GRAND RAPIDS, Michigan —Las políticas de inmigración del presidente Joe Biden están «destruyendo» el país, debido al número de inmigrantes ilegales que inundan Estados Unidos y cometen delitos, dijo el expresidente Donald Trump en un discurso pronunciado aquí el martes.
“Esto está cambiando el país, es una amenaza para el país y lo está destruyendo”, dijo el expresidente Trump a varios cientos de invitados en el Centro de Convenciones de Grand Rapids. «Han destrozado nuestro país. Pero hoy me presento ante ustedes para declarar que el baño de sangre fronterizo de Joe Biden… va a terminar el día que yo tome posesión».
Decenas de oficiales de policía estuvieron junto al expresidente Trump cuando éste culpó a la política de «fronteras abiertas» del presidente Biden de una oleada de muertes, crímenes violentos y sobredosis mortales de drogas atribuidas a los inmigrantes ilegales.
La inmigración se ha convertido en el tema principal mientras el expresidente Trump, presunto candidato republicano, se prepara para enfrentarse al presidente Biden, aparente candidato demócrata, en las elecciones generales del 5 de noviembre.
Cuando se les pidió que respondieran a las esperadas declaraciones del presidente Trump, los demócratas de Michigan acusaron a la campaña de Trump de avivar el miedo y la división; el gobierno de Biden reiteró su queja de que el Congreso no ha tomado más medidas para mejorar la seguridad fronteriza.
Ambos bandos acusaron al presidente Trump de jugar a la política con tragedias como la reciente muerte de Ruby Garcia, de 25 años, cuyo asesinato en Grand Rapids se imputa a un ciudadano mexicano previamente deportado.
Pero tres líderes policiales subieron al estrado para respaldar las afirmaciones del presidente Trump. Cada uno de ellos describió lo gravemente que la inmigración ilegal está afectando a las fuerzas policiales y a los ciudadanos. Dijeron que, debido a ella, se está extendiendo una cultura de anarquía. Y los tres dijeron al presidente Trump que necesitan su ayuda y que confían en que cerrará la frontera y restablecerá el orden.
«Lo necesitamos»
La Asociación de Agentes de Policía de Michigan, que representa a 12,000 agentes de todo el estado, respaldó al presidente Trump por tercera vez, según anunció el presidente de la organización, James Tignanelli.
Dijo que los delincuentes de todo tipo se envalentonan cuando ven que se dispensa un trato especial a los inmigrantes ilegales.
«¿Por qué esperas que la gente obedezca la ley cuando millones de personas son recompensadas por desobedecerla?», dijo.
Volteándose con frecuencia para mirar al presidente Trump mientras hablaba, el Sr. Tignanelli dijo que los oficiales de policía están desmoralizados porque se enfrentan a un estrés cada vez mayor, a la falta de respeto y a la creciente población de inmigrantes ilegales que cometen delitos.
«Necesitamos un comandante en jefe que les conceda simplemente el debido proceso. … Solo necesitan saber que tienen a alguien que los respalda», dijo, y añadió: «Lo necesitamos a usted», señalando al expresidente.
Dijo que el presidente Trump «honró a todos los policías» de Estados Unidos la semana pasada, cuando el expresidente presentó sus respetos a un agente caído en Nueva York, Jonathan Diller. «Eso es un estímulo para todos nosotros», dijo el Sr. Tignanelli, que pidió la pena de muerte para cualquier persona condenada por matar a un oficial de policía en servicio.
Otro orador, el sheriff del condado de Van Buren, Daniel Abbott, citó dos estadísticas que hicieron suspirar al público.
En su condado, de 76,000 habitantes, los agentes son testigos de dos muertes por sobredosis de fentanilo a la semana, dijo. Grandes cantidades de esa droga se trafican a Estados Unidos desde México.
«Está matando a nuestros hijos, está envenenando nuestras comunidades, está dificultando mucho el trabajo de los profesionales de la aplicación de la ley», dijo el Sr. Abbott.
También dijo que el 10% de los sospechosos recluidos en la cárcel de su condado proceden de Guatemala y México, y que muchos de ellos están acusados de «delitos sexuales violentos», cometidos tanto contra adultos como contra niños.
El sheriff pidió a la gente que imaginara cómo deben ser los totales nacionales de muertes por fentanilo y de inmigrantes detenidos si ésas son las cifras que registra solo su condado.
«La frontera sur abierta es el corazón de la anarquía y la delincuencia que estás presenciando. Necesitamos un liderazgo a nivel nacional que esté dispuesto a resolver esta crisis», dijo el Sr. Abbott. «El presidente Trump, sin duda, es el líder que necesitamos para hacer el trabajo».
El sheriff del condado de Allegan, Frank Baker, declaró: «Tenemos una crisis entre manos y necesitamos ayuda. Y parte de esa ayuda va a ser asegurar nuestras fronteras». La frontera entre Texas y México está a 1283 millas de Grand Rapids, donde hablaba el presidente Trump.
