Respecto a las sanciones informadas el miércoles por EE.UU. a Corea del Norte, a su líder Kim Jong-un y a otros altos funcionarios por violaciones de los derechos humanos, un comunicado oficial del régimen asiático contestó que es equivalente a declarar la guerra.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Corea del Norte emitió un comunicado el jueves manifestando que los fundamentos de EE.UU. para tal represalia están «salpicados de mentiras e inventos”.
Corea del Norte ya ha sido sancionada anteriormente debido a su programa de armas nucleares. Sin embargo, las medidas del miércoles marcan un precedente ya que son las primeras en las que Kim ha sido blanco personalmente y que Corea del Norte ha sido bloqueada por el Tesoro de Estados Unidos, en relación con los informes de violaciones de los derechos humanos.
El Departamento de Estado dijo que los campos de prisioneros políticos de Corea del Norte tienen entre 80.000 y 120.000 prisioneros, incluidos los niños y otros miembros de la familia.
Lo cierto es que esta medida puede elevar la tensión entre ambos gobiernos y según indicó a EFE un experto en la materia, puede generar conflictos militares.
Entretanto EE.UU. espera que estas sanciones dificulten aún más operaciones de Corea del Norte en bancos y entidades financieras internacionales y acaben con el «anonimato» bajo el que operan muchos de los funcionarios identificados como violadores de derechos humanos, según indicó el Departamento del Tesoro.
La organización internacional Human Rights Watch, por su parte, calificó la medida del Tesoro como «un importante paso adelante a la hora de conseguir justicia para las innumerables víctimas de las violaciones de los derechos humanos en Corea del Norte».
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