La legislatura de Arizona cerrará una semana después de que Giuliani diera positivo por COVID-19

La legislatura de Arizona cerrará una semana después de que el abogado del presidente Donald Trump, Rudy Giuliani, diera positivo por COVID-19.

«Debido a la abundancia de precauciones para los casos recientes y las preocupaciones relacionadas con la COVID-19, el edificio de la Cámara estará cerrado durante una semana a partir del lunes 7 de diciembre», dijo el presidente de la Cámara de Arizona, el republicano Rusty Bowers, en un mensaje a sus colegas y a miembros del personal el domingo.

«Nadie tendrá permiso para trabajar o reunirse en el edificio. Todos los miembros y el personal deben realizar todo el trabajo y programar las reuniones a distancia», añadió.

Un portavoz del Senado estatal dijo a los medios de comunicación que el organismo también pausaría las gestiones que se hacen en persona durante una semana.

El presidente Donald Trump anunció el domingo que Giuliani, de 76 años, había contraído la COVID-19, la enfermedad causada por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).

Giuliani más tarde escribió en las redes sociales que «está recibiendo gran atención y se siente bien».

Giuliani estuvo en Arizona el 30 de noviembre para una audiencia pública.

Según el equipo legal de la campaña de Trump, Giuliani dio negativo en dos ocasiones inmediatamente antes de su reciente viaje, que lo llevó a Arizona, Michigan y Georgia.

«El alcalde no experimentó ningún síntoma[, y] no dio positivo en el test de COVID-19 hasta más de 48 horas después de su regreso», dijo el equipo en un comunicado, y añadió que, según las directrices actuales de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), ningún legislador de ningún estado ni ningún periodista está en la lista de búsqueda de contactos.

El rastreo de contactos se refiere a alertar a las personas que estuvieron en contacto cercano con alguien que dio positivo en el test de COVID-19.

«Otros miembros del equipo, que han tenido contacto cercano según se define [en las directrices], seguirán las directivas de sus médicos y las directrices de los CDC sobre el autoaislamiento y los test», declaró el equipo.

Jenna Ellis, una abogada de campaña que ha estado trabajando estrechamente con Giuliani, dijo en Twitter que el diagnóstico no afectaría al trabajo de la campaña para impugnar los resultados electorales.

Ellis arremetió contra Bowers por cerrar la Cámara de Representantes, calificándolo de «absolutamente innecesario», y alentó a la gente a llamar a la Oficina de Bowers y a decir lo mismo.

Bowers no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.

La senadora estatal Andrea Dalessandro, demócrata, dijo que se iba a aislar y que se haría el test a finales de esta semana porque estuvo cerca de tres legisladores electos que estuvieron presentes durante la audiencia pública en la que testificó Giuliani.

«No estoy enferma. Estuve cerca de tres personas que estuvieron con Giuliani. Me quedaré en casa y me haré el test a finales de esta semana», escribió en Facebook.

Las audiencias de la legislatura estatal incluyeron testigos, expertos y abogados de campaña, y convencieron a varios republicanos para que pidieran una auditoría del software y del equipo electoral del Condado de Maricopa.

Bowers, por su parte, dijo que se oponía a las peticiones que pretenden anular los resultados de las elecciones.

«El Estado de derecho nos prohíbe» aprobar electores para un candidato que no ganó el estado, escribió Bowers, citando la ley de Arizona que requiere que los electores del estado emitan sus votos para los candidatos que reciban la mayor cantidad de votos en las elecciones estatales.

El candidato presidencial demócrata Joe Biden venció al presidente Donald Trump por menos de 11,000 votos en Arizona, según el recuento actual.

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