Agrega Papá Noel a la lista de cosas que no le gustan al Partido Comunista Chino (PCCh).
Con Navidad cerca, el Partido está en guardia por la influencia occidental que cree que podría corromper las mentes de los jóvenes chinos.
En la Universidad Farmacéutica Shenyang de la provincia de Laioning, al noreste de China, la Liga Juvenil Comunista, una organización del Partido creada para que gente joven entre 14 y 28 años aprenda sobre su ideología, publicó una declaración online, prohibiendo que las uniones y clubes estudiantiles y las ramas de la liga juvenil organicen actividades basadas en festividades religiosas occidentales, tales como la Navidad, así lo informó el periódico estatal nacionalista de China, el Global Times, el pasado 14 de diciembre.
Según el anuncio, la prohibición ayudaría a la generación más joven a «construir seguridad cultural», dado que recientemente algunos han estado «ciegamente entusiasmados por las vacaciones occidentales». Esta jugada de la Liga Juvenil ayudaría a la gente joven a «resistir la corrosión de la cultura religiosa de Occidente».
Algunos internautas en Weibo, el sitio web de microblogging popular de China, similar a Twitter, han expresado su disgusto con la prohibición.
Otro ciudadano de la provincia costera china de Jiangsu señaló sarcásticamente: «Tanto el marxismo como el Partido Comunista fueron traídos de Occidente».
La prohibición de la Universidad Farmacéutica Shenyang no es un incidente aislado. En diciembre de 2014, la Facultad Moderna de la Universidad del Noroeste en la ciudad central china Xi’an dijo que la Navidad es «cursi», y prohibió que los estudiantes celebren la festividad. En vez de ello, los estudiantes fueron obligados a ver una proyección de tres horas de películas de propaganda, según reportó MailOnline.
También en 2014, la oficina de educación de la ciudad de Wenzhou en la provincia oriental china de Zhejiang, lanzó una orden directiva a todas las escuelas y jardines de niños en la región de no celebrar eventos de Navidad, así lo indicó Radio Free Asia (RFA).
El régimen chino hace más que prohibir la Navidad para prevenir que sus estudiantes sean influenciados por la cultura occidental. En julio de 2016, millones de libros de Wen Lisan, exeditor de una prominente casa editorial, fueron retirados del mercado y su nombre fue eliminado. Estas medidas fueron el resultado de sus comentarios de crítica hacia el Partido Comunista Chino, y desde entonces ha sido catalogado como un «radical elemento occidentalizado».
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