La salud del presidente Donald Trump está mejorando desde que se contagió de COVID-19 y continúa trabajando en la Casa Blanca tras su alta, dijeron funcionarios el miércoles.
Trump se está “recuperando bastante rápido”, dijo Larry Kudlow, director del Consejo Económico Nacional de Estados Unidos, durante una aparición virtual en “Squawk Box” de CNBC. “Está mejorando mucho. Él está mucho más fuerte».
“El presidente sigue trabajando, está muy bien de salud. Estamos complacidos con su progreso”, agregó el jefe de Gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, a los reporteros en Washington.
Trump dio positivo por COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), el 1 de octubre. Al día siguiente, fue trasladado en helicóptero al Centro Médico Militar Nacional Walter Reed en Maryland.
Trump fue dado de alta del centro el lunes después de cumplir o exceder todos los criterios de alta, según su médico, Sean Conley.
La última actualización de Conley, una declaración escrita el martes, dijo que el presidente tuvo una «primera noche tranquila en casa» y no mostraba síntomas de la nueva enfermedad.
Meadows dijo que habló con Conley el martes por la noche y que tenía otra conversación planeada para el miércoles por la mañana.
Kudlow dijo que el presidente pasó algún tiempo en la Oficina Oval el martes, pero Meadows dijo a los periodistas que Kudlow se había equivocado.
«Él quería ir a la [oficina] Oval ayer», dijo Meadows.
«Si decide ir a la [oficina] Oval, tenemos protocolos de seguridad allí, no solo desde el punto de vista del EPP, sino desde el punto de vista de la ventilación, por lo cual también podemos trabajar desde ese lugar».
EPP significa equipo de protección personal. Se refiere a mascarillas, guantes y otros artículos relacionados.
Cualquiera que tenga una interacción directa con Trump está usando un equipo de protección personal completo, según Meadows.
La circulación en la Oficina Oval es limitado y se toman precauciones adicionales además del uso de mascarillas, dijo Kudlow.
Varios miembros del personal de la Casa Blanca están trabajando desde casa porque dieron positivo al COVID-19 o estuvieron expuestos a alguien que dio positivo, entre ellos, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, y el asesor principal, Stephen Miller.
Pero eso no significa que el gobierno esté paralizado, dijo Kudlow, quien continúa resultando negativo en la prueba.
«Todavía podemos hacer el trabajo», dijo.
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