El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, dijo este jueves durante la cumbre europea que sus homólogos le habían dado «ánimo» tras el puñetazo que recibió en un acto de campaña para las elecciones generales del domingo.
«Me han dado muchos ánimos y que sentían mucho lo que había pasado, lo normal en una situación como esta», dijo Rajoy a la prensa.
El presidente del Gobierno español, que busca la reelección en las elecciones legislativas del domingo al frente del Partido Popular, fue agredido el miércoles en un acto electoral en su localidad natal, Pontevedra, en el norte de España.
Rajoy, de 60 años, ha multiplicado durante los días de campaña los encuentros con los ciudadanos en las calles, algo que hasta ahora hacía poco.
El agresor, un joven de 17 años que después fue internado en un centro de menores, se acercó a Rajoy y le dio un puñetazo en la cara que le rompió los lentes, antes de ser inmovilizado por los guardaespaldas.
«Me han deseado suerte, unos y otros, pero bueno eso es una cortesía lógica», expresó Rajoy, que ahora gobierna con mayoría absoluta y cuyo partido volvería a ganar, pero con mayoría simple, según las últimas encuestas.
El partido en el poder vendría seguido por los socialistas, el partido de centro-derecha Ciudadanos y la formación de izquierda Podemos.
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