A medida que nos sumergimos en una nueva década y reflexionamos sobre la década pasada, encontramos un cambio social marcado que todos hemos experimentado colectivamente, y es la presencia constante del teléfono inteligente.
Si bien tener comunicación, entretenimiento e información al alcance de la mano seguramente tiene sus ventajas, a estas alturas ya está muy claro que las desventajas también son bastante significativas.
Una forma de reducir los efectos negativos de poseer un teléfono inteligente es frenar su uso a la hora de acostarse. Mirar su teléfono justo antes de acostarse mantiene el cerebro estimulado, mental y emocionalmente, evitando que su mente se calme a un estado de reposo. Además, se ha demostrado que la luz azul que emite su teléfono tiene efectos negativos sobre la vista y su ciclo de sueño.
Dormir es importante. (Instagram no lo es). Es mejor enchufar su teléfono fuera de la habitación y participar en otras actividades del mundo real para su rutina de acostarse a dormir.
Aquí hay algunas ideas.
Comience durante el día
Hay algunas cosas que puede hacer durante el día para garantizar un mejor momento al acostarse. Asegúrese de mover su cuerpo durante el día. Si su estilo de vida es sedentario, no está ejerciendo suficiente energía durante el día y es posible que no se sienta con sueño a la hora de acostarse.
Asegúrese de moverse: vaya al gimnasio, salga a caminar, monte su bicicleta, cualquier actividad física que disfrute funciona.
Además, despierte aproximadamente a la misma hora cada día. Entrene a su cuerpo para saber cuándo es la hora de acostarse cada noche y despertando a la misma hora todos los días. Un sueño sólido de ocho horas o más es lo que debe de hacer. Entonces, haga los cálculos para llegar a la hora de acostarte ideal y hacer que esto suceda.
También debe tener cuidado de reducir su consumo de cafeína a las horas tempranas en el día. Si tiene ganas de café a las 4 p.m., es mejor que elija descafeinado. Tenga cuidado con la cafeína en tés, refrescos y chocolate también.
Tome un baño o ducha caliente
Cuando se acerca la hora de acostarse, disfrute de un baño caliente. Oh, el lujo de bañarse y luego ponerse directamente el pijama. El agua tibia puede relajar los músculos y la desconexión de la tecnología, que afortunadamente no se mezcla con el agua, relaja la mente. Si se siente abrumado y necesita calmarse, pruebe una ducha o baño caliente.
Lea libros
Use su biblioteca local o compre en línea para reunir libros agradables que lea para entretenerse o inspirarse. Agregue un té sin cafeína, una vela encantadora y una buena luz de lectura, y sumérjase en un libro o dos cada noche.
Atenúe las luces
A medida que se acerca la hora de acostarse, prepare su mente para la transición a dormir atenuando gradualmente las luces tan pronto como pueda desconectarse de su teléfono. Luego, apague lentamente las luces que ya no usa y aproveche los interruptores de atenuación que tiene en su hogar.
Diario
A menudo, lo que nos impide relajarnos pacíficamente son los pensamientos que se arremolinan en nuestras mentes: los elementos de la lista de tareas, las preocupaciones, los elementos del calendario, los plazos, los miedos y las ansiedades. Una forma efectiva de liberarse de este tornado de pensamiento es escribirlo todo.
Mantenga un diario y una colección de bolígrafos junto a su cama. Cada noche, tómese el tiempo para escribir lo que piensa. Capture las cosas que no quiere olvidar, ideas sobre proyectos en curso, sus sentimientos sobre las cosas que sucedieron durante el día, cualquier cosa y todo. De alguna manera, dejarlo en papel le permite a su mente liberar la necesidad de seguir dando vueltas.
Es como si las ideas se hubieran guardado de forma segura y su mente sea libre de permanecer clara, al menos por la noche.
Sigue a Barbara en Twitter: @barbaradanza
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