Un juez federal de Texas bloqueó una ley estatal que buscaba imponer requisitos de edad en sitios web para adultos, alegando que el proyecto de ley viola la Primera Enmienda y es una amenaza a la privacidad.
La ley HB 1181 de Texas (pdf) exige que los sitios para adultos verifiquen la edad de los visitantes para garantizar que tengan 18 años o más. Fue promulgada por el gobernador republicano Greg Abbott el 12 de junio y habría entrado en vigor el 1 de septiembre.
El 4 de agosto, se presentó una demanda (pdf) contra la legislación, argumentando que violaba la Primera Enmienda. Los demandantes están encabezados por la Free Speech Coalition (FSC), un grupo de defensa de los trabajadores y empresas de la industria para adultos. Otros demandantes incluyeron a la empresa matriz de PornHub, Aylo (anteriormente MindGeek), junto con una actriz porno anónima y operadores de sitios de contenido para adultos con sede desde Florida hasta la República Checa.
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En un fallo del 31 de agosto (pdf) sobre el caso, la corte se puso del lado de la FSC y concluyó que la HB 1181 viola la Primera Enmienda. A continuación, prohibió a la fiscal general interina de Texas, Ángela Colmenero, “hacer cumplir cualquier disposición” del proyecto de ley.
“La corte considera que la H.B. 1181 es inconstitucional a primera vista”, escribió en el fallo el juez federal de distrito David A. Ezra de la corte de Distrito de Estados Unidos para el Distrito Oeste de Texas.
“El estatuto no está perfectamente hecho y enfría el discurso de los demandantes y de los adultos que desean acceder a los materiales sexuales (…) La ley no está perfectamente hecha porque regula sustancialmente el discurso protegido, es muy poco inclusiva y utiliza métodos de aplicación excesivamente restrictivos”.
La corte estuvo de acuerdo en que el estado de Texas tiene un objetivo “legítimo” al proteger a los niños del material sexual explícito en línea. Sin embargo, tales objetivos no niegan la carga de la corte de garantizar que las leyes aprobadas por el estado cumplan con la Primera Enmienda, escribió el juez.
«Existen medios viables y constitucionales para lograr el objetivo de Texas, y nada en esta orden impide que el estado busque esos medios».
El juez Ezra también señaló preocupaciones de privacidad con respecto a los requisitos de verificación de edad. Uno de los dos mecanismos permitidos para la verificación de la edad según la HB 1181 es a través de una identificación gubernamental.
«La privacidad es una preocupación especialmente importante, según la HB 1181, porque el gobierno no está obligado a eliminar datos relacionados con el acceso», afirmó la corte. «La gente estará particularmente preocupada por el acceso a discursos controvertidos, siendo que el gobierno estatal puede registrar y rastrear ese acceso».
El juez Ezra afirmó que al verificar la edad mediante una identificación gubernamental, la HB 1181 esencialmente permitiría que el gobierno obtenga acceso a “los aspectos más íntimos y personales” de la vida de las personas.
El proyecto de ley presenta el riesgo de que el Estado pueda controlar cuándo los adultos ven materiales sexualmente explícitos y el tipo de sitios web que visitan, señaló a continuación.
“En efecto, la ley corre el riesgo de obligar a las personas a divulgar detalles específicos de su sexualidad al gobierno estatal para obtener acceso a determinadas expresiones. Estas restricciones tienen un efecto sustancialmente paralizador».
Etiquetas de advertencia, multas
Además de la verificación de la edad, la HB 1181 también exige que los sitios web pornográficos muestren advertencias de salud en sus páginas de destino.
El mensaje, que se atribuye a los Servicios Humanos y de Salud de Texas, debe decir que está «probado que la pornografía daña el desarrollo del cerebro humano», «está asociada con baja autoestima e imagen corporal, trastornos alimentarios, deterioro del desarrollo cerebral y otras enfermedades emocionales y mentales”, y puede aumentar la “demanda de prostitución, explotación infantil y pornografía infantil”.
El juez Ezra afirmó en su fallo que aunque estas advertencias llevan la etiqueta de Servicios Humanos y de Salud de Texas, la agencia parece «no haber hecho estos hallazgos o anuncios».
La HB 1181 impone una multa civil por violaciones por una suma de USD 10,000 por día a cualquier entidad que opere un sitio web sin verificación de edad, como se describe en las disposiciones del proyecto de ley.
La ley también impone una multa de USD 10,000 por caso «cuando la entidad retenga información de identificación».
Además, si la falta de implementación de la verificación de edad por parte de la entidad da como resultado que uno o más menores accedan a material sexual dañino, se podría imponer una cantidad adicional de hasta USD 250,000.
El monto de la sanción civil impuesta dependerá de factores como la gravedad de la infracción, si la entidad cometió la infracción con conocimiento y del historial de infracciones anteriores.
“Aprobé la #HB1181 para proteger a los niños de la sexualización. Los extremistas depredadores quieren robar la inocencia de nuestros hijos y no lo toleraremos. Lucharé contra estos groomers que quieren dañar a nuestros niños”, dijo el representante Matt Shaheen (R-Plano), uno de los autores del proyecto de ley, en un posteo del 22 de agosto en X.
Texas no es el único estado que ha aprobado una ley de verificación de edad para sitios web para adultos. Al menos otros cinco estados han aprobado leyes similares: Arkansas, Mississippi, Virginia, Luisiana y Utah.
Respuesta a la decisión judicial y la Agenda Sexual
El FSC celebró la orden judicial del juez Ezra contra la HB 1181, y la directora ejecutiva Alison Boden la calificó como una «enorme e importante victoria contra la creciente ola de censura en línea».
“Nos complace que la corte estuvo de acuerdo con nuestra opinión de que el verdadero propósito de la HB1181 no es proteger a los jóvenes, sino evitar que los tejanos disfruten de una expresión protegida por la Primera Enmienda. La defensa de la ley por parte del Estado no se basó en la ciencia o la tecnología, sino en la ideología y la política”, dijo la directora a través de un comunicado en el sitio web de la organización.
La oficina del fiscal general del estado presentó inmediatamente un aviso de apelación ante la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos en Nueva Orleans.
El fallo judicial se produjo cuando un trío de poderosas organizaciones globales está ejecutando rigurosamente un plan para enseñar sexualidad a los niños desde el jardín infantil, incluso alentándolos a decir sí a los encuentros sexuales, según documentos de una agencia revisados por The Epoch Times.
Los grupos de vigilancia advierten que es parte de un esfuerzo por reducir la edad de consentimiento aceptada para que los niños tengan relaciones sexuales.
Las organizaciones que impulsan la agenda –la Federación Internacional de Planificación de la Familia (IPPF), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas (ONU)– están impulsando la agenda sexual en dos frentes.
Por un lado, estos grupos promueven la educación sexual de los niños, incluida la enseñanza sobre el consentimiento para tener relaciones sexuales. Por otro lado, intentan retratar a los niños como “seres sexuales” con derechos sexuales.
“Los jóvenes son seres sexuales (…) Tienen necesidades, deseos, fantasías y sueños sexuales”, afirma un documento desarrollado por IPPF.
«Existe una idea errónea de que los jóvenes no son, o no deberían ser, seres sexuales, con excepción de ciertos grupos, como los jóvenes casados o los jóvenes mayores de cierta edad», afirma el documento, titulado «¡Exclamación!».
«Es importante que todos los jóvenes de todo el mundo puedan explorar, experimentar y expresar su sexualidad de manera saludable, positiva, placentera y segura».
El documento insiste en que los niños pueden tomar decisiones sobre el sexo sin la “interferencia” de los padres.
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