El líder chino Xi Jinping se prepara para retirar a funcionarios de seguridad que se resisten a sus políticas, entre una serie de otros cambios en el aparato político y jurídico, según una fuente de alto nivel del Ministerio de Seguridad Pública del régimen chino.
La fuente, que está familiarizada con los debates sobre el tema, dice que Xi pronto pondrá en marcha una oficina contra la corrupción dentro del ministerio con el propósito expreso de tratar con funcionarios desleales.
Además, según la fuente, recientemente se abrieron investigaciones contra un alto funcionario de seguridad.
La fuente agregó que Xi responderá a lo que considera los esfuerzos del aparato de seguridad para socavarlo a él con un gesto de «buena voluntad» después de este año nuevo chino.
No está precisamente claro qué cambios operacionales traería el realzar un mejor control y supervisión de Xi en el aparato de seguridad.
El aparato político y jurídico del régimen ha sido utilizado desde hace tiempo por el régimen como un instrumento de represión. Sin embargo bajo la dirección de Xi, el estado de represión ha vacilado entre los extremos. Por un lado, se cerró formalmente el sistema de los campos de trabajo, mientras que por el otro se ha producido una severa represión contra los abogados chinos de derechos humanos contra quienes usan a menudo medidas brutales y extralegales.
Si aumentar el control político central sobre las fuerzas de seguridad, tal como lo indican las medidas descritas por la fuente, busca asegurar que los chinos comunes sin inclinaciones políticas no sean víctimas o lo que se busca es extender un trato más justo a quienes desean trabajar dentro de la ley, es algo que no está claro.
«Oficina de lucha contra la corrupción»
Xi Jinping está actualmente creando una oficina contra la corrupción dentro del Ministerio de Seguridad Pública, la agencia estatal que supervisa a la policía y a las fuerzas de seguridad en el régimen chino, según la fuente. Se espera que esta oficina esté en funcionamiento lo antes posible para las reuniones parlamentarias anuales del régimen, o para las «Dos sesiones», en marzo. Se espera que una persona muy cercana a Xi quede en la oficina.
La oficina anticorrupción no es el actual grupo anticorrupción dentro del Ministerio, subraya la fuente. El grupo anticorrupción, que se estableció en enero de 2016, se reporta a la máxima agencia anticorrupción del Partido Comunista Chino, y está encabezado por Deng Weiping, una persona que es leal a Xi.
La oficina, que tendrá la tarea de purgar al Ministerio de elementos que se oponen a las políticas jurídicas y de seguridad de Xi, ya ha enfrentado una fuerte resistencia, dijo la fuente. Un puñado de jefes de oficina adjuntos ya han sido transferidos fuera del Ministerio por ser obstinados.
Li Tianxiao, experimentado comentarista político de New Tang Dynasty Television (NTD), cree que Xi Jinping tiene razón y necesidad de establecer una nueva oficina anticorrupción en el Ministerio si quiere abordar al aparato jurídico y de seguridad que se niega a prestar atención al restringir la aplicación de la ley o emitir juicios. NTD es un medio de la misma filial de este periódico.
Li dijo que el aparato de seguridad ha estado presionando contra Xi desde la muerte del alto funcionario Lei Yang en 2016.
Lei, un ecologista chino, de repente fue detenido por la policía cuando se dirigía al aeropuerto. Murió misteriosamente mientras estaba bajo custodia policial. La policía afirmó que Lei fue arrestado como parte de una redada contra la prostitución, una ligera excusa que no logró convencer a la familia de Lei, ni a un amplio círculo de amigos, compañeros de estudios u observadores.
Después de un gran clamor público por la muerte de Lei Yang, Xi intervino públicamente para apoyar a Lei, según el análisis de Wu Qiang, un investigador de los movimientos sociales en China. Aunque dos de los cinco policías de Beijing implicados en el incidente fueron detenidos después, ninguno fue juzgado. La muerte de Lei Yang y la decisión de la corte enfurecieron particularmente a los chinos de clase media, muchos de los cuales se identificaron con Lei, el graduado de una universidad de renombre con un trabajo en un grupo ambiental vinculado al gobierno; casos típicos de injusticia judicial involucran a trabajadores o a disidentes.
