Un arzobispo conocido por su fuerte oposición al régimen comunista de China fue retirado de un puesto clave en el Vaticano por el Papa Francisco. La jugada es la última de una serie de intentos de acercamiento que hizo el Papa Francisco en años recientes para buscar retomar las relaciones diplomáticas entre el Vaticano y el régimen chino, el cual siempre rechazó la autoridad del Papa para designar obispos católicos en China Continental.
El 28 de septiembre, el Papa Francisco hizo el anuncio sorpresa de que el Arzobispo Savio Hon Tai-Fai, Secretario de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos (Propagación de la Fe) del Vaticano, será reasignado a Atenas, Grecia, para servir como nuncio papal del Vaticano (puesto diplomático). El Arzobispo de 67 años oriundo de Hong Kong –el funcionario de más alto rango de origen chino en el Vaticano– no tiene experiencia diplomática anterior.
Como señaló el periódico francés La Croix, el Arzobispo Hon ha sido uno de los obispos más prominentes que se opusieron a la política del Papa Francisco de reconciliación con el régimen chino. Su puesto en Propagación de la Fe en el Vaticano –donde sirvió durante siete años desde que fue designado por el Papa Benedicto XVI en 2010– era un puesto poderoso, dado que lo dejaba como segundo al mando en el cuerpo del Vaticano que gobierna directamente su labor misionera.
El Vaticano y la República Popular de China no tienen relaciones diplomáticas desde 1951, dado que el Partido Comunista Chino insistió desde el comienzo en su regla de que todos los obispos de la Iglesia Católica Romana en China continental fueran designados por el Partido Comunista, y así mantener el control. También se creó una Asociación Católica Patriótica China (ACPC) supuestamente para representar a los católicos en China, no obstante, la ACPC nunca fue reconocida por el Vaticano.
Sin embargo, desde que fue elegido en 2013, el Papa Francisco hizo numerosos intentos de acercamiento para abrir las relaciones diplomáticas, tales como el vuelo papal sobre China en 2014 y un anuncio –en febrero de este año– respecto a un acuerdo de poder nombrar obispos con Beijing, entre otros eventos.
Al Arzobispo Hon se lo conoce por ser un cercano aliado del Cardenal Joseph Zen, el respetado ex Obispo de Hong Kong que se retiró en 2009. Al igual que Hon, Zen ha sido un acérrimo opositor del régimen chino y sus muchas violaciones a los derechos humanos y a la libertad de creencia. En años recientes, Zen emergió como el crítico más prominente del acercamiento del Papa Francisco a Beijing.
“¡Finalmente se deshizo de él! ¡¿Pero Grecia no está más lejos de Roma que Hong Kong?!” escribió Joseph Zen en su blog en respuesta a la decisión del Papa Francisco de sacar a Hon.
Zen, quien ahora tiene 85 años, se comprometió a realizar una visita de alto perfil a Estados Unidos y Canadá esta semana y criticó repetidamente lo que afirma es un ‘erróneo optimismo’ del Papa Francisco y del Vaticano cuando se trata de un acuerdo con el régimen chino.
“El gobierno chino no hizo ninguna concesión en las negociaciones”, dijo este domingo al periódico en idioma chino World Journal, en Nueva York. “[El Papa Francisco] no entiende al Partido Comunista Chino en absoluto”.
Según Zen, la remoción del Arzobispo Hon muestra que el Papa Francisco decidió abrir las relaciones con el régimen chino y que no está escuchando ninguna opinión contraria.
El Vaticano aún tiene que responder a las últimas observaciones realizadas por el Cardenal Zen, y La Gran Época realizó varias llamadas telefónicas a la Oficina de Prensa del Vaticano para solicitar comentarios, sin obtener respuesta hasta la fecha.
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