Los Centros de Control de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos están pidiendo a los adolescentes que cambien de estilo de vida después que un informe reveló que casi uno de cada cinco viven con prediabetes.
“Casi 1 de cada 5 adolescentes de 12 a 18 años y 1 de cada 4 adultos jóvenes de 19 a 34 años viven con prediabetes, según un estudio de CDC publicado en JAMA. La mayor incidencia en los adultos se observó en las personas de origen hispano.
La prediabetes puede causar rápidamente una diabetes y dejar a las personas dependientes de fármacos. Es una afección de salud en la que los niveles de azúcar en la sangre son más altos de lo normal, pero aún no lo suficientemente altos como para ser diagnosticados como diabetes tipo 2. En la diabetes 2, el cuerpo produce insulina necesaria para metabolizar los alimentos pero no logra usarla apropiadamente.
Además del peligro de desarrollar diabetes tipo2, la prediabetes aumenta el riesgo de desarrollar enfermedad renal crónica, enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular”, destaca el informe de CDC del 2 de diciembre de 2019, que está pidiendo a los adolescentes un urgente cambio.
Son razones suficientes para optar este cambio de estilo de vida, especialmente en las bebidas y alimentos, la cantidad de ejercicio físico y una ambiente más positivo y sano. Hay que evitar por ejemplo las bebidas azucaradas.
Si Ud. es un menor de edad puede orientarse con su médico pediatra y un nutricionista.
Para los mayores de 18 años, los CDCs ofrecen un Programa Nacional de Prevención de la Diabetes.
“Es impartido por entrenadores de estilo de vida capacitados, y alienta los cambios saludables de toda la vida para ayudar a los participantes a abordar las barreras para una mejor nutrición, una mayor actividad física y mecanismos de afrontamiento para la reducción del estrés”, destaca el equipo de salud.
En adultos se ha demostrado que este programa puede reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en un 58%, y de un 71% para personas mayores de 60 años. Básicamente consiste en el control de peso y ejercicio.
Aún así en todo momento la mejor prevención es el trabajo de los padres para ayudar desde el comienzo de la vida de sus hijos a cambiar el rumbo de la prediabetes fomentando una alimentación saludable y una mayor actividad física. Deben alejarlos de la vida sedentaria.
“¡Pueden aspirar a que sus hijos realicen 60 minutos de actividad física por día!”, recomiendan los médicos de CDC.
“La prevalencia de prediabetes en adolescentes y adultos jóvenes refuerza la necesidad crítica de estrategias efectivas de salud pública que promuevan hábitos alimenticios saludables, actividad física y manejo del estrés”, dijo a inicios de mes el director de los CDC, el Dr. Robert Redfield.
“Estos comportamientos de estilo de vida pueden comenzar en la vida de un niño en edad temprana y debe continuar hasta la adolescencia y la edad adulta para reducir la aparición de diabetes tipo 2”, cocnluyó.
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