El 9 de abril, el gobernador de Texas, Greg Abbott, denunció públicamente las acciones que la Administración Biden planea llevar a cabo en materia de control de armas y pidió una legislación que convierta a Texas en un estado santuario de la Segunda Enmienda.
«Biden está amenazando nuestros derechos de la Segunda Enmienda», dijo Abbott en Twitter. «Acaba de anunciar una nueva toma de poder liberal para quitarnos las armas».
El gobernador republicano añadió: «NO permitiremos esto en TX. Es hora de hacer que se apruebe una ley que convierta a TX en un Estado santuario de la 2ª Enmienda y que llegue a mi escritorio para su firma».
Abbott habló sobre una reciente medida adoptada por el gobernador de Arizona, Doug Ducey, quien aprobó una legislación el 6 de abril que prohibiría a las fuerzas de seguridad del estado aplicar las leyes federales de control de armas que infringen la Segunda Enmienda.
«Esto es lo que busco para Texas: una ley que desafíe cualquier nueva ley federal de control de armas», escribió. «Hará de Texas un Estado santuario de la Segunda Enmienda. La legislación está en marcha en la Cámara y en el Senado de Texas. Estoy deseando firmarla».
Las declaraciones del gobernador tejano se producen después de que el presidente Joe Biden anunciara varias medidas de control de armas el 7 de abril. En su anuncio, Biden citó dos recientes tiroteos de gran repercusión que tuvieron lugar en Boulder, Colorado, y en Atlanta, Georgia, y calificó los sucesos como parte de una «epidemia de salud pública por la violencia de las armas».
El 6 de abril, el Comité de Asuntos Estatales de la Cámara de Representantes de Texas aprobó un proyecto de ley —el HB 2622— que convertiría a Texas en un estado santuario de la segunda enmienda. En marzo, Abbott señaló su apoyo a la legislación, diciendo que el proyecto de ley «prohibiría a las agencias estatales de Texas y a los gobiernos locales aplicar nuevas leyes o normas federales sobre armas».
El representante del estado de Texas Justin Holland, autor del proyecto de ley, dijo en una audiencia del comité la semana pasada que «no impide ni puede impedir que el gobierno federal aplique sus nuevas leyes, reglamentos y restricciones», informó The Texan News.
«Simplemente no haremos cumplir ni permitiremos sus políticas, ni dirigiremos recursos estatales a los planes federales en Texas», añadió Holland.
Un proyecto de ley similar —el SB 541 de Texas— está siendo considerado en el Senado estatal.
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