La frontera también está bastante lejos del condado de Allegan, dijo el Sr. Baker. Sin embargo, «no pasa un día sin que repercuta en lo que ocurre en nuestro condado».
Recuerdan a las víctimas de homicidio
Antes de las declaraciones del presidente Trump, su equipo de campaña distribuyó un paquete de prensa en el que se destacaban una docena de asesinatos que los inmigrantes ilegales han sido acusados de cometer durante el gobierno de Biden, en varios estados; el homicidio de la Sra. Garcia fue el último. El paquete incluía fotografías de cada víctima de homicidio y las circunstancias que rodearon cada muerte.
En otra entrevista con periodistas de la Casa Blanca, John Kirby, uno de los principales asesores de seguridad nacional de Biden, dijo que desconocía el caso concreto de la Sra. García.
Sin embargo, el Sr. Kirby dio el pésame a su familia y dijo que la administración «sin duda dejaría que las fuerzas policiales y los organismos de investigación locales hicieran el… trabajo de campo que hay que hacer para averiguar exactamente qué le ocurrió a Ruby, y para que los autores rindan cuentas por ello».
«Así pues, ¿por qué no dejamos que se desarrolle aquí el proceso judicial antes de empezar a hacer comentarios de eslogan exagerados sobre lo que esto dice de la frontera?», dijo el Sr. Kirby.
Durante su discurso, el expresidente Trump dijo que el sospechoso del asesinato de la señorita Garcia, Brandon Ortiz-Vite, había sido deportado bajo su administración, cuando las estrictas restricciones de inmigración hicieron «muy, muy difícil» el regreso de los inmigrantes ilegales deportados.
Pero el expresidente Trump afirmó que las políticas del presidente Biden facilitaron el regreso del Sr. Ortiz-Vite. «Y se le dejó suelto para que vagara por nuestras calles» y se le acusó de disparar a la Sra. Garcia «varias veces con una pistola obtenida ilegalmente», dijo el exmandatario.
El presidente Trump también habló del asesinato de Laken Riley en Georgia, declarando: «La estudiante de enfermería de 22 años de Georgia que fue bárbaramente asesinada por un animal extranjero ilegal. Los demócratas dicen: ‘Por favor, no los llamen animales. Son humanos’. Yo dije que no, que no son humanos. Son animales».
Más tarde, la campaña de Biden-Harris se aprovechó de ese comentario y difundió el comentario sobre los «animales» por sí solo, sin la referencia a la muerte de la Sra. Riley; la campaña de Trump y los comentaristas en Internet criticaron a la campaña de Biden-Harris por sacar de contexto el comentario.
También robos y atracos
La campaña del presidente Trump afirmó también que los habitantes de Michigan se ven afectados por otros delitos atribuidos a los inmigrantes ilegales.
Según el comunicado de prensa de la campaña, ha habido informes de bandas de delincuentes procedentes de América Central y del Sur que «han tomado como objetivo viviendas de lujo del condado de Oakland, Michigan, para cometer robos». Y cuatro inmigrantes ilegales fueron acusados de «múltiples robos con violencia» en un centro comercial de Troy, Michigan.
Estos casos demuestran que «los demócratas de Michigan no protegen a los estadounidenses de los inmigrantes ilegales y las drogas que cruzan nuestra frontera sur», dice el comunicado de prensa, y añade que los demócratas han «creado zonas santuario» en varias comunidades del estado. Además, el estado está ofreciendo un pago mensual de 500 dólares a las personas que acepten alojar a «recién llegados» en sus casas.
«Los inmigrantes ilegales se están aprovechando del sistema de inmigración de Biden para victimizar a los estadounidenses de todo el estado», afirmó la campaña.
En respuesta a esas afirmaciones, el Partido Demócrata de Michigan envió por correo electrónico a The Epoch Times un comunicado de prensa en el que alegaba que la visita del expresidente Trump a su estado «se esperaba que sembrara el miedo y el caos basándose en una mentira tras otra sobre los inmigrantes y la frontera».
La presidenta estatal del Partido Demócrata, Lavora Barnes, emitió la siguiente declaración:
«La verdad es que Donald Trump viene aquí a politizar una trágica pérdida y a mentir a la cara de los habitantes de Michigan sobre su historial. Cuando el presidente Biden negoció un acuerdo de seguridad fronteriza duro, justo y bipartidista, fue Trump quien presionó a sus compinches MAGA para que acabaran con el proyecto de ley, permitiendo que continuara el caos».
«Diga lo que diga hoy, Donald Trump no tiene ningún interés en formar parte de la solución porque no le importa la seguridad fronteriza. Solo se preocupa de sí mismo y de lo que cree que le hace quedar bien, pero los habitantes de Michigan saben la verdad: Donald Trump no tiene nada que ofrecer salvo una retórica peligrosa que fomenta el odio, la división y la violencia sin hacer que nadie esté más seguro».
Con información de Emel Akan.
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