Altos funcionarios de inmigración de la administración del presidente Joe Biden dijeron la tarde del jueves que están preparados para reiniciar el programa «Permanecer en México» de la era Trump en noviembre, siempre que México acepte cooperar.
La Administración de Biden ha hecho «progresos sustanciales» hacia la reimplementación del programa, formalmente conocido como Protocolos de Protección Migratoria (MPP), dijeron los abogados del gobierno a un juez estadounidense en Texas. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) ha mantenido conversaciones con México, ha finalizado los planes operativos necesarios para reimplementar el MPP, ha preparado los tribunales de inmigración y ha emitido los contactos necesarios para construir instalaciones de audiencia cerca de la frontera, dijeron.
«El DHS prevé estar en condiciones de reimplementar el MPP a mediados de noviembre, en función de las decisiones que tome México», se indica en la solicitud.
El programa depende de la cooperación de México porque obliga a los solicitantes de asilo de algunos países a esperar en México hasta que sus solicitudes sean atendidas por jueces estadounidenses.
México dijo en un comunicado el jueves que ha estado en comunicación con el gobierno de Estados Unidos sobre la inmigración, pero no mencionó específicamente el MPP.
El DHS bajo el expresidente Donald Trump encontró que el programa redujo en gran medida la inmigración ilegal, un problema que ha empeorado considerablemente con Biden después de que detuvo el programa y otros esfuerzos para hacer cumplir las leyes de la frontera.
Texas y Misuri presentaron una demanda contra el gobierno de Biden a principios de este año, alegando que la forma en que se detuvo el programa violó la ley federal. El juez de distrito Matthew Kacsmaryk, designado por Trump, estuvo de acuerdo y ordenó a la administración en agosto que reiniciara la política.
En la presentación más reciente del caso, los funcionarios de la administración culparon a México por su retraso en el reinicio del MPP. A finales del mes pasado, los funcionarios dijeron que realmente pondrían fin al programa. Tenían previsto emitir un nuevo memorando, pero solo si una orden judicial anulaba la decisión de Kacsmaryk, que por ahora fue confirmada por la Corte Suprema, pero que fue apelada.
En dos documentos presentados el jueves, los abogados del gobierno dijeron que estaban cumpliendo con la orden de Kacsmaryk porque estaban actuando de «buena fe» para restaurar el MPP, como él les había ordenado. No mencionaron el anuncio de septiembre, que se hizo una semana después de que Texas y Missouri pidieran al juez que impusiera una nueva orden a la administración, alegando que se negaban a cumplir la anterior.
«El gobierno está aplicando la orden judicial de buena fe y tiene derecho a la presunción de buena fe en sus acciones», dijeron los abogados.
Mark Krikorian, director ejecutivo del Centro de Estudios de Inmigración, que aboga por una inmigración en menor cantidad, estuvo entre los escépticos de la posición del gobierno.
«El objetivo de la presentación es: ‘Por favor, su señoría, no nos declare en desacato'», dijo a The Epoch Times. «Creo que su verdadero objetivo es mantenerse a flote, hasta que otro juez les dé la decisión que ellos prefieren y/o México simplemente se niegue a cooperar».
La inmigración ilegal se ha disparado durante el mandato de Biden, superando las 200,000 detenciones en la frontera sur tanto en julio como en agosto. Todavía no se han publicado las cifras de septiembre.
Si se volviera a aplicar el MPP, su impacto dependería de la amplitud del nuevo programa, dijo Krikorian.
«Podría marcar una diferencia significativa en la reducción del número de inmigrantes ilegales que llegan a la frontera», dijo. «Porque su objetivo es ser liberados en Estados Unidos. Si no consiguen eso, entonces no es tan atractivo intentarlo».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
