El expresidente Donald Trump abandonó abruptamente el juzgado en medio de los alegatos finales que marcan el fin del juicio por difamación en el caso presentado en su contra por la escritora E. Jean Carroll.
El juzgado estaba lleno el viernes por la mañana para la conclusión del juicio. Minutos después de que la parte demandante comenzara su alegato final, el presidente Trump se levantó y se marchó sin previo aviso. No regresó durante el resto de la declaración.
El juez de la Corte de Distrito de Estados Unidos Lewis Kaplan interrumpió a la abogada Roberta Kaplan, sin parentesco alguno, para añadir: «El acta reflejará que el señor Trump acaba de levantarse y salió de la sala».
La declaración de la Sra. Kaplan fue precedida por un acalorado intercambio entre la abogada defensora Alina Habba y el juez Kaplan, quien amenazó con penas de cárcel cuando ella continuó hablando después de que él le dijera que se detuviera.
«Está usted a punto de pasar una temporada encerrada. Ahora siéntese», le dijo el juez Kaplan.
Los intercambios entre el juez y la defensa también fueron tensos el día anterior, cuando la Sra. Habba quiso llamar al presidente Trump como último testigo.
El juez Kaplan ha presionado a la abogada para que prometiera que el presidente Trump no diría varias cosas, entre ellas negar las acusaciones de agresión sexual. El juez se mostró firme en su postura de que el asunto ya se había resuelto mediante un juicio con jurado el año pasado y no quería escuchar al presidente Trump hablar de ello.
«Señora Habba, yo decidiré lo que él tiene derecho a hacer. Ese es mi trabajo, no el suyo», dijo el juez. Cuando el presidente Trump intentó hablar durante este intercambio, el juez lo amonestó.
Finalmente, al presidente Trump se le permitió testificar, aunque brevemente. También se pidió a la Sra. Habba que garantizara que preguntaría al presidente Trump si pretendía incitar a la gente a hacer daño a la Sra. Carroll con sus declaraciones.
El presidente Trump respondió: «No, sólo quería defenderme a mí mismo, a mi familia…» y pretendía dar más detalles sobre su respuesta, pero el juez borró del acta todo lo que había después de la palabra «no».
Al salir de la sala el jueves, se le oyó decir a sus abogados: «Esto no es América».
24 millones de dólares por daños y perjuicios
La Sra. Carroll, que ganó 5 millones de dólares el año pasado en una demanda relacionada, pide ahora 24 millones de dólares por daños y perjuicios. La Sra. Kaplan argumentó que esto era apropiado debido a la «tormenta de odio» que la Sra. Carroll enfrentó después de las declaraciones del presidente Trump sobre ella.
«Este caso se trata de castigar a Donald Trump por lo que ha hecho y lo que sigue haciendo», dijo la Sra. Kaplan. «Este juicio trata de conseguir que se detenga».
Nueve miembros del jurado deliberarán hoy sobre lo que el presidente Trump debe en concepto de daños y perjuicios.
Antecedentes del caso
El caso es uno de los dos presentados contra el presidente Trump por la Sra. Carroll, que trata sobre las acusaciones que hizo en 2019 y su respuesta.
Cuando el presidente Trump aún estaba en el cargo, la Sra. Carroll lo acusó de agredirla sexualmente en un vestidor de Bergdorf Goodman en algún momento de la década de 1990. Él negó públicamente la acusación en una declaración y respuestas a entrevistas, al mismo tiempo que afirmó que no sabía quién era ella y sugirió que ella estaba tratando de obtener publicidad para vender su libro.
La Sra. Carroll demandó al presidente Trump por difamación en 2019 basándose en esas declaraciones. El presidente Trump contrademandó, pero la demanda fue denegada.
La contrademanda se convirtió más tarde en el fundamento para que un tribunal de apelaciones denegara una desestimación del caso basada en la inmunidad presidencial, con el argumento de la demandante de que el presidente Trump había renunciado a esta inmunidad cuando litigó el caso.
En 2019, Nueva York también aprobó la Ley de Supervivientes Adultos, que permitiría que los casos de abuso sexual se presenten fuera del plazo de prescripción por un nuevo período de un año. Se convirtió en ley en 2022, y la Sra. Carroll demandó entonces al presidente Trump en un segundo caso acusándolo de violación y difamación en nuevas declaraciones que había hecho sobre ella.
En mayo de 2023, un jurado concedió a la Sra. Carroll 5 millones de dólares en este segundo caso, declarando que el Presidente Trump era responsable de difamación y agresión sexual en lugar de violación. La Sra. Carroll modificó entonces su primer caso para reclamar 10 millones de dólares por daños y perjuicios, basándose en la fórmula utilizada en el primer caso para llegar a los 5 millones de dólares.
El juez Kaplan, que presidía ambos casos, dictó una sentencia sumaria declarando al presidente Trump responsable de difamación en el primer caso, afirmando que los hechos eran los mismos en ambos casos.
El presidente Trump ha dicho que apelará las sentencias en ambos casos.
Con información de The Associated Press.
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