Un residente local resultó herido cuando acudió en ayuda de un miembro del personal de The Epoch Times que fue atacado con un cuchillo el 12 de junio por la noche mientras cubría eventos relacionados con un aniversario clave del movimiento de protesta en Hong Kong .
Jerry, un camarógrafo a tiempo parcial de la edición de Hong Kong, estaba transmitiendo en vivo en la zona de Kwun Tong alrededor de las 21:00 horas, hora local, donde se instaló un puesto en la calle con imágenes y letreros relacionados con el movimiento prodemocrático de Hong Kong. La policía estaba cerca patrullando la zona.
Jerry contó que un grupo de aproximadamente una docena de ciudadanos estaba discutiendo acaloradamente y hubo empujones, relató Jerry, que decidió no decir su apellido por razones de seguridad.
Un hombre, vestido con una camisa blanca de botones, cayó al suelo durante el enfrentamiento. Cuando se levantó, de repente mostró un cuchillo verde y empezó a apuntar a la cara de la gente.
Jerry comenzó a fotografiar la escena. Cuando el hombre vio a Jerry, levantó el cuchillo hacia él. Jerry recordó que el hombre también trató de agarrar el soporte de su cámara y otros equipos.
Mientras forcejeaban, un transeúnte agarró el cuchillo con sus propias manos para intentar detener el ataque, hiriéndole la mano en el proceso. Las imágenes de la escena tomadas por los medios de comunicación muestran la ropa salpicada de sangre y las manchas rojas esparcidas por el suelo.
La policía identificó más tarde al agresor como un hombre de 27 años, y también al buen hombre de 22 años.
La policía que estaba en la zona redujo rápidamente al agresor en el suelo y lo arrestó bajo el cargo de «lesiones», según un comunicado de la policía. El hombre herido fue atendido enseguida por el servicio de emergencias antes de ser trasladado al hospital.
El 12 de junio se cumple un año del intenso enfrentamiento entre la policía y los manifestantes frente a la sede del gobierno en el Almirantazgo, cuando la legislatura de la ciudad se disponía a debatir un polémico proyecto de ley de extradición que habría permitido el traslado de personas a China continental para su enjuiciamiento. Desde entonces, el proyecto de ley ha sido rechazado.
Ese día, la policía disparó gases lacrimógenos y balas de goma para dispersar a los manifestantes, provocando la indignación del público y avivando un movimiento de protesta contra Beijing. Desde entonces, la población local ha organizado manifestaciones masivas pidiendo mayores libertades democráticas en el territorio.
Jerry, que salió ileso, salvo por unos pocos rasguños en su mano derecha mientras protegía su cámara, estaba agradecido y ansioso por el transeúnte que recibió el ataque por él.
【突發】 觀塘 裕民 坊 小巴 站 有 刀手 斬 人 黑衫男人被斬傷,白衫刀手被便衣車走</ p> Publicado por 飛影 es & nbsp; Viernes, 12 de junio de 2020 </ blockquote> </ div>
«Usó su mano para detener el cuchillo», dijo en una entrevista telefónica. «Estaba bastante nervioso. No sabía lo mal herido que estaba. Le pregunté: ¿por qué hiciste una cosa tan tonta, usar tu mano para bloquearlo?».
El transeúnte, al enterarse de que Jerry trabajaba para The Epoch Times, dijo: «No me arrepiento de haberte ayudado», recordó Jerry. «Después que me dijo eso, me sentí apenado en mi corazón», dijo Jerry. Había dejado caer su teléfono durante el combate cuerpo a cuerpo, cuando su pase de fotógrafo fue arrancado y la bolsa de su cámara dañada, dijo.
El asaltante fue detenido por la policía, y Jerry tuvo que ir a la comisaría para hacer una declaración.
La edición de Hong Kong de The Epoch Times condenó la violencia en un comunicado, y pidió a las autoridades locales que investiguen el incidente y los antecedentes del agresor.
La oficina ha experimentado múltiples ataques en los últimos años. El pasado noviembre, cuatro intrusos enmascarados prendieron fuego la imprenta de la oficina, dañando las máquinas y el papel de impresión de la fábrica.
Recientemente, la fábrica también notó a una persona sospechosa merodeando y filmando alrededor de las instalaciones, dijo la oficina en el comunicado. Los miembros del personal y los guardias de seguridad anotaron el número de matrícula de la persona.
La oficina expresó su respeto por los ciudadanos de Hong Kong que ayudaron a Jerry en la escena y se comprometió a seguir informando a tiempo y en profundidad al público de Hong Kong.
«Al defender la verdad, nunca nos rendiremos», decía el comunicado.
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