Li Tianxiao dijo que si Xi no lleva a cabo «operaciones quirúrgicas» al Ministerio de Seguridad Pública, se arriesga a perder el apoyo del pueblo chino.
La popularidad de Xi dentro de China se debe a su campaña anticorrupción, que hasta ahora ha parecido ser un esfuerzo genuino por detener la corrupción endémica en el régimen, así como ha servido para purgar a rivales políticos y vigilar la fidelidad de los cuadros del Partido.
‘Alto oficial de seguridad investigado’
La fuente dijo que a principios de enero un alto funcionario del Ministerio de Seguridad Pública fue investigado en torno a un cónclave anual clave de la agencia anticorrupción, aunque se negó a proporcionar detalles.
Sin embargo, un examen de los informes oficiales chinos, parece indicar que Fu Zhenghua, el viceministro ejecutivo de seguridad pública, es el hombre en problemas.
En el mundo codificado del régimen chino, la frecuencia de las apariciones públicas es una forma de medir la posición política de un funcionario chino. Fu y Li Wei, un viceministro de menor rango de seguridad pública, estuvieron ausentes de una importante reunión del Ministerio el 9 de enero, donde se sacaron importantes conclusiones del cónclave anual de la agencia anticorrupción.
Además, Fu sólo ha participado en dos eventos oficiales desde que se unió al Ministerio como su funcionario número dos en mayo de 2016, según informes de actividades del Ministerio. Por el contrario, otros funcionarios que se trasladaron al Ministerio en el mismo mes que Fu fueron mucho más activos: Huang Ming, el número tres del Ministerio, hizo 28 apariciones, mientras que Wang Xiaohong, el noveno funcionario, hizo 15 apariciones.
Fu Zhenghua y Li Wei, sin embargo, asistieron a otra reunión del Ministerio el 14 de enero, y Fu dio las acostumbradas observaciones finales, según el informe oficial de la reunión dada por el Ministerio. Pero se han conocido funcionarios que están siendo investigados por corrupción que van a excursiones públicas antes de que se emita una denuncia oficial, como en el caso del purgado zar de seguridad, Zhou Yongkang.
Fu era un conocido amigo de Zhou, pero según los informes cambió de lado después de que Xi Jinping fuera tras Zhou, uno de los principales aliados de Jiang Zemin. Jiang lidera una poderosa facción política que se opone al liderazgo de Xi. No está claro si Xi reconoce la nueva lealtad de Fu.
Xi ha estado reduciendo gradualmente la importancia del aparato político y de seguridad del régimen desde que asumió el cargo en 2012, muy probablemente para eliminar la influencia restante de Zhou Yongkang.
El jefe de la Comisión de Asuntos Políticos y Jurídicos, la antigua oficina de Zhou, ya no tiene un escaño en el Comité Permanente del Politburó, el máximo órgano decisorio del régimen. Hasta la fecha, al menos 19 que están en servicio y ex jefes del aparato legal y de seguridad se han investigado por corrupción.
Pero Xi todavía tiene que consolidar el control sobre el aparato de seguridad. Luo Yu, un desertor chino e hijo del jefe fundador de la seguridad pública Luo Ruiqing, le dijo a La Gran Época en una entrevista anterior que las injusticias continúan en China porque el régimen tiene en su lugar «el sistema de seguridad de Zhou Yongkang sin Zhou Yongkang».
Xi Jinping planea responder al rechazo del aparato judicial y de seguridad del régimen y mostrar que es sincero acerca de sus políticas liberando a algunas «personas de fe» después de este Año Nuevo Chino el 29 de enero, según la fuente. No se aclaró la identidad de los que se propone liberar.
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