cualquier razón de conciencia personal, basada en una creencia religiosa, o por razones médicas, incluyendo la recuperación previa del COVID-19», dice la orden.
En la actualidad, el Código de Educación de Texas otorga al DSHS la autoridad para establecer los requisitos de inmunización sin necesidad de una acción legislativa, algo que Harrison quiere cambiar con respecto a las vacunas contra el COVID-19.
Para ello, Harrison se está preparando para presentar un proyecto de ley en la próxima sesión legislativa que comienza el 10 de enero de 2023.
«Texas, a través de la legislatura, debe aprobar una ley para prohibir los mandatos de las vacunas COVID. Es un imperativo moral», dijo Harrison. Espera contar con el apoyo para que se apruebe con éxito.
«Si no prohibimos los mandatos de las vacunas COVID y permitimos que burócratas no elegidos en Washington fuercen las agujas en los brazos de los texanos en contra de su voluntad, también podríamos renunciar a la Constitución, a la libertad individual, a la soberanía estatal, a la libertad médica y al consentimiento informado».
Douglas Loveday, jefe de prensa del DSHS, dijo a The Epoch Times por correo electrónico el 24 de octubre que su agencia «seguirá la dirección y la voluntad de la Legislatura».
En la sección de exención de vacunas para la escuela en el sitio web del DSHS, una nota afirma que la vacuna contra el COVID-19 no está en la lista porque «el estado de Texas no requiere actualmente la vacuna COVID-19 para asistir» a las escuelas y guarderías.
Con reportaje de Zachary Stieber.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
