La granjera de cabras de Oregón, Carine Goldin, hizo todo lo posible por mantener su rebaño a salvo cuando el incendio de Riverside amenazó con quemar completamente su hacienda lechera.
Con pocas opciones y poco tiempo disponible, Goldin realizó una evacuación masiva de todo su rebaño de 85 cabras en su Subaru.
Goldin, que posee y dirige la granja de queso de cabra artesanal Goldin en Molalla, Oregon, inicialmente dejó su casa el 8 de septiembre durante una orden de evacuación de nivel 3, dejando atrás sus 85 cabras. Sin embargo, obligada a salvar a su rebaño de un destino aterrador, Goldin ideó un plan de evacuación usando su SUV y un remolque.
«Pusimos a todos los pequeños, y habían siete, en el Subaru», explicó a la KPTV. «En realidad se alinearon muy bien en un extremo».
En 12 años de dirigir la granja, Goldin admitió que nunca antes había visto incendios como estos. Manteniendo el sentido del humor sobre la evacuación masiva, Goldin publicó en Facebook el 11 de septiembre una foto de su Subaru, cargado de cabras bebés.
«¡Evacuación con estilo! No se puede vencer al Suburú multipropósito», describió.
Después de conducir la primera carga a la cercana localidad de Canby, Goldin regresó con su remolque varias veces para transportar las cabras adultas. Sin embargo, después de un breve respiro, Canby también recibió órdenes de evacuación.
El esfuerzo de evacuación de Goldin contó con el apoyo de la población local, y los voluntarios del condado de Clackamas ofrecieron remolques adicionales para ayudar a trasladar a todo el rebaño un nuevo lugar. Goldin y el rebaño recibieron refugio Fraga Farmstead Creamery en Forest Grove.
El 13 de septiembre, la granjera de cabras hizo un posteo informando la situación del rebaño en Facebook. «Nuestras maravillosas cabras lecheras están desorientadas y estresadas», escribió, «pero tengo la esperanza que saldrán adelante con mucho cariño. Los quesos están en la sala de maduración seguros y sellados (sin cortes de energía)».
Goldin añadió que se sentía «optimista» con que la granja lechera y la fábrica de cremas sobrevivirían a la interrupción. «La limpieza será una gran tarea, pero factible», admitió.
Las 85 cabras de Goldin permanecieron a salvo en sus alojamientos de Forest Grove a mediados de septiembre, donde siguieron recibiendo los cuidados necesarios después de la terrible experiencia.
La granjero y quesera se comprometió a regresar a su casa cuando pueda estar segura que sus cabras estarán a salvo.
«Todo es muy aterrador y las cabras están bajo un tremendo estrés en este momento», dijo Goldin a KPTV. «Queremos darles un descanso antes de llevarlas de regreso».
En una actualización, el 23 de septiembre, Goldin hizo un nuevo posteo en Facebook para compartir: «Los quesos están seguros en una sala de maduración sellada. ¡Vamos a estar en el mercado el SÁBADO!».
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