El senador Ted Cruz (R-Texas) dijo que él y una delegación de 17 senadores republicanos visitarán el viernes la desbordada instalación temporal de migrantes en Donna, Texas, como parte de su próxima gira por la frontera sur de Estados Unidos.
Cruz había anunciado previamente que encabezaría la delegación de legisladores para visitar la frontera entre Estados Unidos y México en medio de una afluencia de cruces fronterizos ilegales, particularmente de menores no acompañados. El desbordado centro de Donna fue noticia esta semana después de que se difundieran a los medios de comunicación fotos de niños en el centro durmiendo en condiciones de hacinamiento, en colchonetas o en el suelo.
«Mañana por la noche, 18 senadores viajarán a la frontera sur, a Texas, para ver de primera mano la crisis que se está desarrollando, para ver de primera mano a los más de 100,000 inmigrantes ilegales que fueron detenidos el mes pasado, para ver a los más de 15,000 niños que están bajo la custodia de la Administración Biden en este momento», dijo Cruz a los periodistas en una conferencia de prensa el miércoles.
Añadió que lamentaba la decisión del gobierno de Biden de seguir prohibiendo a los reporteros ir a la frontera para observar las condiciones y el funcionamiento de las instalaciones de procesamiento de migrantes.
«Hay una razón por la que no quieren a la prensa allí. Y les pido a todos ustedes que piensen por un momento cómo reaccionarían, cómo reaccionaría su cadena, cómo reaccionaría la MSNBC si la Administración Trump dijera: ‘No se permite la presencia de la prensa en la frontera'», dijo Cruz. «Habrían perdido la cabeza. Se hubieran vuelto locos y estarían gritando a los cuatro vientos durante todo el día. Eso es lo que Joe Biden les está haciendo ahora mismo, y lo está haciendo porque le aterra que la gente vea las condiciones inhumanas, que vea las tragedias humanas».
La Casa Blanca ha dicho que siguen comprometidos con ofrecer transparencia sobre la situación en la frontera, pero aún no han ultimado los detalles sobre cuándo se concederá un mayor acceso a los medios de comunicación. El miércoles solo se permitió que un equipo de televisión se uniera a una delegación del Congreso en las instalaciones de Carrizo Springs, Texas, que alberga a unos 700 adolescentes no acompañados.
Un grupo de legisladores demócratas también visitará las instalaciones de procesamiento de migrantes el viernes. El grupo, que estará encabezado por el representante Joaquín Castro (D-Texas), visitará las instalaciones de Carrizo Springs.
«El viernes, encabezaré una delegación a las instalaciones de Carrizo Springs para niños no acompañados en la frontera, para garantizar un trato humano y un proceso ordenado para unir a los niños con sus familias», dijo Castro anteriormente esta semana.
La administración está en una carrera contra el tiempo para abordar la creciente crisis, ya que los cruces fronterizos ilegales siguen aumentando. Mayorkas reconoció la semana pasada que Estados Unidos está «a punto de encontrar más individuos en la frontera suroeste que en los últimos 20 años».
El presidente Joe Biden, que prometió revertir las políticas de inmigración de su predecesor durante su campaña, rogó recientemente a los migrantes centroamericanos que se quedaran en su «pueblo o ciudad o comunidad» en lugar de hacer el peligroso viaje para cruzar ilegalmente a Estados Unidos.
Al asumir el cargo, Biden revirtió varias políticas migratorias de la era Trump, incluyendo el importante Protocolo de Protección al Migrante de su predecesor, que buscaba acabar con la problemática política de «captura y liberación» y al que se le atribuye haber frenado significativamente el flujo de inmigrantes ilegales en 2019. En un retorno a las políticas de la era Obama que facilitan la «captura y liberación», los menores no acompañados están siendo liberados en el país.
Biden delegó este miércoles a la vicepresidenta Kamala Harris la principal responsabilidad de intentar abordar la crisis fronteriza, asegurando que es la persona «más cualificada» para manejar la situación.
“Este aumento ha sido considerable, pero la vicepresidenta ha aceptado (…) dirigir nuestro esfuerzo diplomático y trabajar con esas naciones para que acepten a los repatriados y mejorar la implementación de la ley de migración en sus fronteras”, dijo Biden, de acuerdo con los reportes.
Hasta el 23 de marzo, más de 16,500 niños migrantes no acompañados estaban bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) o del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS, por sus siglas en inglés), según la Administración para Niños y Familias del HHS.
Cruz dijo que ha estado en la frontera muchas veces y ha observado las tragedias humanas que ocurren en medio de la crisis, incluyendo las agresiones y las condiciones de hacinamiento.
«El propósito de este viaje es ayudar al pueblo estadounidense a entender la tragedia que se está produciendo», dijo.
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