La fiscal general de Nueva York, Letitia James, reprendió este martes a dos comercios de la ciudad por sus precios excesivos de desinfectantes de manos y desinfectantes en espray, y aseguró que «no se va a tolerar» la explotación del nerviosismo de los ciudadanos ante el coronavirus.
«Aunque siguen sin existir causas para el pánico generalizado, algunas personas están queriendo abusar de la ansiedad de los demás y llenar sus bolsillos», dijo en un comunicado de prensa James, que pidió la colaboración de los ciudadanos en la denuncia de nuevos casos de manipulación de precios.
En concreto, la Fiscalía de Nueva York apuntó a una tienda en el centro de Manhattan, Scheman & Grant Hardware, que estaba vendiendo un recipiente de 1,2 litros de desinfectante de manos por casi 80 dólares, mientras que un Fresh Market en el barrio de Astoria, en Queens, vendía una botella de medio litro del mismo producto por cerca de 15 dólares.
El comunicado agradeció además la colaboración de la Alcaldía de Nueva York en este tipo de casos, y afirmó que en una situación así es «imperativo» que todos los niveles del Gobierno trabajen de manera coordinada.
«Estamos en medio de una crisis, y necesitamos ayudar a nuestros conciudadanos. Ahora no es el momento de intentar sacar provecho», dijo en el texto el alcalde de la ciudad, Bill de Blasio.
Según los gubernamentales Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU., los casos de coronavirus ya suman 647, con al menos 25 muertes.
A nivel global, al menos 109.578 se han contagiado con el COVID-19 y 3.809 han muerto, la gran mayoría en los dos casos en China, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
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