Es el último revés para la ingeniería espacial rusa. El cohete Proton-M, que despegó hoy sábado del cosmódromo de Baikonur en Kazajistán, se ha estrellado apenas 8 minutos después de su lanzamiento. Llevaba a bordo el satélite de comunicaciones mexicano MexSat-1. De momento se desconoce qué ha causado el fallo.
El Proton-M se ha estrellado en una región remota de Siberia sin causar peligro. Según la agencia de noticias rusa Ria Novosti, el cohete experimentó un problema a los 8 minutos del despegue, concretamente en su etapa tres. El satélite mexicano de comunicaciones MexSat-1 que llevaba a bordo no se separó de la fase tres del cochete por un problema aún sin identificar. Esto hizo que tanto el cohete como el satélite se estrellaran finalmente en mitad de la nada en Siberia.
El satélite MexSat-1, un proyecto del gobierno mexicano, iba a servir para ofrecer servicios de comunicaciones, datos y móvil a México y otras partes de Latinoamérica. Ya no será posible. El Proton-M es una versión avanzada del mítico cohete soviético Proton lanzado por primera vez en 1965. Se trata de un cohete de 58 metros de altura que desde su primer lanzamiento en el 2001 ha tenido 116 lanzamientos. De ellos 11 fueron fallidos. Tras el nuevo accidente, oficiales rusos han asegurado a la agencia Ria Novosti que de momento todos los nuevos lanzamientos del Proton-M serán suspendidos.
Malos tiempos para la ingeniería espacial rusa después de que hace solo unos días la nave espacial Progress M-27M se estrellara en el Pacífico tras un fallo técnico sin poder llegar con éxito a la Estación Espacial Internacional.
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