La desaparición de las primeras cinco islas del archipiélago Salomón, que tiene medio millón de habitantes, y que quedaron bajo las aguas del Pacífico inexorablemente, pauta una emergencia migracional, además de ambiental, en lo que se entiende es consecuencia del acelerado calentamiento global.
La población de dos de las tres principales Islas de Salomón, ubicadas al norte del archipiélago, ya ha comenzado a ser realojada, debido a que el ascenso anual del nivel del mar se situó en más de 7 milímetros, el doble de la media anual, según un informe publicado por Environmental Research Letters.
En tanto las islas conocidas como Kale, Rapita, Rehana, Kakatina y Zollies, que tenían superficies oscilantes entre 1 y 5 hectáreas, han quedado definitivamente bajo las aguas, la primera de ella la más reciente.
La crítica situación de los pobladores
Hasta el año pasado seis de otras pequeñas islas cercanas a las desaparecidas, han perdido ya la cuarta parte de su superficie bajo las olas: dos de ellas estaban habitadas y la población fue trasladada sin más alternativa.
Otras tres islas -Hetaheta, Sogomou y Nuatambu- están desapareciendo a ritmo vertiginoso y ya perdieron más del 50% de la superficie.
La erosión de las costas, es atribuida no solamente a la suba del nivel del mar, sino al empoderamiento de las olas, que han ganado en potencia en los últimos años según revelan los informes satelitales y las propias declaraciones de los isleños.
El archipiélago de las Salomon, integrado por cientos de islas que alcanzan al millar, tienen unos 640.000 habitantes y se extienden a unos 1.600 kilómetros al noreste de Australia, habiéndose constituido en “la primera prueba científica que confirma las numerosas explicaciones anecdóticas a los largo del Pacífico respecto a los dramáticos impactos del cambio climático en la costa y la población”, señala el informe.
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