La diseñadora estadounidense Rebecca Minkoff causó una pequeña revolución en el tercer día de la Semana de la Moda en Nueva York, al presentar su colección de primavera verano 2016 y ofrecer inmediatamente sus creaciones a la venta, algo que también hicieron otros diseñadores.
Tradicionalmente, los desfiles se adelantan a la temporada con un período de seis meses – esta semana se presentan las colecciones de otoño-invierno 2016– y las prendas recién se empiezan a vender varios meses más tarde. Pero este modelo está cada vez más cuestionado.
«La Semana de la Moda se ha roto», señalaban los apuntes de la colección de Rebecca Minkoff. Lacoste inauguró el día con una colección retro-futurista, cómoda y adaptable con amplio uso del vinilo.
Después de Hevé Léger, Tibi, Son Jung Wan y Christian Siriano, le toca desfilar al siempre muy cotizado Alexander Wang iba y luego por la tarde a Altuzarra.
La marca francesa de abrigos de pluma Moncler hará su presentación al aire libre, también por la tarde.
El viernes de tarde, la cantante Rihanna había cerrado el segundo día de la «Fashion Week», con la presentación de una primera colección muy esperada en asociación con la marca Puma.
Esta línea, toda en blanco y negro, buscaba reinterpretar la indumentaria deportiva con una serie de «sweat shirts» exageradamente grandes y sueltos, grandes escotes y tops cortos; una colección a la vez cómoda y llamativa.
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